Inusual |Ticci Toby| |Book #1|

Capítulo 14 - ¿Problemas, Tobs?

Toby's POV

- ¡Toby, no! - Gritó Slenderman, no podía echarme para atrás. Giré mi cabeza y observé a Luna, sin duda estaba preocupada, en realidad, esto era cosa de mi orgullo. No era por ella, claro que no lo era.

-Deja al pequeño, Slendy - Zalgo extendió las manos, con una gran sonrisa, no sabe lo que le espera - Si quiere morir, lo hará. ¿O acaso te preocupa? 

Slenderman se giró a verme, y pensé dos cosas ; La primera, si salía vivo de esta, al menos me tratará mejor que a Masky, y la segunda, si muero, puedo ver a Masky saltando sobre mí tumba mientras tira champagne burlándose de mí. Yo quería ser el que hiciera eso, tendría que esforzarme. Guié mi mirada hacia Zalgo, retiré mi bozal con mi mano, y sonreí de forma descarada, lo último que vería de mí sería mi sonrisa. Ese idiota ni siquiera se merece mi sufrimiento.

- No me verás llorar cual niñita, Zalgo. En cambió a ti, yo no siento dolor alguno. - >>Pero tú no eres inmortal, ni siquiera te regeneras <<, me recordó mi subconsciente. Mierda.

-Eso lo veremos - Caminé con paso seguro hacia Zalgo, al parecer, la que hacía llamarse Laila,  junto dos dedos y los puso bajo su barbilla, mientras se ponía en posición de pelea. ¿Y a esta que le picó?. Zalgo hizo un gesto negativo, y Laila dio pasos atrás.

Tomé mis dos hachas con seguridad, esto sería pan comido.  Las junté formando una equis frente a mi rostro, y tomé vuelo. Corrí, haciendo que mi capucha cayera devuelta a mi espalda, sintiendo el aire helado en mi rostro, junto con la adrenalina del momento. Dí un brinco, lo tenía en mis manos, podría cortar su cabeza y esto terminaría tan rápido que también acabaría con Laila. Levanté una de mis hachas y la cabeza de Zalgo salió rodando.

O eso hubiera pasado si no se hubiera esfumado. 

- ¡No te servirá de mucho esconderte! - Grité,  apreté mis hachas y rebusqué en el alrededor. No estaba, ni siquiera su ayudante. Sólo encontré a Masky tomando múltiples pastillas, junto a los demás. El aire pasó como un susurro frente a mí, si no estaba en tierra ...

Levanté mi mirada al cielo, y ahí estaba, Oh santa mierda.

- ¡Oh Toby, no pensé que fueras a ser tan inteligente! - Me moví rápidamente, y Zalgo cayó haciendo que los árboles se movieran con brusquedad. Si no me hubiera movido, sería puré de Toby.  

Su ser despedía el olor de la maldad, lo conocía bien, el olor a sangre. En el peor de los momentos caí, las voces estaban molestándome denuevo, seguía sin aprender a vivir con ellas.

"Todo esto es por ella, deberías acabar con ella, si mueres será culpa de ella" 

- ¡No lo será! Callen de una buena vez - Zalgo sonrió de lado, y lo comprendí, no eran mis voces internas, sino las que él me provocaba.

-¿Problemas, Tobs?- El querer provocarme comenzaba a funcionar. Esto no llevaba a nada bueno.

Me levanté denuevo, y corrí hacia él, di una estocada y la esquivó, una segunda y otra tercera, en vano.  Con la respiración agitada, lo observé con detenimiento, se burlaba de mí, con su sonrisa ladina. Sin notarlo, un hilo de sangre salió de mi nariz, lo limpié con la manga de mi suéter y me reincorporé. No sería tan fácil de vencer si eso pensaba Zalgo. Corrí de nuevo hacia él, esquivaba mis golpes una y otra vez. Hasta que encontré un punto donde era débil. Su espalda. Sería difícil acceder a ella, podría decir que se movía a la velocidad del sonido. Algo imposible, está claro. Como una centella, me deslicé bajo sus piernas, Zalgo confundido, giró su cabeza a ambos lados, sin saber lo que ocurría. Levanté mis dos hachas, e hice un dos profundos cortes en su espalda, simulando una cruz. De ella emanaba sangre, había sido salpicado en el proceso, algo de esto me emocionó.

- Ugh - Oí quejar a Zalgo, esa parte no regeneraba tan rápido como las otras, Slenderman me lo había contado, y era la primera vez que ponía atención en algo que me decía.

Mi sonrisa se ensanchó, pero no duró mucho. Volví a sentir aquel susurró sobre mí rostro, y la oscuridad se levantó frente a mi rostro, mientras unos ojos llenos de fuego, se imponían sobre mí.Fue la primera vez que sentí miedo. 

-Sé de sobra que no sientes dolor físico, ¿pero qué tal el dolor de corazón? ¿Qué se hace cuando pierdes a lo que más quieres? - Su voz sonaba grave, oscura y tenebrosa. En lo único pude pensar fue en Luna. Giré mi cabeza tratando de divisar a Luna, la observé con una mueca de pánica, pateando a Ben en el cuerpo. Sin poder ver más, la oscuridad cerró mi campo de visión, cayendo inconsciente en las garras de las tinieblas. 

Luna' s POV 

La expresión de Toby al ver a Zalgo en una forma terrorífica, me causó un miedo inminente. Ben apretó mi mano y sentí lejanía.

- ¡APÁRTATE DE MI!- Empujé a Ben, no sabía que me estaba  pasando. Sentí pánico, y observé a Ben desfigurado sobre mi rostro. - ¡NO ME HAGAS DAÑO! 

- Luna no te haré daño, por favor, cálmate - Su voz se retorció, y su rostro dejó de ser humano. 

Mi corazón se aceleró. Alguien quería matarme, lo sabía. Pero ¿era Ben?  ¿Masky? ¿Hoodie?, dudé por un segundo, y comencé a delirar. Esta no era yo. Nunca ofendería a alguien, o empujaría a alguien a quien quiero. Caí en la cuenta de lo que estaba haciendo y comencé a llorar.

- Lo siento Ben, n-no sé qué me pasó - Ben me abrazó, y mis lágrimas empaparon su sudadera. 

-Creo que fue un ataque, Zalgo tiene a Toby dentro de un campo, no podemos hacer nada mas que esperar. -Susurró en mi oído.

-Pero ¿por qué te grité? Tuve un momento en el que dudé de sus intenciones, pensé que querían matarme - Una hebra de mi cabello cayó sobre mi rostro y recordé el día en que llegué aquí, el día en que todo comenzó. Mi respiración entrecortada impedía que parara de hacer sonidos con mi boca.

Ben hizo que me sentara en el suelo, observando el campo con la visión borrosa por las lágrimas. Se retiró la sudadera y la tendió sobre de mí, sintiendo una calidez reconfortante. Sequé mi llanto con mi antebrazo y una mancha negra apareció a lo lejos.

- ¿Toby se encuentra dentro de esa esfera?

- Sí, Slenderman  rodeó el campo junto con Masky y Hoodie, por si pasaba algo a los alrededores.

Después de unos momentos observando, aquella esfera despidió luz, rompiéndose como un cristal con el contacto del calor. Pareció que una aurora boreal rodeó a Toby, cuando la esfera ovoide explotó. Su cuerpo se mantenía en el aire, hasta que la luz se cerró, dejando caer a Toby.

Despidiendo un líquido negro por la boca.