El Asesino (3 temp) [Zayn y tu]

Capitulo 11.

 Las risas se le pasaron de pronto. Miró a Zayn como una niña pequeña. Caminó hasta él.

- Hola, mi amor. – lo saludó. Delicadamente besó la mejilla de Zayn, que ardía de la rabia. Este no respondió.

- ¿Cómo estás Zayn? – saludó Tom. Estiró su mano hasta la de él.

- ¿Qué hace él aquí? – preguntó brusco. __________ se volteó a mirarlo. Joder, sabía lo que estaba a punto de pasar.

- Zayn yo...

- Te pregunté algo. – farfulló. Sentía como los celos le subían a la cabeza.

- Tuve que venir por que ___________ ha recibido llamadas desconocidas, nada importante. – respondió Tom, que...lo había notado. No tenía nada que hacer ahí en ese momento.

- ¿Llamadas? – miró a ___________. - ¿Por qué yo no lo sabía? – sentía que verdaderamente no jugaba ningún papel, en su propia casa. - Y ¿Por qué él sí?

- Joder, Zayn, ¿vas a hacer un problema por esto?

- ¿Cuándo ibas a decírmelo?

Tom se aclaró la garganta. Incomodo. Por supuesto, debía irse, ahora más que nunca.

- Si tienes algún otro problema, no dudes en llamarme, ¿sí? - _________ asintió. Tenía miedo que algo se saliera de control. Que él, se saliera de control.

- Si ella tiene algún otro problema, va a hablarme a mí. – fue lo último que dijo. __________ cerró los ojos, un par de segundos. Zayn y sus celos, inaguantables. Acompañó a Tom hasta la puerta.

- Gracias. – susurró.

- No te preocupes. - ____________ cerró la puerta. Se volteó molestísima. Odiaba que Zayn se portara de esa manera. A pesar de que había aprendido que...esa era su forma de ser.

- ¿No vas a decirme nada? – le preguntó. Al observar como ella trataba de ignorarlo, a él, y a sus estúpidos celos.

- ¿Qué quieres que te diga?

- La verdad. ¿Qué hacía él aquí?

- Bueno, ya te lo dije. ¿Qué acaso no me crees? – cruzó sus brazos. Zayn soltó una risa ahogada.

- Yo a ti sí. Pero a él...

- ¿Qué vas a decir ahora? ¿acaso no puedo tener amigos?

- Sí. Pero sé cuáles son las intenciones de ese imbécil ___________.

- Que coincidencia que siempre pienses lo mismo de todos. – caminó hasta la cocina. No tenía fuerzas para seguir discutiendo. No con él. Preparó una taza de café, para calmar los nervios. Esto terminaría mal.

- Soy hombre. – la siguió hasta la cocina. Quería aclarar el tema. – y sé perfectamente cuando a un hombre le gusta una mujer.

- Bien, ¿le gusto a Tom entonces? ¿eso es lo que tratas de decirme?

- Oh vamos...dime que no lo has notado.

- Me da igual.

- Que coincidencia que siempre te de igual, cada vez que un hombre intenta algo contigo. – no parecía arrepentirse de lo que había dicho, no, para nada. Tenía sus dos manos puestas firmemente en la encimera de la cocina.

__________ se volteó a verlo. Jodido Zayn. Todo lo que acababa de decirle le había herido en lo más profundo de su ahora débil corazón.

- Piensa lo que quieras Zayn. – Cogió la taza de café con las dos manos, moviéndose rápido. Lloraría. De furia. De rabia. De...simples ganas de desquitarse con algo. Caminó hasta su habitación. – pero no sé si yo voy a seguir aguantando tus estúpidos celos, toda mi vida. Zayn corrió hasta el pasillo hasta donde ___________ había llegado. ¡Cómo es que siempre cagaba todo!

- No quise decir eso...

- Lo dijiste igual. – se limpió las lágrimas. Aguantándose las otras.

- ___________...- la detuvo. Sus manos fueron a parar incontrolablemente alrededor de la cintura de ___________. Ella se separó. Molesta. – perdóname, la cago siempre. Lo sabes.

- ¿Y yo siempre tengo que aguantarlo? – le preguntó herida. Zayn sintió como su corazón se volvía pequeño, muy pequeño, al observar como ___________ lloraba por su culpa. Le dolía.

- No...no, mi amor...perdóname. – intentó acariciar su mejilla, ___________ no se lo permitió.

- No te disculpes, igual siempre piensa que soy una puta.

- Jamás dije eso. – volteó el rostro de ___________ para él, para que lo mirara. ____________ se dejó. – mírame... - ____________ sacudió la cabeza, finalmente encontrándose con él, con sus ojos, con su boca. – lo siento, soy así...tú me conoces mejor que nadie, a veces no puedo controlarme en lo que digo o en lo que hago. – apretó un poco más la caderas de ___________ hasta su cuerpo, ____________ separó sutilmente a Zayn con la taza de café. – pero no sabes cuánto me jodió verte riéndote con ese...

- ¿Por qué? – preguntó ella, sus preciosos ojos ____________ recorrieron el rostro de Zayn. - ¿acaso no confías en mí?

- Confío. – trató de alcanzar los labios de ___________ por un par de segundos. Ella los esquivó, no sería tan fácil. – pero... ¡es que tú lo hubiera visto!

- Zayn, ya...déjalo ¿sí? , no quiero discutir más. – le quitó el pasamontañas color marrón, del cabello. Zayn abrió los labios un poco más, intentando alcanzar los labios de _____________. Le rodeó la cintura.

- ¿Qué pasa, no puedo besarte? – preguntó en susurros. __________ tomó de su taza de café.

- ¿Crees que todo esto se acaba así de fácil? – lo miró mal. Riendo por dentro. Negó con la cabeza. – y hoy...- entró hasta la habitación, cogió la muda de pijama, de Zayn. La puso sobre su torso. – duermes en el mueble.

- ____________...- rogó él.

- Nada. Buenas noches.

- Pero...- la jaló del brazo antes de que pudiera entrar completamente. Sus cuerpos quedaron unidos una vez más. - ¿no te gustaría repetir lo de anoche? – susurró en su oído, y no se refería exactamente a la cena.

- ¿No te cansas verdad?

- No, mi vida.

- Pues piensa mejor en lo que dices luego. Buenas noches... - se acercó para besar fugazmente sus labios. Zayn disfrutó de ese par de segundos encantadores. El sabor de los labios de ____________...era mejor que cualquier otra cosa que a él pudiera gustarle.

__________ cerró la puerta. Zayn dormiría afuera, por esta noche.