Mi Pasado (MP #1)

CAPÍTULO 12:Matthew

Luego de haber recibido una gran charla de mantenerme segura de parte de Nate fui directo a mi hogar. Al llegar me alegré al no recibir ningún regaño de parte de mis padres.

Amanecí y coloque el cuchillo, que recibí la noche anterior, en mi pierna debajo de la falda del uniforme y por ultimo, el micrófono en mi oído para luego encaminarme hacia el instituto; esta vez decidí observar todo lo que me rodeaba en el camino hacia la parada del colectivo.

Todo era realmente hermoso, desde los ríos que circulaban debajo de los puentes hasta los pequeños detalles de las construcciones que eran invisibles a simple vista, pero visibles para aquellos que deseaban observar, no creí haberme perdido mucho de este lugar, pero estaba realmente equivocada. Muchas personas pasaban en parejas a mi lado en bicicleta, sonriéndose unas a otras, era realmente impresionante como aquellas personas podían conservar la felicidad por mucho tiempo. Estaba completamente pérdida en el paisaje que no note que alguien venía caminando hacia mi dirección, para ser más precisa: un chico alto, cabello pelinegro y ojos grises.

-Lo siento, no me fije.-dije mirándolo.

-No, está bien, fue mi culpa. Soy muy distraído a veces.-dijo sonriendo, cuando hablaba podía distinguir un acento, pero me era muy difícil saber cual-me llamo Matthew.

Extendió su mano en presentación para que yo la estreche y la acepté gustosa diciendo mi nombre.

-Eleonora.- dije rápidamente recordando que todos me conocen con ese nombre y no iba a echarlo a perder por decirle mi nombre verdadero.

-Hermoso nombre, ¿te dirigías hacia la parada?-preguntó señalando el lugar.

-Sí, ¿tú también?

-Sí, hoy va a ser mi primer día en mi nuevo colegio.

-Tal vez vayas por la misma dirección que yo¿Cual es su nombre?

-Em...-se puso a pensar y luego saco un papel del bolsillo trasero de su pantalón y lo leyó.-colegio Empire High.

-Allí mismo me dirijo, ¿quieres venir conmigo?-pregunte mirándolo. Su rostro tenía facciones delicadas, posiblemente descendencia árabe.

-Me encantaría.

Seguimos caminando hacia la parada mientras hablábamos, descubrí que se había mudo no hace mucho tiempo de Inglaterra y que estuvo buscando una gran escuela todo este tiempo. Era muy simpático, me habló sobre que vive con sus padres a pocas calles de mi hogar y acordamos salir algún día.

(...)

Al llegar a la escuela cada uno se fue hacia su casillero para buscar los libros de la próxima clase; mientras me dirigía hacia mi casillero pensaba en todo lo que estaba ocurriendo, Matthew parecía un gran chico, pero no debía confiar en nadie y en un punto me dolía que fuese así.

Estaba sacando unos libros de mi casillero hasta que me soblresalté por una voz detrás de mí.

-¿Quién era ese chico?-Nate, parecía algo molesto, me voltee para quedar en frente a él. Tenía puesto el equipo de ayudante del entrenador: una remera blanca con el cuello azul y las puntas azules de las mangas cortas resaltaban sus brazos musculosos, y en las piernas llevaba unos pantalones cortos azules solo un poco más arriba de las rodillas. Era hermoso, ¿Qué es lo que estoy diciendo?, no, debo alejarme de él.

-Se llama Matthew y es un chico que acabo de conocer.-dije encogiéndome de hombros para restarle importancia.

-¿Dónde lo conociste?-preguntó frunciendo el ceño.

-En la parada del autobús, es muy simpático.- dije sonriendo un poco, sabía que eso iba a hacerlo enojar un poco, y no sabía porque pero una parte de mi sentía que debía hacerlo.

-¿Enserio?, cuéntame más de ese Matthew.-dijo acercándose más a mí.

-Bueno, es lindo también y...- no pude seguir porque me había acorralado entre él y el casillero.- ¿Era para eso por lo que viniste?-dije tratando de no sonar nerviosa.

-Jaden me dijo que te dijera que luego de clases fueras a su apartamento, es hora de entrenarte.-dijo alejándose un poco.

-¿Entrenarme?-sabía a lo que se refería, pero volver a todo eso hacía que mi cabeza diera vueltas y sabía que una vez que lo comenzara, no iba a terminar.

-No íbamos a dejarte así como así, sin nada de entrenamiento, serias una presa bastante fácil y ahora es lo que menos queremos que ocurra. Me iré, pero antes...-se acercó hasta que sus labios rozaron mi oído.- Sé lo que tratas de hacer con ese tal Matthew y créeme que no va a funcionar.- estuvo allí unos segundos antes de volver a quedar frente a mí, y luego sin decir nada más se volteo para irse.

Tomé unos minutos para recuperarme de lo que acababa de pasar, no podía dejar de pensar en sus labio y en la forma que me hacía sentir cuando estaba cerca de mi; no podía, debía terminar con todo esto, además estaba demasiado rota para romper a alguien más.

"No puedo arrastrar a nadie hacía mi oscuridad"

Parpadee y intenté encontrar al dueño de esa voz, ¿porque mi cabeza había hecho que escuchara eso?, siento que algo me esta faltando por saber, algo realmente importante.

Fui directo a mi próxima clase y me senté al lado de Matthew, nuestras primeras dos clases las teníamos juntos durante tres días.

-Hola, Eleonor ¿Estás aquí?-la voz de Matthew me sacó de mis pensamientos.

-Sí, lo siento, ¿Qué decías?-dije tratando de olvidar todo por unos minutos, tenía que trabajar para que todo lo que estaba pasando no me afectara.

-Te estaba preguntando si entiendes biología, porque yo no.- preguntó sonriendo.

-Sí, es una de las materias que más me gustan, si quieras podemos quedar algún día y yo te enseño.

-Me encantaría, ¿Te parece mañana?

-Sí, ¿Qué tal en mi casa después de la escuela?

-Está bien, creí que iba a ser un sufrimiento aprender esto pero gracias a ti no lo será tanto.- volvió a sonreírme y cuando iba a contestarle sonó la campana para el almuerzo.

-Tengo que ir a hacer unas cosas, ¿Te veo luego?-le dije a Matthew.

-No hay problema, recuerda que tenemos clases juntos en el siguiente período.-me dedicó una sonrisa antes de irse.

Salí del salón de clases y me dirigí hacia la biblioteca para despejar mi mente, no tenía mucha hambre debido a los nervios que estaba sintiendo, tal vez eran por un mal presentimiento o solo era imaginación mía.