El popular ಞಞ♥ Adaptada ♥ಞಞ TERMINADA

capitulo 56 (maraton 1/5)

  Capitulo 56
Era John mi ex novio tuvimos que terminar cuando yo fui a Inglaterra estaba con una de las chicas que lo habían perseguido por varios años en la secundaria no me afecto en lo absoluto solo que me sorprendió que saliera con ella el siempre decía que era intensa y fastidiosa y que no la encontraba sexy al parecer el salía con cualquiera que tuviera dos piernas y se moviera me reí
— ¿De qué te ríes? —me pregunto Sebastián confundido
—No me pongas atención —vacile
— Y de que era el mensaje —me pregunto
—Bueno era una foto de mi ex novio con una chica que según él jamás saldría con ella —levante los hombros
— ¿Y eso te afecta? —me pregunto antes de girarse para verme pude ver la preocupación en su rostro
—En lo absoluto —sonreí
— ¿Por qué terminaron? —me pregunto Sebastián
—Bueno porque yo me iba a mudar a Inglaterra el "prometió esperarme" cosa que resulto totalmente falsa ya que a la semana estaba saliendo con alguien más —me burle de cómo sonaba
— ¿Lo amabas? —me pregunto
— Sebastián estas celoso de mi ex novio —pregunte con el ceño fruncido el solo se limito a pronunciar un leve "mmm" —No...no lo amaba amar es un sentimiento muy grande pero si lo quería y mucho bueno más bien quería a quien yo creía que era el ósea a una persona que no existe es decir que John es para mí un completo desconocido —sonreí
—Sinceramente que sientes por mi teniendo en cuenta que acabas de decir que "amar es un sentimiento muy grande" —siguió mirando la carretera
—Tú ya lo sabes —sonreí
—Pero quiero que lo digas —sonrió también
—Que siento por ti te lo voy a resumir en las siguientes palabras yo te amo —sonreí
—El sentimiento es mutuo princesa —me lanzo un beso en el aire
El día entero estuvimos recorriendo Vancouver una ciudad hermosa definitivamente tenia jardines preciosos y el aire era limpio suave diferente de muchos otros países cuando llegamos a casa estaba rendida no quería saber nada del mundo solo quería dormir pero hacia un poco de calor y la piscina se veía extremadamente provocativa
Me quite el vestido mientras Sebastián entraba a la casa y entre delicadamente a la piscina el agua inmediatamente relajo mis músculos se sentía muy bien además estaba caliente Sebastián se giro para ver porque no lo seguía y me encontró en medio de la piscina
— ¿Qué haces? —me pregunto
—Se veía muy provocativa —puse mis brazos en una de las esquinas y recosté mis cabeza en ellos mientras el resto de mi cuerpo reposaba en el agua Sebastián se acerco al borde donde estaba recostada se quito los zapatos y metió las piernas en el agua sentándose en aquel borde como tenia bermuda esta no logro mojarse luego me hizo una seña para que descansara en su piernas y así lo hice
Al cabo de un rato empezaba a quedarme dormida Sebastián acaricia mi cabello y eso no ayudaba mucho a que me mantuviera despierta entonces me retiro con delicadeza abrí los ojos para verlo deshacerse de su ropa a excepción de unos bóxer y se metió al agua
—Ya me estaba dando frio ahí afuera —tembló
—Me espantaste el sueño —me queje
—Ven —me jalo y me acerco a su pecho —Recuerdas las noches en la piscina del Ampleforth —sonrió maliciosamente
—Como olvidarlas —negué con la cabeza y enrolle mis piernas en su cintura —Esto se parece mucho —me reí
—La diferencia es que aquí nadie nos va a encontrar —susurro en mi oído
—Me estas proponiendo algo —lo mire fijamente el solo levanto los hombros y sonrió
—Aquí...ahora —dije
— ¿Por qué no? —sonrió
—Creo que hablar de ello antes de hacerlo arruina el momento —hice una mueca
—Entonces dejemos de arruinarlo —dicho esto atrapo mis labios
En qué diablos estaba pensando no podíamos no aquí en el agua no era muy experimentada pero bueno condón en el agua eso no sonaba muy bien tal vez tendría que tomar pastillas al día siguiente o Sebastián se lo podría poner afuera y luego entrar pero eso sería ridículo sus labios me hicieron olvidar todo tipo de preguntas me deseaba tanto como yo a él entonces Sebastián me recostó en el muro tomo mi cuello en sus labios mientras una hábil mano suya viajaba hacia mi monte de Venus gemí al sentir su mano allí un cosquilleo se apodero de mi entre pierna sensaciones miles de sensaciones invadieron mi cuerpo mientras Sebastián recorría mi cuello con sus labios subí su rostro necesitaba sus labios la adicción que temía pero