Mi Novio Es Un Zombie 《Jos Canela》

《009》

Llegamos a un fraccionamiento, vaya a decir verdad está muy bonito.

- Es aquí .- me señalo a una casa de 2 pisos.

Sólo asentí con la cabeza, aparqué el auto en la calle. Bajamos los dos y nos dirigimos a aquella casa, no podíamos abrir la puerta ya que estaba sellada con tablas de madera, intentabamos abrirla hasta que decidimos entrar por la puerta trasera.

No fue nada difícil, ya que sólo estaba cerrada por dentro con llave. Así que rompí el vidrio y metí mi mano para encontrar el cerrojo que impedía abrirla.

Al entrar, me acerqué a un portaretrato que estaba ella con ese tal "James". Supongo que era su novio o algo así, ya que en la foto estaban muy cariñosos, pero yo porque estoy celos... Esperen, esperen ¿acaso yo estoy celoso? No puede ser, ya que soy un zombie nadie se fijaría en mi.

Menos ella, ella vale más que cualquier cosa, a lo que quiero llegar a decir es que ella vale mucho para que se fije en mi. No se puede comparar con alguien más.

Agarre un pedazo de cerebro que se encontraba en mi bolsillo derecho y me lo lleve directo a la boca. Sabía tan delicioso, pero cualquier cosa rica siempre tendría un final.

Me limpié la boca con mi manga, para que no sospechara nada Diana.

- ¿Oye Jota? .- me interrumpio aquella voz tan dulce.

- Mande .- respondí sin dificultad, al pronunciar cada letra que decía al hablar.

- Bueno me preguntaba que si viste a un chico en la farmacia donde nos encontrabamos, ya sabes, era alto cabello castaño, ojos verdes, largas pestañas, tez morena blanca. - ¡Oh! diablos, sabía que llegaría este momento.

Verán durante días o semanas que estado con ella, durante las noches cuando dormía hablaba diciendo cosas como estas "James" "James, por favor no me dejes".

- ¿Jota? ¿Estás ahí? .- me preguntaba pasando una mano en mí cara, saliendo de mi mundo y asentí en forma de respuesta de su pregunta.

- Entonces... ¿Lo lograste ver? Ya sabes a James. - me preguqnto esperanzadora. La verdad temía decirle la verdad, ya que se podría alejar de mí y no quiero que eso pase.

Estaba luchando con decirle la verdad o mentirle, así que decidí la primera opción el cuál era decirle la verdad.

- Yo.... yo si lo vi .- Le dije, al ver sus ojos tomaron un brillo que no podría explicarlo.

- Y bueno ¿lo viste salir de ahí? o para dónde se fue .- me preguntó angustiada.

- Bueno yo... yo... - tragué saliva por lo nervioso que estaba - yo... me lo comí - al terminar la oración su expresión de cara cambio a una de felicidad a una de tristeza y enojo.

《ESTE CAPÍTULO YA FUE CORREGIDO POR ERRORES ORTOGRÁFICOS》