Corazones de Piedra

Maratón 2/? Capitulo 8

POVAna

En el auto de camino al lugar que me espera Christian mis nervios aumentan, realmente no se si debí aceptar su invitación, pero ya estoy aquí y sólo hay que hacerle frente a la situación. Llevo un vestido blanco con orillas negras, largo con mangas cortas, y tacones negros, mi cabello suelto y maquillaje simple. Al llegar pregunto por la mesa a nombre de Christian y enseguida me dirigen a un salón apartado del común, Wow que pretende? Bueno no es más que una cena casual así que no temas Steele.

Al entrar lo veo ponerse de pie, con un traje gris que le queda perfecto y corbata gris, el camarero se va dejándonos a solas.

-Buenas noches Anastasia.- murmura mientras rodea la mesa para correr
Mi silla.

-Christian.- respondo, tomo asiento y el hace lo mismo.

-Me da gusto que hayas aceptado ser mi acompañante en esta cena Anastasia.-

-Es lo menos que podía hacer, haremos negocios juntos.- murmuro, veo sus labios formarse en una fina línea. El camarero llega nuevamente con un plato de quesos y una canasta de bagguets, una botella de Champaña, la sirve en ambas copas, toma nuestra orden y se retira.

-Brindemos.- dice levantando su copa.

-Porque?- pregunto.

-Por el cierre de un negocio y el inicio de una amistad.- y dale con eso.

-Christian creo que exageras.- digo.

-No seas tan cerrada Anastasia.-

-Bien!!! Salud!!- digo mientras chocamos nuestras copas.

-Salud.- murmura.

-Mmm Bollinger Anne Rosè, excelente elección.- murmuro luego de darle un sorbo a mi copa.

-Te gusta?- pregunta curioso.

-Es mi favorito.- respondo, da una sonrisa triunfante.

-Cuando vuelves a Seattle Anastasia?- pregunta mientras comemos trozos de queso y pan.

-Mañana a primera hora.- respondo.

-Podemos volver juntos en mi jet.- que? De qué me perdí?

-No creo que sea conveniente Christian.-

-Porque no?-

-Ya tengo vuelo reservado para nosotros.- frunce el ceño.

-Nosotros?-

-Si, mi chofer y yo.-

-Viajas con tu chofer y en vuelo comercial? Eso no es propio de una editora en jefe y dueña.- dice con petulancia.

-Pues verás Christian, yo no soy de esas personas que presumen lo que tienen, o despilfarran a gusto y antojo para que las personas vean que son"millonarios"- digo alzando comillas con mis dedos.

-Ouch... Muy directa señorita Steele.-

-No lo decía por usted señor Grey, no lo conozco y no soy nadie para juzgarlo, cada quién hace lo que se le plazca, yo viajo en vuelo comercial con quién sea, deberías tampoco juzgarme.- digo tranquilamente.

-Eres muy audaz Anastasia, siempre tienes una repuesta para todo.- dice negando.

-Christian he aprendido a enfrentar a todo tipo de personas, créeme, tus palabras están lejos de hacerme molestar.-

-Estas segura?- pregunta sonriente.

-Lo estoy.- lo desafío con la mirada. Sus ojos penetran lo míos con fuerza, el me intimida pero no lo demostraré, sus ojos grises se oscurecen, y miles de preguntas invaden mi cabeza, el es físicamente como aquellos héroes literarios que acostumbraba a leer en la universidad, perfectos!, pero será así sentimentalmente? Algo muy en el fondo me dice que no... No debería jugar con fuego, este hombre no es nadie común, lo se, lo veo, lo siento. El camarero interrumpe nuestro desafío visual y soy la primera en romper el contacto.