EL ÚLTIMO PRIMER BESO

"Superable pero inolvidable"

CAPÍTULO 30

Al llegar al último escalón levantó su mirada y encontró a la hermosa y sencilla mujer que le había robado el sueño durante tanto tiempo y había sido difícil quitar de su mente luego de aquel extraño episodio, en realidad no lo había conseguido y comenzaba a sospechar que este viaje empeoraría las cosas. Devolvió su mirada al celular espantando estas ideas de su mente y susurró un –Buenos días- -Hola Lou- contestó cálidamente luego de tomarse un momento para escoger sus palabras ahora, fue él quien se sorprendió, no esperaba que ella respondiera de esa manera, imaginaba que la próxima vez que dirigiese sus palabras hacia él intentaría sonar fría e indiferente, pero ocurrió todo lo contrario. Quizás estaba equivocado y en realidad encontraría la ocasión para solucionar las cosas o al menos intentar reconstruir su amistad. -¿Cómo has estado?- cuestionó ella con timidez -Eh… Yo, no… Debería ser yo quien preguntara ¿Te sientes mejor?- -Lo estoy- -Bien- evitó observar a los ojos -Escucha yo…- intentó continuar pero una llamada entró a su celular, sus miradas se cruzaron un momento -Contesta, quizás sea importante- lo animo -Lo siento- Tia subió los escalones y entró a su habitación.

Se asomó a la ventana, a lo lejos podía ver a su hermano y su invitado regresar de cabalgar guiados por Liam. Él reía, el chico de ojos azules, su “ex novio”, esas palabras sonaban extrañas y dolorosas pero inmediatamente la transportaron en el tiempo hasta aquel día, donde lo sucedido expresó que su relación había terminado y ambos adoptaron aquellos títulos, todo estaba más que claro o más bien, nada quedó claro ¿se suponía que debían olvidar todo lo que vivieron juntos? ¿Debían comportarse como dos completos extraños? desde ese momento en adelante ¿lo único que tenían en común era la amistad que tenía con su hermano? <<¡No!>> ¿Por qué tirar a la basura aquellos años de amistad que luego los llevaron a otro nivel? Él no hizo nada demasiado malo, nada que mereciera una pena como la que ella quizás había definido como su sentencia. En su momento se hizo cargo de sus errores pero ella lo había castigado sólo por el hecho de ser un hombre perdidamente enamorado, enamorado de una mujer que en algún momento dejó de ser ella o jamás lo fue. Entre ellos no debería haber rencor ¿Lo hay? Ninguno dijo nada semejante a ese sentimiento, probablemente jamás lo dijeron porque no tuvieron la oportunidad de volver a hablar después de ese lejano episodio. La pesadilla desarrollada la noche anterior regresó a la mente de Tiana ¿será real y su subconsciente intenta explicar de algún modo lo que sucederá cuando por fin crucen palabras? Visto de alguna manera, es algo absurdo, pero de otra, tendría razones por las cuales estar enojado con ella, claro que podría. Todas esas preguntas inundaron su cabeza y le provocaron incertidumbre y un leve dolor de cabeza, los chicos cruzaron la puerta principal y la observaban tomar su cabeza entre sus manos –¿Te encuentras bien?- preguntó Liam –Si, no es nada- cobarde evitó mirar a Louis a los ojos, no sabía si le guardaba rencor o no, pero no tenía el coraje para averiguarlo averiguarlo, aún. Esperaría a que se presente el momento adecuado para tomar las riendas. Aunque esa idea le provocaba algo de temor, se limitó a mirar el suelo, con una expresión perdida en su rostro –Conozco a alguien que no está de buen humor, creo que está algo triste, ¿me acompañas al establo a intentar subirle el ánimo?- consultó Liam dirigiéndose a Tia, ella sonrió –Seguro. Nos vemos luego chicos- se despidió y salió junto a Liam.

