La verdad y la traición, un accidente. (Segunda Parte)

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  - Estoy embarazado KangIn.- Dijo finalmente LeeTeuk.- Estamos esperando un niño.

KangIn volteo su rostro buscando la mirada del castaño claro.

"Estoy embarazado" "Estamos esperando" Palabras que retumbaban como el ruido de tambores en los oídos de KangIn.

KangIn se puso de pie. Su expresión era neutra en un principio... eso asusto a LeeTeuk, hasta que KangIn se abalanzo sobre este y se puso a llorar.

- ¡Seremos padres!.- Chillo KangIn.

- Si, lo seremos.

- ¡Los mejores!.- Agrego.

- Los mejores.- Aseguro LeeTeuk quien también comenzaba a llorar.

KangIn abrazaba a LeeTeuk con todas sus fuerzas, escondió su rostro lloroso en el pecho de su novio.

Se sentía tan agradecido, al fin las respuestas estaban presentes allí para él.

Sabía que decisión tomar, todo se veía más que claro.

Él le habría prometido a su madre, seguir sus sueños, y eso haría, volvería a LeeTeuk uno de sus sueños, el más importante.

No importaba si por estar con él debía volverse un muñeco de su padre, el, se quedaría con LeeTeuk y su hijo, quien venía en camino.

Se arrepentía de haber pensado un solo segundo en la posibilidad de dejar a LeeTeuk, cuando el más que nadie, lo llenaba de felicidad y sorpresas diariamente.

- LeeTeuk...¿Cundo lo supiste?

- Hace dos días, temprano en la mañana. Fui al doctor y lo confirme... ¡Fue horrible!, no sabía que pensar... Mis padres ya lo saben... HeeChul estuvo conmigo... tome la decisión por mí solo, no sabía lo que te diría.

- No importa como lo hubieses dicho, la respuesta hubiese sido la misma. Te amo tanto.

Ambos lloraban, ambos se sentían tranquilos...

- Gracias LeeTeuk, gracias... me has dado el mejor regalo de cumpleaños del mundo...

- KangIn ¿no notas lo difícil que será sobrellevarlo? Aún estamos en la universidad, no tenemos nada aun... ¿estas realmente seguro de esto?, porque yo no lo estoy...

- ¿Qué estás diciendo? ¡Estoy más que seguro! ¡Es mi hijo! ¡Lo querré tanto como a ti!, sé que será difícil, pero yo estaré contigo, siempre.. trabajare y trabajare, lo prometo, para sacarnos adelante, no importa que saldremos adelante... Lo prometo.- decía KangIn abrazando a su novio con todas sus fuerzas, temía soltarlo y perderlo. Así que lo mantendría siempre a su lado.


* * *

Esa tarde LeeTeuk fue a la universidad junto a KangIn, pero KangIn no entro a clases.

Debía aclarar las cosas con su padre. Antes que el hombre cometiese una locura –Por no hallar respuesta.

- ¿Entonces lo has decidido ya?.- Pregunto el hombre riendo de lado.

- Así es.- Asintió KangIn distante y frio.- Acepto tu propuesta.

- Vaya, vaya... ¿Qué te hizo cambiar de opinión?

- Preguntas como si no supieses...

- Vamos, para volverte el títere de tu padre debes tener tus razones ¿no?

- No seré tu títere, dejare la universidad y trabajare de algun modo para ti, pero olvida eso de ser tu títere, de todos modos lo único que quieres es la empresa, si firmo esos papeles deberías dejarme vivir en paz.

- Te equivocas, si firmas los papeles estarías aceptando tus deberes como heredero de la empresa... ¿crees que es fácil deshacerte de ella? Tu madre nos lo puso difícil a la hora de morir... Tendrás que encargarte tú de ella... Yo seguiré a cargo por ser un hombre con experiencia, pero al fin y al cabo la empresa pasaría a ser tuya, no ves que todo lo que eh hecho es por tu bien? A no ser que a uno de tus hermanos se les ocurra también reclamar sus derechos.. pero de cierta forma.. ya es tarde...

- Escucha me da exactamente igual lo que suceda con la empresa de aquí en adelante, yo solo deseo que me dejes en paz... Bien, aceptare el cargo, solo para que no quedes en la ruina, y para que tampoco cometas una locura...

- En serio, ¿Por qué tan entregado?, tú y tus hermanos normalmente luchan contra el mismo diablo si es necesario para llevarme la contra.

- Tengo mis razones...

- KangIn.. ¿sabes el por qué me eh empeñado en que seas tu?

- ¿Por qué?.- Pregunto KangIn

- No es solo el hecho de que YeSung me odie o que KiBum sea menor de edad, y HyungSeong un bastardo, no, el punto es que tú para los ojos de la empresa eres mi único hijo.

KangIn frunció el ceño.

- Los cuatro llevamos tu apellido, sin embargo solo reconoces a uno como tuyo, ¿Qué clase de padre eres?

- Vamos, dime ¿Qué te llevo a aceptar? ¿Es que le tomaste el peso a mis amenazas?

- Si, así es...

- Ja!, eres tonto, eres débil, pero eso, lo cambiaremos con el tiempo, te darás cuanta de que el amor que siempre te han profesado no existe... En ese momento entenderás por que eh hecho todo esto, me entenderás.

- Padre, escucha, no me interesa tu forma de pensar, yo solo vine a dejar las cosas claras. Si, heredare la empresa, firmare los papeles, y no lo hare por ti, lo hare por mi madre... porque esta empresa es de su familia y no quiero que se caiga a pedazos todo lo que SU familia construyo... segundo: Acepto todo, pero tú, tú tendrás que ser un buen padre, al menos para los ojos de KiBum, no lo sé, llámalo, ve a verle, demuéstrale que quieres recuperarlo...