que cada vez crecía y se hacía más fuerte con un beso se podía expresar mucho más de lo que expresabas con las palabras sus manos recorrieron mi cintura con delicadeza entonces descansaron sobre mi cintura Sebastián jalo los nudos de los extremos de mi traje de baño y en dos segundos me encontré si el pensé que me sentiría incomoda pero era totalmente lo contrario sentí su mano recorrer mi punto G varias veces haciendo que mi cabeza fuera hacia atrás y que tuviera que agarrarme de sus hombros casi aferrarme a él las palabras salían de nuestros labios eso no tenía mucha importancia eran leves susurros de nuestros propios nombres entonces Sebastián se hundió en mi con delicadeza la sensación era maravillosa no se comparaba con nada se movía despacio disfrutando de la sensación pero sus movimientos se volvieron rápidos pero acompasados nada fuera de control mi cuerpo iba a explotar en cualquier momento los besos eran torpes ya que ninguno de los dos lograba mantener los labios cerrados eran gemidos compartidos hasta que por fin ambos gemimos tan alto que casi no pudimos reconocernos caí rendida en su pecho exhausta pero satisfecha
En la habitación casi no lograba mantener mis parpados abiertos el sueño me estaba ganando había sido un día agotador pero maravilloso Sebastián no tenía una muy buena expresión a mi lado algo le preocupaba me pude dar cuenta mientras veía como el analizaba el techo todo el tiempo y luego fruncía el ceño
— ¿Qué te pasa? —le pregunte acariciándole el rostro entonces se giro para verme
—Nada no te preocupes —me sonrió
—Vamos se que algo te pasa dímelo —le pedí
—______ es que bueno —suspiro antes de verme —No usamos protección
—Solo es eso —sonreí mientras tomaba su mano entre las mías
—Y lo dices tan relajada bueno he de admitir que un mini Villalobos seria genial pero no ahora no con todo este alboroto no cuando tenemos una vida por delante no cuando no estoy seguro de que pueda ofrecer no cuando...—empezó a decir pero me obligue a detenerlo
—Hey shhhhh cálmate no te preocupes no habrá mini Villalobos no estoy en mis días y tampoco estoy cerca además existen pastillas no te preocupes las tomare en la mañana relájate —le acaricie el rostro
—Hay dios mío volví a respirar —suspiro y se tumbo a mi lado
—Cuando te sientas así dímelo llevaba tiempo tratando de adivinar que pasaba por tu cabeza —me reí
—Así tomes las pastas y eso debemos admitir que fue una locura no volveremos a hacerlo sin protección —me dio un beso en la frente
—Lo sé a nuestra edad un bebe sería una irresponsabilidad y una locura —me reí
—Lo sé ahora ven acá vamos a descansar hoy fue un día...ajetreado —dijo atrayéndome a su pecho para que descansara mi cabeza en su cuello como todas las noches.
Me levante temprano en la mañana Sebastián dormía plácidamente sobre la almohada tome las pastas y decidí salir para dar un paseo tranquilo aprovechando que había un sol radiante, la brisa despeinaba mi cabello una brisa totalmente pura libre de contaminación algunos pastos se metían en mis sandalias y me picaban era un poco incomodo así que me quite las sandalias tuve una conexión con la tierra liberando todas aquellas cargas liberando todo estrés de mi cuerpo, pocas oportunidades como estas tenía en mi vida viviendo en Manhattan no encuentras muchos lugares así y en Inglaterra bueno hace un poco de frio como para disfrutar al máximo.
Definitivamente extrañaría muchas cosas de Inglaterra sus paisajes, su estilo hogareño, el café de Emily eso sería algo difícil de olvidar tal vez pudiera ir las próximas vacaciones al finalizar la Universidad suspire llevar mi vida de ahora en adelante iba a ser algo complicado no imposible pero complicado si tan solo hubiera una forma de volver al Ampleforth pensé muchas veces pero llegue a la conclusión de que es imposible no hay manera en que vuelva la decisión está tomada y ya no hay marcha atrás me acosté sobre el prado habían varias nubes adivinar su forma si estabas solo no era divertido era más bien aburrido me di la vuelta y apoye mi cabeza sobre los brazos y cerré los ojos disfrute del sol pegando en mis piernas la vista que tenía desde ese ángulo era una línea recta de prado y al fondo los establos pensé en dirigirme hacia ellos y tal vez montar un poco pero estaba tan cómoda que no hice el mínimo esfuerzo de moverme no sé en qué momento pero me quede profundamente dormida.
