¿Él y yo?

capítulo 12

Estábamos en la cafetería, tenía encima algunas miradas y murmullos que eran muy frustrantes. Dios, no era la gran cosa que revelara quienes son mis padres.

Al desviar mi vista hacia el otro lado de la cafetería me tope con sus ojos color miel, con Rodrigo que me veía fijamente, él solo me dio una media sonrisa pero después desvío su vista de una manera brusca, como si me estuviera evitando o ¿enojado? Pero no tendría porque estarlo, no cuando ni siquiera hablamos, es absurdo, no creo haberle hecho algo, posiblemente ni siquiera era conmigo con quien estaba molesto.

Volteo hacia Mía quien está conmigo.

-¿sabes si ha pasado algo con el equipo de fútbol?- pregunte mientras intentaba lucir despreocupada y miraba mi comida.

-No, ¿por qué lo preguntas?- la rubia pregunta mirándome. 

-solo preguntaba, Rodrigo luce de mal humor, creí que tal vez solo tuvo un mal momento.

-¿por qué no le preguntas?- ella pregunta. 

-no creo que me corresponda- respondo-, es más, ni siquiera hablamos, es absurdo.

-sabes que mueres por hacerlo. 

-lo sé, pero, ¿sería raro? no somos amigos, incluso parece como si estuviera molesto conmigo, no tendría porque estarlo.

-tal vez y solo esta teniendo un mal día y tu estas exagerando las cosas- responde con tranquilidad- estás paranoica como si salieran y él te dejara plantada- se detiene un poco- pero, espera, no están saliendo ¿cierto? No me ocultarías algo así, soy tu mejor amiga, tienes que decirme si eso pasara, ¿cierto?

-espera Hall, él y yo no estamos saliendo y sinceramente no creo que algún día lo hagamos, pero ahora que lo dices hay algo raro que paso el otro día, exactamente el día del entrenamiento.- comienzo recordando aquel día en el estacionamiento. 

-¿qué fue?- dijo abriendo los ojos exageradamente y esperando por mi respuesta. 

-¿recuerdas que después de que lo vi besándose con Natalia me fui de allí?

-sí.

-¿y también que me quede en el estacionamiento leyendo?

-sí, también lo recuerdo.

-después de que tú te fuiste él llegó y empezó a hablar conmigo, hasta que tocamos el tema del partido y el me pregunto si asistiría.

-le dijiste que sí y después...

-me dio las gracias por hacerlo, eso fue confuso sigo sin entender porque lo hizo, pero eso no fue todo, cuando le pregunte que porque me daba las gracias, él dijo que porque yo era su amuleto de suerte y...

No termine de hablar cuando Mía se encontraba gritando como una loca y después me abrazo atrayendo la atención de la mayoría de personas aquí.

-¡Sofía Wells! ¿por qué no me lo habías dicho?- pregunta luciendo notablemente ofendida. 

-lo había olvidado, después con todo lo que paso no pude contártelo.

-bien, bien, está bien, solo por eso te perdono, pero te das cuenta, es una señal de que tal vez y si le gustes como te he dicho.

-no lo creo, si en verdad le gustara él no estaría saliendo con Natalia y más sabiendo que ella y yo no nos aguantamos- suelto.

-en eso tienes razón, pero recuerda que para todo hay una explicación, y si en verdad le gustas tarde o temprano tendrán que estar juntos.

-solo espero que si eso llega a pasar en verdad dure y sea porque en verdad me quiere y le gusto.

-y lo será, recuerda todo llega a su tiempo.- finaliza guiñando un ojo. 

PV Rodrigo

Estábamos en la clase de tutoría, hoy vería en persona a el papá de Sofía ya que al parecer tendría que presentarse por el citatorio que la directora les envió a ambas por la pelea de ayer, volteó a verla y puedo verla que luce muy nerviosa y también ver que a cada instante voltea a ver el reloj de pared que esta ubicado en el salón, es adorable verla así pero también me preocupa ¿por qué luce así? No veo razón para que lo haga, no creo que el que nosotros conozcamos a su padre tenga algo de malo, la mayoría del salón ya conocemos a los padres de cada uno puesto que en primer año era cuando más juntas escolares había y así es por eso una razón, y la razón por la cual no conocemos a ninguno de los padres de ella es porque ingresó en segundo año y las juntas ya no eran como antes, aunque recuerdo que en la reunión de padres de familia de segundo año la pude ver con una señora grande, puedo asimilar que es su abuela o algo por el estilo, así que supongo que una de las razones por las que esta así es por eso; han pasado alrededor de diez minutos y se escuchan unos ligeros golpes en la puerta por lo cual todos levantan la mirada, es el señor Salvatierra, el padre de Natalia y todos vuelven a lo suyo, otros diez minutos y otros golpes en la puerta, levanto la mirada y un hombre se encuentra ahí pero no es cualquier hombre, es Christian, Christian Greenwood recuerdo haberlo visto un par de veces en la televisión y también a mi padre mencionar su nombre, ¿qué hace él aquí? Es la pregunta que casi todos en el aula nos hacemos.

-mi hija tiene un citatorio para hoy.

Esto es aun más confuso ¿su hija? Una Greenwood va con nosotros pero ¿quién?

Sofía y la maestra empiezan una conversación frente a todos pero lo que hace que todos volteen a verla con sorpresa son esas palabras que ella acaba de decir

-soy una Greenwood.

Me ha dejado completamente en shock, Sofía una Greenwood, nadie se lo esperaba más por la reputación que Natalia se ha encargado de hacer de ella, se levanta de su asiento y se acerca a quien ha dicho es su padre quien le planta un beso en la frente, todo el salón ha quedado en silencio y ahora solo se escucha la conversación de la maestra con los padres de Natalia y Sofía, después de unos momentos más la maestra sale del salón, levantó la mirada y veo a Sofía hablar con su padre, sería muy egoísta negar y decir que Sofía miente conforme a su identidad pero cada rasgo, vaya, es idéntica a su padre, hasta en la forma de sonreír y defender, dar sus puntos de opinión, expresarse, no hay duda que es una Greenwood, Natalia y su padre se acercan con ellos y empiezan a hablar la veo sonreír en algunas ocasiones, hasta que llega el momento de que al parecer un tema la ha dejado sin habla.

-lamento mucho lo de Sonia...

Es lo que alcanzo a escuchar

POV Sofía
El tiempo paso y ya casi acababan las clases, ahora estaba en laboratorio y al parecer el maestro iba a asignarnos en nuevos lugares; eso quiere decir que me separaran de Mía y tendré un nuevo compañero o compañera de mesa, solo espero y no sea Natalia, el maestro me acomodó en la cuarta mesa mientras que Mia quedo en la que se encuentra a lado de mi, ahora el profesor se encuentra asignando a los que ocuparán el segundo asiento en cada mesa; han pasado unos minutos y al parecer alguien se sentó en la silla de a lado ya que se escucha como mueven la silla cuando por fin volteo para presentarme me quedo en silencio.

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Gracias por leer.