-Hostia. –murmuro. –joder Lucas.
Me reincorporo deprisa dándole la espalda y me pongo la camiseta.
-Yo te mato cabrón. –se abalanza sobre Noah. Quien del susto se cae detrás de la cama.
-No, no Lucas por dios. Para. –me pongo delante de él.
-Ash aparta.
-Eh, eh, eh. Tranquilo. No estábamos haciendo nada malo.
-Mira, al otro no lo pillé, pero este no se libra.
-He cambiado desde entonces. No te preocupes. Ahora es diferente.
-Joder Ash –se revuelve el pelo. -Para la próxima cierra la puerta. Que estas cosas no son agradables de ver. Que eres como mi hermana pequeña.
-Bueno, soy adulta Lucas. Y soy una mujer con necesidades.
Bufó con resignación y luego una pequeño mueca de asco.
-No pasa nada hombrecito mío. –me acerco y le abrazo.
-Chicos, siento interrumpir este momento tan fraternal, pero estoy sangrando. –dice Noah.
-Jódete capullo. –murmura Lucas en mi hombro.
-¿Qué? –digo apartándome. Cuando me acerco veo que tiene un rasguño en su mejilla-¿Cómo te has hecho eso?
-Al caerme. Con la mesita.
Ya hay que ser torpe.
-Y tú y yo ya hablaremos. –dice Lucas yéndose.
-Vale. Te quiero.
Sin decir nada más sale del cuarto.
-Aún no sé cómo no han venido mis padres a ver este escándalo. –miro a Noah. –Hostia Noah.
Le siento en la taza del váter y busco alcohol y algodón.
-Solo es rasguño. –digo viendo su cara.
-SSSSS –se queja.
-Quejica. Pues tienes suerte de que no te haya pegado él.
-¿Sabe pegar?
-Claro. –río. –Cuando tenía ocho años nos apuntamos juntos a boxeo.
-Anda ya. –dice sorprendido.
-Sí y también hicimos un curso de enfermería un verano.
-Vaya.
-Hay muchas cosas que no sabes de mí.
-Habrá que solucionar eso. –me sujeta por las caderas y me sienta en su regazo. -¿Cuándo dejaste boxeo?
-Cuando cumplí catorce. Con el colegio o dejaba boxeo o baile. Y dejé boxeo.
-¿También bailas?
-Sí, lo dejé justo antes de ir al internado. Y también canto, pero eso se me da bastante peor. Y fui a patinaje, tenis, teatro, un curso de fotografía.–río.
-Vaya.
Me inclino y le beso.
-Yo sé hacer de todo. Ven.
-¿A dónde?
Volvemos a mi habitación y veo la hora son casi las seis de la tarde.
-¿Te apetece ver una peli y luego salir por ahí?
-Sí, claro.
(...)
-¿Me traes otro? porfi. –le digo a Noah.
Estamos en una discoteca Noah, Paula, Lucas y Yo. Sonia vino con nosotros pero se fue.
-Voy. Te presentaré a mi primo, que acaba de venir de viaje y lo vi al entrar. Así de paso lo saludo.
-Vale.
Paula está bailando animadamente con Lucas, lo cual me parece increíble ya que nunca se han llevado precisamente bien. Estoy apoyada en una mesa mientras veo como la genta baila y bebe. Normalmente el alcohol no tarda mucho en hacerme efecto, pero hoy parece que no es el día.
-Eh Ash. –grita Noah llamando mi atención por encima de la música. –Este es mi primo Izan.
Y ahí, siento exactamente como si me hubiesen dado un puñetazo en el pecho sacándome todo el oxígeno.
----------------------------------------------------------------------------------
Izan en multimedia
No olvidéis votar y comentar.
Os quiere, Cake ❤
ESTÁS LEYENDO
Tuviste que ser tú .COMPLETA.
Teenfikce¿Cómo actuarías tú si la persona en la crees confiar, te decepciona? Ash siempre fue una persona difícil, pero tras una ruptura complicada se vuelve desconfiada, e incluso algo escéptica. Noah, por su parte parece el típico chico guapo adicto a a la...