El popular ಞಞ♥ Adaptada ♥ಞಞ TERMINADA

capitulo 27 (maraton 10/10)

  MARATON 10/10
CAPITULO 27
—Dale —insistió Sebastián
—Ok —dije resignada
—Vamos entonces —dijo Sebastián
—Hasta mañana chicos —abrace a Ale —Descansa
—Igual tú te quiero
—Y yo a ti
—Que ternura —dijo Jaramillo
—Hahahahaha gay —dijimos Sebastián y yo
—Vamos —me dijo Sebastián
—Ok
El camino al cuarto de Sebastián fue en completo silencio pero no era incomodo ya me estaba acostumbrando en estar así, con Justin teníamos muchos momentos en silencio pero no eran desagradables sino mas bien interesantes llegamos a su habitación.
—Y Mario... —hasta ahora no me había dado cuenta de que ni Paisa ni Mario estaban
—Está en una cena con sus padres para presentarles a Laura o algo así —se tumbo en su cama
—Y Paisa
—Crees que luego de lo que te hizo lo iba a dejar dormir aquí —se sentó
—Pero es tu "amigo" —le dije haciendo comillas con mis manos
—Era —me vio serio
—Igual a lo mejor estaba muy enfadado y pues por eso lo hizo —levante los hombros
—Ni siquiera así como se atreve a golpearte
—Pues bueno ya no quiero hablar de eso
—Ni yo —giro los ojos
—Entonces si Mario no viene ojala no le moleste que duerma en su cama
—No creo —me sonrió
—Bueno hasta mañana Sebastián descansa
—Tu igual —me abrazo
Admito que me agarro algo desprevenida pero igual disfrute del abrazo sus brazos eran bastante cálidos me hubiera gustado que durara mas el abrazo pero solo fueron unos instantes luego cada uno se acostó, las cama de Mario y Sebastián estaban separadas por una mesa así que prácticamente quedaban pegadas la una de la otra era algo incomodo pero no me importo estaba muy cansada como para pensar en eso...me la pase casi toda la noche dando vueltas y llorando como si se me fuera a acabar el mundo pero así lo sentía una parte de mi quería entender a mi padres pero la otra no quería entenderlos tuvieron dieciséis años para contarnos todo y no lo hicieron ni planeaban hacerlo si tal vez mi hermana y yo no hubiéramos escuchado aun seguiríamos pensando que somos hijas de ellos me tapaba la boca tratando de no despertar a Sebastián aunque no se había movida ya hace rato así que supuse que estaba dormido...
—Ok ya no aguanto más —dijo Sebastián se levanto de su cama y se acostó a mi lado abrazándome muy fuerte —Creíste que no te escuchaba
—Perdona no quería despertarte —dije tratando de calmarme
—Ni siquiera me he podido dormir
—Perdón —susurre
—No pidas perdón ven acá —estaba entre acostado y sentado yo me recosté en su pecho de nuevo colocando mi rostro en su cuello
—Lindo olor —dije inhalando su aroma no me había dado cuenta lo rico que olía Sebastián no sabía si era su propia esencia o era un perfume pero era delicioso era dulce pero a la vez fuerte y suave
—Aroma natural —me dijo y luego rio
—Hahahahaha —sonreí un poco pero me desmorone de nuevo y empecé a llorar mas fuerte
—Tranquila —me abrazo más fuerte —Relájate intenta descansar
—No es tan fácil —dije secándome un poco las lágrimas o el buzo de Sebastián terminaría empapado
—Lo sé solo inténtalo —me acaricio la espalda
—Ok —cerré los ojos y suspire
