Capitulo 2 [Versión definitiva]

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Seis cuarenta y cinco de la mañana, mi teléfono suena como si no hubiera un mañana, sacándome de mi reparador sueño nocturno. Veo en la pantalla quien osa perturbar mi sueño y lo único que logro ver entrecerrando los ojos es la fotografía de Salem. Si no es de vida o muerte, será de muerte porque la voy a matar.

-¿Sam? Cariño lo siento no podré ir a buscarte hoy me salió algo importante, después te cuento.- dijo apresurada sin esperar a que le respondiera y colgó.

Genial ahora tendré que caminar hasta la escuela, catorce cuadras para ser específica, ya que mis padres se van al trabajo una hora antes que yo me vaya al instituto. Necesito un auto urgente, en serio.

Cuando me digno a salir de mi casa, la mañana está nublada y hace mucho frio, maldije en silencio a Salem por dejarme justo hoy, mi cabello se va a esponjar demasiado con la humedad, la verdad no es que importe mucho mi apariencia pero vamos tengo una reputación y la verdad es que amo como queda mi cabello lacio.

Está a punto de ponerse a llover -estoy segura- y con mi mala suerte de seguro llegaré empapada a la escuela y me enfermaré -aunque no me pasa muy seguido, los doctores dicen que tengo unas defensas únicas-.

Iba en la décima cuadra de camino, cuando lo vi afirmado en una Harley Davinson negra, vestido con un pantalón negro ajustado con una pequeña cadena colgando de ellos, una remera de Metallica y una chaqueta de cuero negra. El misterioso y aterrador Erick.

Seguí caminando como si nada, hasta que pasé frente a él y sentí sudar mis manos de los nervios. Qué carajos te sucede Samantha.

-¿Samantha?- sentí una ronca voz llamar mi nombre, me volteé y esa maravillosa voz resultó provenir de aquel chico que ayer me robó la respiración.

-¿Nos conocemos?-dije intentando verme intimidante.

Rió levemente.

-Salem me envió por ti.-afirmó.

-¿Conoces a Salem?

-Amigos de amigos.

-¿Por qué mi mejor amiga enviaría por mí a un chico que no conozco y no me diría nada siendo que esta mañana hablé con ella por teléfono?-pregunté desafiante.

-Cierto, ¿dónde quedó mi educación?

Oh, su voz... ¿Salem no había dicho que venía de Alaska? Su acento suena exactamente como el acento británico.

-Mi nombre es Erick.-anunció poniéndose derecho en frente de mí.- Erick Sanders, soy nuevo en la ciudad, y tu amiga Salem estaba muy preocupada porque al parecer lloverá, ella no podía pasar a buscarte y dijo que tus padres no podían llevarte al instituto asi que me pidió de favor que pasara a buscarte y te dijera exactamente esto ya que tú no contestabas tu teléfono.

Entrecerré los ojos, juzgándolo. Miré y celular y claramente Salem ni nadie podría haberme llamado ya que está apagado, olvidé cargar la batería. Qué idiota, Samantha.

-Está apagado.-hice una mueca de vergüenza.

-Lógicamente.-afirmó.- Entonces... ¿nos vamos o esperamos a que comience a llover?

-¿De qué conoces a Salem?

-Está saliendo hace un tiempo con mi mejor amigo, es una chica muy simpática, es agradable.

¿Salem está saliendo con alguien y yo no tenía idea?

-Así que el chico con el que está saliendo mi mejor amiga que obviamente me cuenta todo, es tu mejor amigo ah.-intenté sonar segura.- ¿Cuál es su nombre?

-Creí que no sabías sobre Scott.-aseguró.- Ella dijo que después te explicaría.

Rayos.

-Ok, me descubriste.-intenté parecer despreocupada. Tomé el casco negro en el asiento de su motocicleta y me lo puse.- ¿Nos vamos o esperamos que comience a llover?

Del Infierno Para ArribaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora