Treinta y cuatro

267K 23.6K 759
                                    

Lo peor no fue la constante opresión en mi pecho.

Ni siquiera las noches en vela recordándote.

O sentir un enorme vacío dentro de mí.

Sino leer nuestras viejas conversaciones.

Donde a veces llegué a ilusionarme.

Pero que todo se quedó en simples y vanas palabras.

Para el chico que nunca me amóDonde viven las historias. Descúbrelo ahora