Las semanas siguieron pasando lentamente. El tiempo era lento en la escuela y cuando Justin y Kimberly estaban juntos parecía que se acortaba cada vez mas. Dicen que cuando disfrutas el tiempo, mas rapido termina. Y eso pasaba con Justin y Kim.
-KIM!- Grito Justin desde una punta del pasillo de la escuela. Kimberly se giro a mirar en su dirección mientras cerraba su casillero.
No se dió cuenta en que momento Justin comenzo a correr hacia ella.
Kimberly sonrió hacia Justin.
-¿Que ocurre tonto?- preguntó.
-¿Tonto?- fingió estar llorando. -Okay, okay. Tengo un regalo para ti.- sacó del bolsillo de su sudadera una pequeña cajita. Kim sonrió mientras veía a Justin.
-Feliz cumpleaños.- le entregó la cajita, hecho eso, beso la mejilla de Kim mientras tambien le daba un abrazo y se retiraba del lugar.
Ansiosa por ver lo que contenía la cajita, la abrió. Dentro había un collar con un colgante, era un corazón partido a la mitad. Esa parte decía "Te" y detrás tenía grabado una "J". Kimberly sonrió aún más y se puso el colgante.
En cuanto se dió cuenta, comenzo a caminar en busca de Justin. Cuando lo encontró, corrió hacia el y lo abrazó.
-¡Justin!- chilló Kim -Gracias.
-De nada, linda.
Kimberly se separó de Justin y lo vio de frente, en su cuello llevaba la otra parte del corazón que le había obsequiado a Kim.
Ella miro el colgante y lo tomo con sus dedos. Se quedo sorprendida al ver que la otra parte decía "Amo". Justin lo noto.
-Puedes quitártelo si quieres.- dijo cortante y apartando la mano de Kim, dirigiendo sus manos hacía su cuello para quitar el colgante. Kim lo detuvo.
-¿Por que me lo quitaría? Me encanta.- sonrió Kim.
El corazón de Justin latió fuerte, un escalofrío paso por todo su cuerpo. Eso pasaba cuando veía a Kimberly sonreír, siempre esa maldita sensación.
Sus miradas se encontraron, ambos sonreían a medida que se acercaban con cada paso.
-Esta bien eso.- murmuró Justin. -Es lo que siento por ti, cariño.
Sin una respuesta o reclamo por parte de Kimberly, Justin acortó la distancia y besó sus suaves labios.