En el establo:
-¡Hey! ¿Estás triste amigo?- cuestionó mientras se acercaba al caballo, este se acercó aún más a ella, inclinó su cabeza indicando que quería recibir caricias, ella entendió y posó una de sus manos sobre él y comenzó a acariciarlo, no encontró rastro alguno de frustración o señal de tristeza, al contrario, estaba en perfecto estado –Liam, no creo que este triste, míralo está más que feliz- dijo dirigiendo la mirada a su amigo –Lo sé. Pero en realidad no me refería a él- lo observó confundida –¿Por casualidad conoces a alguien más que pueda estar triste?- preguntó mientras se apoyaba en el muro, un momento después Tia captó la indirecta y apartó su mirada hacia el suelo, un suspiro fue suficiente para que Liam confirmara sus sospechas, algo agobiaba a su mejor amiga –Sabes que puedes confiar en mí- ella asintió y se paró a su lado –Eres muy astuto, me descubriste, pero descuida es algo tonto- intentó minimizarlo -Sea lo que sea, te hace mal, te noto algo distante, en especial con tu ¿novio?- rápidamente dirigió su mirada a Liam, él enarcó sus cejas –No Liam, él no es mi novio. Ya no lo es- respondió dulcemente con algo de melancolía –Oh, lo siento. Jamás comentaste que habían terminado- -Lo olvidé, lo siento- -No tienes que disculparte, simplemente olvidaste decirme a mí, tu mejor, mejor amigo del mundo, quien al fin recupera el primer lugar respecto a tu atención que habías terminado con tu amado novio el cual te hacía, hasta donde me habías contado, extremadamente feliz- sonrió -¿Estabas celoso?- -¡Por supuesto que lo estaba! Pero ese es otro tema. Entonces, tiene que ver con él- -¿Qué tiene que ver con él?- -Tu estado de ánimo- -Odio que no dejes pasar nada por alto- él rió –Sólo dilo, parece ser algo que te inquieta demasiado- suspiró resignada pero decidida a hablar –Terminé con él de una manera, dramática, y no le di la oportunidad de defenderse o replicar nada. Desaparecí de su vida y él de la mía, o eso era lo que creía- -Claro ¿Podrías explicarte mejor? Vamos tienes que sacarlo completo, no por partes, no funciona así. Estoy dispuesto a escucharte- ella se sentó en el suelo y Liam la imitó -Bien, hace casi dos meses fui a su casa y le dije que fuera en busca de su amor verdadero, no me refería a mí. Ambos sabíamos que él se acercó a mí para intentar superar la historia con una chica, primero como un amigo y luego el tiempo hizo que nuestra relación se hiciera cada vez más fuerte, comenzamos a sentir cosas y me propuso ser su novia, acepte, pero pasaron los años y el último tiempo las cosas estuvieron complicadas y supe que seguía sintiendo algo por su antigua novia, algo diferente, lo único que quería era que fuese feliz y pensar que conmigo no lo era como debería me devastaba- él escuchaba atento, al terminar el relato Tiana no pudo evitar dejar caer algunas lágrimas, pero Liam se encargó de secarlas –Hey, No llores- -No esperaba verlo aquí. Harry no me dijo que vendría. Seguro está enfadado porque lo dejé hablando sólo en su habitación aquel día- -Tranquila, todo va a mejorar. Nadie puede enfadarse contigo, no demasiado- ella se aferró a él y este rodeó su cuerpo con sus brazos. Necesitaba un abrazo de su mejor amigo, caricias que le asegurasen que tenía a alguien a su lado que no soltaría su mano jamás –Gracias por escucharme, eres el mejor- -Lo sé- respondió con aires de superioridad, ella rió –Ahora si aceptas un consejo creo que lo mejor que puedes hacer, y debes hacer es hablar con él, intenta explicarle claramente que fue lo que sucedió y escucha lo que tenga para decirte. No creo hayas sido la única herida de esta guerra- -Creo que tienes razón, gracias por escucharme y levantar mi ánimo- -Para eso estoy- -Genial. Pero antes tomaré represalias contra mi hermano- ambos rieron –No manches la alfombra con su sangre- -No te preocupes, sólo me divertiré un poco- respondió con una mirada pícara.