—Sueña conmigo —me dijo luego de un rato espantando mi sueño
—Tonto —susurre y volví a cerrar los ojos
—No enserio me gustaría que soñaras conmigo —creí que era imposible que me pegara mas a el pero así lo hizo
— ¿por qué? —pregunte confundida
—Porque yo sueño contigo —me susurro en el odio
—Y eso se debe a que... —subí mi rostro para mirarlo
—Te quiero más de lo que pensaba —cerro los ojos
— Sebastián...—me levante de la cama y camine por la habitación
También se levanto y fue detrás mío me giro para mirarlo de frente —Cuantas veces tengo que decírtelo
— ¿Qué? — le pregunte
—Que me encantas que creo que me estoy volviendo loco por ti que las últimas dos semanas fueron una tortura para mí no poder hablar contigo no poder abrazarte no poder compartir contigo créeme yo jamás había sentido esto por alguien —por arte de magia una sonrisa cubrió mi rostro pero disimule no sé porque pero había sentido algo muy lindo al escuchar sus palabras
— Sebastián yo no... —trate de decir
—No digas que no sientes lo mismo porque o si no estarías mintiendo —sonrió
—Como lo sabes —le pregunte
—Tus ojos tomaron un brillo especial cuando te lo dije —me sonrío pero no hubo respuesta de mi parte tal vez Sebastián tenía razón
Sebastián se fue acercando a mi lentamente hasta que sus labios tocaron los míos me beso lentamente recorriendo cada parte de mi boca con su lengua mientras colocaba una mano en mi espalda para acercarme a él mis brazos los coloque alrededor de su cuello el beso fue maravilloso hace mucho tiempo no sentía algo tan mágico como las sensaciones que pasaban por mi cuerpo en este momento no quería que nunca acabara Sebastián era frio y duro pero cuando me besaba era dulce y delicado el acaricio mi mejilla con la otra mano luego de un tiempo nos separamos por la falta de aire...
—Puede que tengas razón —dije con nuestras frentes unidas
—La tengo —acaricio mi rostro y sonrío
—Pero ahora no tengo cabeza para eso —me separe y lo mire
—Lo se te entiendo solo quiero que lo sepas —me sonrío
—Ahora si podemos dormir
—Ok —se dirigió a su cama
—Puedo pedirte un favor —le dije antes de que se acostara
—El que quieras —se giro para verme
—Puedo dormir contigo —agache la mirada avergonzada
—Por supuesto ven —me tomo de la mano y me abrió espacio en su cama
—Gracias —dije acostándome
—Mejor para mí —se acostó a mi lado
—Ok —me voltee y me acomode en la almohada dispuesta a dormir
—Yo soy más cómodo que la almohada
—Lo dudo —me reí
—Compruébalo —me pidió
—No quiero —reí
—Compruébalo —me giro y me puso sobre su pecho
—Ok si lo eres pero solo porque tu saco es más suave —hundí mi rostro en su cuello de nuevo me acababa de volver adicta a su aroma
—Si claro —dijo sarcástico
—Presumido —le dije y le di un beso en el cuello sentí que Sebastián se tenso debajo de mi
—Hahahahaha hasta mañana —me reí y lo abrace
—Descansa —me abrazo
Luego de eso Sebastián jugo un rato con mi cabello mientras acariciaba mi espalda y poco a poco me fui quedando dormida no soñé nada solo me sentía tranquila como si nada existiera esa noche en realidad descanse...