En cuanto me desperté al abrir los ojos me pude dar cuenta que Sebastián estaba a mi lado estaba mirando hacia el cielo me puse boca arriba y estire los brazos
— ¿Qué haces aquí? —le pregunte
—Creo que debería preguntarte eso yo a ti ¿Por qué te dormiste aquí? —me pregunto burlón
—En realidad no lo sé solo me dormí —hice una mueca
—No quise despertarte así que te deje dormir pero no te iba a dejar aquí sola —tomo una mi mano entre las suya
Pasamos casi toda la mañana tumbados en el prado hablando de distintas cosas y adivinando por supuesto la forma de las nubes
—Tengo hambre —me sobe el estomago
—Yo también...vamos a la casa — Sebastián se levanto del suelo y me ayudo a levantarme
Esta vez había elegido yo la película "Piratas del Caribe" el Capitán Jack Sparrow era un personaje del cual no podía evitar reírme era demasiado divertido estaba tan entretenida con la película que no me fije que Sebastián llevaba viéndome fijamente gran parte de esta
— ¿Por qué te enamoraste de John? —me pregunto de repente me gire para mirarlo confundida de qué diablos estaba hablando
— ¿Qué? —pregunte confundida
—Si porque te enamoraste de el —me dijo de nuevo
—Porque te interesa tanto el tema —lo vi fijamente
—Solo quiero saber —levanto los hombros
—Bueno pues porque solo sucedió eso es todo —levante los hombros
—Solo sucedió —repitió viendo hacia otro lado
—No vas a dejar el tema hasta que te lo diga verdad —pregunte el solo negó con la cabeza y rio
—El era tierno conmigo me hacía reír me apoyaba bueno y pues no lo se me parecía atractivo —hice una mueca —Pero bueno eso era solo una máscara —levante los hombros
— ¿Qué pasara cuando lo veas? —me pregunto porque le preocupaba tanto ese tema acaso estaría celoso
— ¿Por qué te preocupa tanto? —le pregunte tomando su rostro entre mis manos
—Llevo preguntándome lo mismo dos días —hizo una mueca
—No tienes por qué hacerlo yo no siento nada por el alguna vez lo sentí claro pero ya no además no creo que lo vuelva a ver —levante los hombros
—Vamos ____ cuando él se entere que volviste a Manhattan te buscara —me vio fijamente
—No lo creo —negué con la cabeza y Sebastián levanto las cejas —Ok es posible
—Y entonces —me dijo
—Entonces que —pregunte
—¿Qué pasara? —me pregunto de nuevo
—No lo sé pero supongo que nada además es poco probable que nos encontremos —sonreí
—Yo no lo creo —hizo una mueca
—Vamos Sebastián ¿Qué es lo que te preocupa? —acaricie su rostro
—Mmm —giro los ojos
—Crees que lo voy a ver y entonces me daré cuenta que nunca lo olvide y que es el amor de mi vida y entonces me casare con el tendremos hijos y seremos felices para siempre —dije en tono burlón mientras actuaba como en una telenovela
—_____ no te burles —me sentó de nuevo
—Entonces confía en mí —le pedí y luego me acerque a él y comencé a besarlo hasta que quedamos ambos acostados en el sofá que estuviéramos ambos en pijama aun siendo las 5 de la tarde hacia más cómodas las cosas
—Confió en ti pero no en él ni en lo que yo pueda hacerle —susurro dándome pequeños besos yo solo me reí
—Además ¿con quién estoy ahora? —susurre sobre sus labios
—Conmigo —respondió dándole un pequeño mordisco a mi labio inferior
—Y no tengo ganas de estar con nadie mas —dije riendo antes de que me besara
No sé cuánto tiempo paso solo sé que fue suficiente para que se acabara la película y me había perdido la linda vista de Johnny Deep pero había disfrutado al máximo de los labios de Sebastián provocativos demasiado provocativos
— ¿Quieres montar un rato? —me dijo luego de un rato mis primeros pensamientos fueron completamente obscenos sonreí con malicia
—A ti claro —le dije seductoramente
—No a mi no princesa —dijo besando mi cuello —Me refería a los caballos pero creo que tu idea está mucho mejor —continuo besando mi cuello
—De hecho me encantaría cabalgar un rato —sonreí y me levante aventándolo al suelo el solo rio y se levanto
—Está bien yo y mi bocota —se dio un golpe en la frente lo tome de la mano y caminamos hacia los establos
—Bien cual puedo elegir —le pregunte
— ¿No montaras conmigo? —me pregunto
—No —negué con la cabeza
— ¿Por qué? —me pregunto
—Porque quiero montar sola —sonreí y levante los hombros
—Vamos ____ monta conmigo —me dijo
—No —sonreí
—Por favor —hizo ojitos como diablos lo hacía podía pedirme que le trajera la luna y si hacia esa cara se la traía
—Está bien —suspire y ambos nos subimos a un caballo negro raro que a él le gusten los caballos negros me subí adelante y el detrás de mi
Cuando me desperté eran las 10 de la mañana ya habíamos dormido suficiente me levante y fui al baño me lave los dientes utilice el baño y lave un poco mi rostro me recogí el cabello y bostece cuando salí Sebastián estaba despierto ya sentado en la cama y frotándose los ojos con ambas manos
—Buenos días —lo salude
—Buenos días —me sonrió —Ven acá —me llamo
—Como amaneciste —me senté en sus piernas
—Mejor no pude haber amanecido —sonrió
Entonces se escucho un ruido que venía de afuera como si se hubiera cerrado una puerta bastante fuerte o algo así ambos nos exaltamos y luego nos miramos confundidos
— ¿Qué diablos fue eso? —le pregunte
—Seguramente la empleada dejo la puerta abierta y se cerró eso es todo —me dio un beso en la mejilla
—Deberíamos ir a ver ¿no crees? —le pregunte mientras me mordía el labio inferior
—No te preocupes no es nada —me acaricio las piernas me tomo de la barbilla y me beso
Entonces de nuevo otra puerta se abrió de golpe con mucha furia esta vez la de la habitación de Sebastián