Mi Pasado (MP #1)

CAPÍTULO 25:Búsqueda

Luego de lo ocurrido en mi habitación con Nate, ni él ni yo cruzamos palabra. Una vez que guardamos todas las armas en el auto, sin que Katherine lo notara, nos dirigimos hacía el bosque. Nate y Sarah habían sido muy cuidadosos para que su abuela no se enterara que tenían un trabajo en el que mataban para ganar dinero o que para ello tuvieron que aprender a utilizar armas de todo tipo.

Cuando llegamos a nuestro destino, bajamos todo lo que necesitaríamos y Nate comenzó a hablar:

-Bien, nuestra prioridad ahora es encontrar el árbol.-dijo dirigiéndose a todos-Cada uno tomara un comunicador y armas por si algo llegase a suceder. Nos separaremos, ya que el bosque es muy grande y si nos mantenemos juntos nunca podremos cubrir gran parte del lugar, por eso he traído mapas señalando los puntos cruciales donde sospecho que estará el árbol que contiene el paquete.

Nos entregó a cada uno el mapa y cuando llegó a mí, se mantuvo más tiempo de lo que debía observándome, sin saber que hacer aleje mi mirada mientras recibía lo que ayudaría a no perderme. Sabía que se sentía dolido por todo esto, pero no más que yo.

-Nos reuniremos aquí en dos horas, si llegan a encontrar el paquete comuníquense. También quiero saber de ustedes cada diez minutos, solo por seguridad.-terminó de decir.

-No te preocupes hermanito Mía estará bien.-dijo Sarah burlándose de él.

-Lo digo por todos Sarah.-dijo Nate molesto.

-Si Sarah, existen momentos en los que de las veinticuatro horas del día, dos de ellas Nate no solo piensa en Mía.-dijo Jaden soltando una gran carcajada acompañado de Sarah.

-Ya cállense y apéguense al plan.-dijo Nate seguido de que todos comenzáramos a separarnos.

Cuando estuve lo suficientemente lejos observé todo lo que me rodeaba. Este lugar me parecía muy conocido, cerré mis ojos y comencé a recordar el sueño en el que ponía el paquete en el árbol.

Pasados los diez minutos sostuve el comunicador, todavía con mis ojos cerrados, e informe que seguía bien y retome mi rumbo.

Me recordaba corriendo con un objeto marrón entre mis manos. Abrí mis ojos y comencé a caminar dejándome llevar por las sensaciones de mi mente; mientras lo hacía iba observando cada uno de los árboles que encontraba, la mayoría poseían un gran agujero, pero por el sentimiento que no abandonaba mi mente me acerqué a un árbol en específico. Sentía el camino que había recorrido tan conocido como la palma de mi propia mano.

Metí la mano en el interior del hueco que el árbol tenía y saqué aquello que había sentido con la yema de mis dedos. Sonreí al observar el objeto marrón entre mis manos. Lo voltee y encontré un sobre que decía: Solo para Mía, sabía que lo que iba a hacer estaba mal, pero lo despegué del paquete y lo guardé en uno de los bolsillos de mi cazadora mientras me volteaba para comenzar a caminar.

Iba a avisarle a los demás que había encontrado el paquete cuando sentí el ruido de una rama romperse a mis espaldas. Instintivamente me voltee y pude observar a un chico alto enfrente de mí.

Mi boca no podía articular palabra alguna, verlo en frente de mí con una gran sonrisa que me causaba escalofríos en su rostro no hacía más que aumenta la confusión que sentía, me había sorprendido completamente. Aunque una parte de mi lo suponía.

-Hola Eleonor, o debería decir Mía.-dijo Matthew con su voz cambiada.