—______ despierta —me desperté con las caricias de Sebastián no me había movido un centímetro de él en toda la noche
—Buenos días —dije estirando mis brazos y sentándome en la cama
—Como amaneciste —me pregunto Sebastián a mi lado
—Mejor y tu —respondí
—De maravilla —sonrío
— ¿qué hora es? —pregunte
—Las 11 —dijo Sebastián mirando su reloj
—Con razón tengo tanta hambre —dije sobándome el estomago
—Quieres ir a desayunar —me pregunto
—Si
—Vamos —me ayudo a levantar
Sebastián me cargo en su espalda hasta que llegamos al patio pues no tenia zapatos y tenía tanta hambre que no quería ir hasta mi habitación todos nos miraban sorprendidos pero en realidad ya ni me interesaba la gente inventaba tantos chismes que uno más uno menos que diferencia podían hacer
—Hay no hay están mis padres —ya habíamos llegado al patio y Sebastián me bajo de su espalda
—Insisto en que deberías hablar con ellos —dijo detrás mío
—Lo sé
—Entonces ve —me empujo por los hombros pero yo me gire
—Esperemos a que llegue Ale —hice una mueca
—Ok —me sonrío
—_____ puedo hablar contigo un minuto —dijo Arango a mis espaldas
—Hola Arango
—Ash —dijo Sebastián fastidiado
—Solo será un momento —dijo Arango
—Si claro —era lo menos que podía hacer después de terminar con el
—Bueno yo...amm voy por allá —dijo Sebastián y se fue
—Quería pedirte disculpas —me dijo Arango
— ¿Por qué? —pregunte sorprendida
—Mi actitud de ayer fue bastante inmadura
—No te preocupes —le sonreí
—Además yo debía apoyarte no reclamarte
—Ya todo paso además yo también tuve algo de culpa
—Claro que no
—Si nunca debí hacerte falsas ilusiones
—Eso ya no interesa amigos... —extendió sus brazos
—Claro —lo abrace sonreí y mire por encima de su hombro se veía Sebastián que fulminaba a Arango con la mirada me dio risa
—Siento mucho lo de tus padres
—No te preocupes amm bueno debes irte
—Ok adiós —me dio un beso muy cerca de los labios —Lo siento
—No hay problema —Arango se alejo y le hice señas a Sebastián de que se acercara
— ¿Volvieron? —Me pregunto Sebastián
—No —empecé a disfrutar de los celos de Sebastián
—Y entonces
—Solo somos amigos —levante los hombros pero no tuve respuesta de su parte — ¿Celoso? —le pregunte
—No —dijo sin mirarme
—Claro que si —sonreí
—No
—Vi como te pusiste cuando me abrazo —me reí
—Es obvio que él no te ve como amiga
—Lo sé pero yo a él sí
—Ni siquiera pude reclamarle ni nada —dijo frustrado
—Hahahahaha —me reí
—Algún día serás mía —me acorralo en la pared
—Lo dudo —sonreí
—Así será —dijo con sus manos a cada lado de mi rostro
—Tienes mucha confianza en ti mismo —Quería jugar un poco con él le susurre al odio —Sabes...—dije mientras acariciaba su pecho e iba bajando mis manos
—Que... —Me acerque más nuestros labios rozaban subí mi pierna un poco rozándole su entre pierna con ella esto era demasiado divertido Sebastián estaba temblando y se estaba colocando algo caliente y eso que aun no le hacía nada
—A veces las cosas no son como tú quieres —me escabullí por un lado y salí de allí riéndome a todo lo que daba —¡¡¡Ale!!!! —Corrí hacia ella
—Hola —me miro extrañada por mi risa
—Hola _____ —me dijo Jaramillo
—Y Sebastián —pregunto Ale
—Por allá —lo señale un poco más atrás el se encontraba con la boca abierta y mirando hacia el piso no se había movido ni un milímetro solo se había girado y se había recostado en la pared
— ¿qué le paso? —Pregunto Jaramillo divertido
—Cayó en mi juego —empecé a reírme pero ambos me vieron confundidos — Luego les explico
—Voy a traerlo —dijo Jaramillo
—Que le hiciste —me pregunto Ale
—Nada solo utilice mis atributos —sonreí
— ¿por qué?
—Dijo que algún seria suya y el demostré que es más complicado
—Hahahahaha mira como lo dejaste
—Nuestros padres llevan en esa mesa de allá mucho tiempo sentados —dije cambiando de tema y apuntando a la mesa de nuestros padres
—Deberíamos hablar con ellos no
—Si eso mismo te iba a decir —le dije
A medida que nos íbamos acercando a nuestros padres mi corazón latía mas fuerte como si se fuera a salir estaba cada vez más cerca de la verdad o del desconcierto...