What I Feel For You

Capítulo 18

El beso, aquel beso, ese pequeñisimo beso me hizo sentir una chispa eléctrica recorriendo todo mi ser al punto de quedar congelada, me hizo sentir algo inexplicable, no articulaba nada de ese momento, y lo peor, no lo ''disfruté'' por andar convenciendome que esto era real, era Mark Foster en carne y hueso y no el poster de mi cuarto que acostumbra ser.

¿Por qué?

No entendía por qué había hecho eso, simplemente es algo muy revuelto. Tenía dos teorías para mi pregunta, le gustaba yo a Mark o él estaba bajo el control del alcohol y no tenía ni puta idea de lo que había hecho, y siendo más certeros, creo que la segunda es la más apegada a la realidad, pues ¿yo gustarle? Ni de coña.

Él se apartó de mí, tenía su cabeza mirando a lo bajo, y pues yo seguía en shock con los ojos abiertos, exageradamente abiertos.

—Lo-lo siento _____ —dio un paso hacía atras rascando su nuca—. carajo —murmuró—. Escucha, esto... Esto no fue correcto —pasó su mano por su cabello, miro a todos lados y se marchó sin decir más.

Lo ví alejarse entre la multitud, y yo no hacía nada mas que estar congelada. Quería gritarle que se quedara y me diera explicación a todo, pero mi garganta era un nudo.

Letamente mi mano subió a tocar mis labios, realmente no lo creía, los sentía palpitar, tenía un sabor alcohólico, pero era agradable. Y ahí otra pregunta llegó a mi mente ¿ahora qué hago? Bueno era lógico que tenía que ir con los chicos para regresar a L.A. pero ¿y después? ¿con qué cara miraré a Mark ante esto?
Estaba más confundida que antes.

Claro, mis lágrimas brotaron en ese instante, creo que colapsaría por todo lo que pasaba mi corazón. La imagen venía a cada instante y por alguna razón en vez de estar saltando de celebración por haber probado los sexys labios, me sentía mal, yo sé que esto no debería ser así.

—¿Qué te pasó? —me dijo Isom cuando estuve devuelta con ellos en la mesa iluminante.

—¿Cómo? —dije saliendo de muchos pensamientos.

—¿Estás mojada? —preguntó Phil preocupado.Ya ni me acordaba de eso. No estaba consiente de nada.

—Ah... Sí —parecía no tomarle importancia.

—Tu férula —la apuntó formando un circulo en su boca—. ¿Eso no te hace daño? —me preguntó Isom.

—No creo —le eché un vistazo—, no está tan humeda.

—¿Estás bien? —era Ponci.

—¿Quien te hizo esto? —decía Isom.

—¿Pero por qué vienes así? —dijo Sean.

—Ahh —estaba muy distraída— larga historia que aún analizo —contesté con una sonrisa chueca.

Me encantaba que los chicos tuvieran preocupación hacia mí, pero en este momento no la deseaba, no quería que ellos supieran lo ocurrido, es más, quería correr y esconderme para que no me vieran en está incomoda situación.

Salimos del bar y subimos a la camioneta en la que habíamos llegado. Después de unos diez minutos de trayecto me percaté de la ausencia de alguien. Eso me preocupó.

—¿Y Mark? —le pregunté penosa a Ponci que estaba a un lado de mí.

—Tomó un taxi —me contestó.

¿Cómo que un taxi? ¿Desde aquí iba a pagar uno? ¿Así de plano? Esto significaba que a el también se le sería difícil verme.

¡Esto ya estaba en la mierda!