eight

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Luke p.o.v.

13:26

Los chicos me habían dado el día, dijeron que ellos irían a ver a Mikey durante la semana.
Debía cubrir mis cicatrices.
Me di una ducha, y limpié todo rastro de sangre que hubiera en mi piel. Ardía como la mierda.
Luego, cuando ya estaba vestido, fui a mi cajón, donde mantenía mis cosas "secretas".
Puse las cuchillas en su lugar, y saqué unas pulseras de Mikey.
Las acomodé bien, hasta que ya no se veía ninguna cicatriz.

Intenté comer algo, pero sentía tanto asco de mí mismo, que nada logró pasar por mi garganta. (n/a: metalo más al fondo po 7u7)

Salí de mi casa, ya eran las 15:00 y no quería llegar tarde.

Llegué al hospital, pedí las credenciales para ingresar y me senté a esperar. El tiempo se hacía eterno.

Cuando finalmente entre, y subí las escaleras correspondientes para llegar a su habitación, el guardia me detuvo.

-La hora de visita aún no comienza. -Dijo impidiendome el paso.
-Son las 16:00. - dije intentando pasar, pero él no se movió. Miró su reloj, y revisó la hora.
-Son las 15:54 -Dijo mirándome fijo. Verifiqué la hora, él no estaba en lo cierto. Iba a discutir, cuando una chica pasó por nuestro lado. Toqué su hombro.
-Señorita, si no es mucha molestia, ¿podría decirme la hora? -
-Por supuesto, joven. -Sacó su celular y le echó un vistazo. -Son las 16:03.
-Permiso. -Dije pasando por el costado del guardia. En tu cara viejo culiao.

Entré a la habitación de Mikey, la cual era la primera del pasillo. Este estaba riéndose.

-Hey Mikey -
-Luke, ¿era necesario pelear con el pobre hombre? -Dijo divertido.
-¿Pobre hombre? - Pregunté indignado. -Siempre nos separa.
-Hey, sólo han sido dos veces. -dijo volviendo a reír.
-Como sea, es suficiente para mí. -dije enojado.
-Lukey -Dijo alargando la "u".
-¿Qué quieres? -Respondí exasperado.
-No te enojes y abrazame. -Intentó sonar tierno. Ahueonao.
-¿Y si no quiero? -
-Lo harás de todas for...-Dijo intentando abalanzarse sobre mí. En el momento en el que levantó su cuerpo de la camilla, supe que algo no andaba bien.
-¿Mikey? ¿Qué pasa? -Pregunté mientras veía su mueca de dolor. -¿Mikey? ¿Quieres que llame a alguien? -Negó.
-No, uhm, estoy bien. Es sólo que... -No pudo terminar de hablar, cuando su cuerpo cayó bruscamente.
-Hey -no respondió, se quedó inmóvil. -Hey, Mikey, háblame. -Nada, ni siquiera respiraba. -Mierda. -Salí rápidamente de la habitación y choqué con una chica de cabello rojo. -¿Eres enfermera? -Asintió. -Ayuda a mi amigo, por favor. -La guié hasta la habitación de Michael.
-No puedes estar aquí mientras hago esto. -Dijo entrando y cerrando la puerta tras ella.

Mierda. Mierda. Mierda.

800 leídas, las amo, xau.
Pd: actualizo bc es feriado, ¿quién no es feliz los feriados?

Without you; MukeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora