2. El Primer Día.

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(Por Sebastián)

Al bajar las escaleras Ricardo estaba de espaldas a mi, terminando de peinarse y con su mochila tirada en el piso,eso daba a entender lo mucho que él valoraba la escuela y todo lo relacionado con ello.  Mamá y papá aún no se levantaban, ayer fue un día sumamente ocupado entre ir a comprar los útiles escolares, el nuevo uniforme, la despensa y terminar de desempacar todas nuestras cosas, para ellos, esta era la semana de mudanza y su semana laboral iniciaría oficialmente mañana así que si contamos los días de ayer y hoy, este era su último día de descanso.

__¿Como me veo? __preguntó Ricardo dando media vuelta para que lo pudiera apreciar mejor__ ¿Sebastián? Te hice una pregunta.

Lo miré unos segundos de arriba a abajo e intente no soltar una risita boba. Debo reconocer que el nuevo uniforme le queda bastante bien. Él es atractivo y vestido así, estoy seguro que llamará la atención de inmediato con tan solo entrar a la clase.
¿El por qué de mi risita? Ricardo ya había leído el estricto reglamento del instituto y sabía que con sus perforaciones y sus aretes jamás lo dejarían entrar de esa manera, así que se deshizo de todas esas cosas tan características de él a excepción de su peinado y ahora parecía un niño bueno.

__¡Hey! __gritó__Te hice una pregunta pequeñín...

__Te ves bien Ricardo __añadí__.

__¿Solo eso? __cuestióno haciéndome un puchero__ Admitelo Sebas,no doy para más y me veo como un niño bobo de preescolar al cual su mamá ha peinado con limón en el cabello, en cambio tu, luces tan malditamente adorable que me dan ganas de apretar tus cachetes hasta que se pongan colorados.

__¡Enserio te ves bien! __añadí ignorando su comentario__ El negro te sienta bien y bueno, l-la corbata está mal puesta.

__Acomodala tu...

Ricardo se acercó hacia mi persona, solo traté de que mis manos fueran rápidas y anudar lo más rápido y mejor posible su corbata.  Una vez que terminé, él se miró por enésima vez en el espejo y sonrió por el resultado.

__Gracias pequeñín __añadió__ Parezco un imbecil pero luzco presentable.  Ahora vámonos.

__Pero.. 

__Dije ahora.

Una vez dichas sus últimas palabras, tomó su mochila y quitó la mía de mis hombros. Abrió la puerta y sin más remedio salí detrás suyo directo al Mustang que nos esperaba en la acera frente a la casa. 
Ricardo entró al auto aventando las mochilas por los suelos,esperó a que yo subiera y tras darse un último vistazo en el retrovisor, encendió el motor que esperaba ansioso por salir a las calles recién pavimentadas de esta nueva ciudad que recién habíamos conocido hace algunas horas.

Como pude, logré alcanzar mi mochila que iba en el asiento trasero para poder sacar el movil de entre los libros pero Ricardo giró con brutalidad para cambiar de calle y golpeé mi frente contra la puerta haciendo que mis lentes cayeran al suelo.

__¡Fijate idiota! __grité pero él solo reía más y pisó el acelerador a fondo__.

Finalmente logré encontrar mis queridos lentes fondo de botella debajo del asiento y oh sorpresa, se habían estrellado quedando hechos peor que una mierda.

__¡Mis lentes! __grité__ ¡Ricardo eres un imbecil! Un idiota,irresponsable, estúpido...

__¡Basta Sebas! __gritó él haciendo que me quedara pegado al asiento y se me bajaran los humos__ Calma tus instintos homosexuales por favor, sabes que esa mierda conmigo no va.

__No soy gay __respondí antes que él terminara de hablar__ Y lo sabes Ricardo.

__Pues actúas como tal __replicó él__Así que trata de disimularlo un poco. No seas tonto, tu y yo sabemos que ni siquiera los necesitas y que tu visita es incluso mejor que la mía así que bajale a tus dramas que yo después te compraré otros.

Historia De Un AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora