-Eloy suena a nombre de chica .-use mi tono más burlón y esboce una sonrisa.
-Serás la chica que pronuncie mi nombre con ganas.-imito mi tono de voz
Okay. Eso no me lo esperaba, por lo tanto me atragante con mi propia saliva ¿me podía ver más estúpida?
-Lo siento-me disculpe tosiendo.
-Descuida, puedes sostener mi camisa ¿por favor?-lo mire incrédula y al instante se sacó su suéter por encima de la cabeza y me lo dio, lo tomé sin resultar sorprendida y me senté en un banquillo
Fue al otro lado de el salón y prendió los ventiladores, ya que salía un fuerte olor de el alcantarillado.
Pareció pensarlo un poco y hablo-Daremos un paseo-tomo su suéter y se lo coloco-Ven...
-¿Estas loco? Tienes qué terminar esto... ¿Para qué te ofreciste?-me cruce de brazos.
-Lo terminare morena, sólo hay que comprar varios codos y tubos.
¿Codos? Morena... ¿Me dijo morena?
-Morenita piel canela-corrigió y apretó mi nariz-Los codos se utilizan para enlazar; en este caso un tubo con el otro. ¿Sabes qué es un enlace?
-Obvio-dije poniendo los ojos en blanco.
-Sólo por si acaso-Tomo mis manos entre las suyas-Esto es un enlace más literal-apretó mi mano y salimos de el salón de ciencias.
-¿Es necesario tener las manos enlazadas?
-Si, ahora no hagas ruido. Déjame disfrutar el momento.
Me quede callada, no tanto por su petición solo porque necesitaba analizar el asunto... Nada más, no era porque Eloy me pareciera guapo, solamente era chistoso, y coqueto.
-¿A dónde vas?-me gire para encontrarme a Martín mirándome molesto.
-Holiwiss-salude sonriendo y su enojo creció, hasta que me di cuenta de lo que estaba pasando.
-¿A dónde vas?-repitió más calmado.
-Ella irá conmigo a comprar unas cosas para el salón de ciencias-explico Eloy.
-Ya veo-Sonrió y me tomo de mi otra mano soltando el agarre que tenía con Eloy.
-¿Qué?-pregunte.
-¿Porqué haces esto?
-Hacer... ¿Que?
-Que me enoje Cindy. ¿En serio es necesario verme frunciendo el ceño cada vez que te cruzas por mi camino?
-Bueno, si quieres no me cruzo más por tu camino así no tendrías que estas molesto. Además tu no me tienes que ver.
-No te tengo que ver pero lo hago.
-Pues no lo hagas-di media vuelta y sonreí tan falsamente como pude, y me subí al jeep rojo de mi acompañante.
-¿Quien es el?-mire a Eloy. Sinceramente no pude aguantar una carcajada.
-¿Acaso importa?-mire por la ventana.
-No me importa pero a ti si, ¿puedo saber?
-No.
......
-¿Quieres un helado?
-No.
-¿Quieres un burrito?
-No.
-¿Quieres unos zapatos?
-No.
-¿Quieres ser mi novia?
-No.
-¿Entonces que hago para que te bajes de mi auto?
-Ah. Yo, lo siento-abrí la puerta y salí de este.
-Bueno, ven. Te llevare a conocer una ferretería.
-Se como son las ferreterías.
-Si claro. ¿Qué venden en las ferreterías?
-Bombillos.-Sonreí como una niña pequeña y el río más fuerte.
-Ay si.-paso su brazo por mi hombro y caminamos animadamente.