- ¿Eso es todo?

- Sí, eso es todo lo que quiero.

- Dime ¿y que sucede con ese tal Jung Soo?

- No le pongas las manos encima... ni se te ocurra acercártele... ni cometer una estupidez, dijiste que podía quedarme a su lado si aceptaba tu trato y eso hare. En especial ahora, no puedo ni quiero separarme de él.

El hombre mira expectante a su hijo.

- ¿A qué te refieres? Este discurso se me hace conocido...

- El, él está embarazado. Seré padre.

El mayor abrió los ojos enormemente.

- Ahora entiendo... ¿Seguro ese niño es tuyo?

- Estas hablando de mi novio padre... no insinúes cosas.

- ¡Termina con él, o pídele que aborte!

- No, ¿estás loco?

- ¡KangIn! ¿¡Tendrás un hijo bastardo!? ¿de verdad? ¿sabes lo que dirá la gente?

- Me importa un comino lo que diga la gente, yo me quedare a su lado, yo lo amo, y espero con ansias el niño que está en camino, así que te lo advierto, no pongas tus sucias manos en ni un solo pelo de LeeTeuk. Por qué si lo haces, soy capaz de cualquier cosa.


Y esas fueron sus palabras salió de la oficina y se fue directo a casa con sus hermanos.

• * * *


- KangIn ¿En dónde estás?.- Preguntaba LeeTeuk al otro lado de la línea.

- Voy camino a tu departamento amor... pase a comprar algunas cosas, por cierto.. se lo dije a mis hermanos.

- ¡¿De verdad?!, ¿¡Se los dijiste sin mi!? KangIn eres horrible...

- Perdón amor, pero no podía con la emoción... hubieses visto sus caras, eran todo un poema.

- ¿C-como reaccionaron?

- Como siempre HyungSeong lo tomo con calma, KiBum se puso a dar saltitos y a gritar como loco y YeSung, pues YeSung digamos que casi se desmaya de la emoción.

- D-de verdad, diablos KangIn, hubiese deseado estar allí.

- Perdón amor..

- No importa... ¿Vienes llegando?

- Estoy afuera del edificio.

- Bien, te espero aquí.


* * *


- Mira lo que compre para nuestro bebé.- Decía KangIn con emoción.- ¿No son lindos?

- Si, son muy lindos.- LeeTeuk sonrió al ver las prendas de bebé que KangIn tenía entre sus manos.

Se encontraban recostados en la habitación de LeeTeuk.

- Como te fue hoy en la universidad.- Pregunto KangIn.

- Bien, fue una clase bastante divertida.- Sonrió LeeTeuk.- No entraste a clases hoy... ¿Por qué?

- Fui a aclarar unas cosas con mi padre.- LeeTeuk lo observo angustiado. No conocía al Padre de KangIn Pero sabía que su relación no era muy buena.

- No te preocupes, no sucedió nada malo amor.- KangIn beso los labios de su novio.- ¿Quieres comer algo? Iré volando a comprarlo.

LeeTeuk sonrió.

- Me gustaría comer... pie de limón.

- ¡A la orden!.- Se levantó KangIn y salió de la Habitación.

LeeTeuk escucho las puertas abrirse y cerrarse, así que dedujo que KangIn habría salido por el trozo de pie de limón.

Observo su entorno, y sonrió al ver el pequeño desorden que había hecho KangIn.

Tomo una de las prendas de Bebé entre sus manos. Luego –solo su mano derecha –La llevo con cuidado a su estómago.

No se notaba para nada la presencia de aquel intruso, pero sabía que estaba allí. Estaba seguro de poder sentirlo.

- Perdóname bebé.- Susurro.- Pero al saber de ti, tenía mucho miedo... no sabía lo que haría, por un momento se me atravesó la idea de quitarte la vida, pero créeme pequeño, no me atrevería.- LeeTeuk lloro en silencio.- Tenía miedo... ¿Qué haría con un bebé? Me sentía tan solo.. perdóname... ¿Pero sabes?, resulta que nunca lo estuve... hay muchas personas esperando por ti... tus tíos, tu papi, yo... tus abuelos... todo queremos verte... y no sabes lo feliz que estoy.


LeeTeuk de repente sintió dos brazos rodeándolo, se sobresaltó en un principio pero al notar que se trataba de KangIn sonrió con tranquilidad.

- Sera niña.- Afirmo KangIn.

- ¿Tú crees?.- Susurro LeeTeuk.- Yo creo que será niño.

- No, será una princesita...

- Te equivocas, será niño, y tendrá una paciencia indestructible, será cariñoso y amable igual que tu...

- No importa lo que sea... será tan hermoso o hermosa como tu...

- ¿Tu dices?

- Claro que lo digo... Debe serlo...

Ambos se sonrieron con ternura, se besaron.

KangIn paso su mano por debajo de la polera de LeeTeuk y beso su cuello con cuidado.

- ¿Y mi pie?

KangIn se detuvo.

- Iba por el, pero olvide el dinero.

- Espero mi pie.- Dijo LeeTeuk al ver que KangIn ya se iba en busca de su pedido.
Rio al escucharlo refunfuñar.

Se quedo solo de nuevo.

Golpearon la puerta.

"¿no llevo llaves?". Fue lo que pensó.

Se dirigió a abrir.

Frente a él un hombre, ya bastante viejo, con cabellos plateados y ojos cansados estaba frente a él.

- ¿Jung Soo? ¿Verdad?.- Pregunto el hombre de uniforme y voz ronca.

- A-así es...

- Hola.- Sonrió el hombre.- Soy el padre de KangIn. 


Tus palabras. (KangTeuk)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora