UNA VIDA CARMESI

AVISO

IEsta historia la pausare por un tiempo ya que por algunos problemas del internet no podre continuarla asi que se que me mataran las personitas que la leen pero asta nuevo aviso continuare la histori aqui les dejare un cap mas talvez el ultimo de hoy o asta nuevo aviso y sin mas aquita^-^
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CHARLAS TEMPRANAS

"¿Qué demo...?... ¿Por qué me duele toda la cara?... ¿En dónde estoy?..." -balbuceaba en su mente el joven líder Rowdyruff.Poco a poco fue recuperando la conciencia y entre pequeños vistazos pudo observar que se encontraba en una habitación.El pelirrojo se sentó en la cama donde se yacía acostado minutos antes. La habitación le parecía conocida y más por el hecho de que era rosada.-¡Por un carajo... Estoy en la recamara de la loca piojosa esa! -al terminar su comentario llevó su mano a la barbilla, era el sitio donde más le dolía. -¡Ahhh! -exclamó por el intenso dolor.El dolor era uno punzante y penetrante, no sabía la causa de ese dolor pero no iba a quedarse a averiguarlo.Pensó que lo más conveniente era largarse cuanto antes de allí, pero si estaba en la recamara de la supertonta, quería decir que estaba en la casa de ella y allí le servían una comida exquisita."Sacaré provecho de todo esto" -pensó muy maliciosamente.-Veo que ya estás mejor.-¿Uhh? -la voz de Momoko le sorprendió de tal modo que desapareció su malicia; al menos por unos instantes.-¿Qué más carajo quieres rosadita? ¿¡Matarme!?Momoko se encontraba entrando por aquella puerta blanca de su cuarto, al cerrarla se acercó a él y se sentó en una pequeña silla al lado de la cama.-Pues debería. ¡Me hiciste enojar mucho! -le respondió sin siquiera mirarlo.-Me importa un carajo lo que te haga sentir, lo importante aquí es lo que yo sienta. ¡Casi me matas! Y lo más importante... ¡Casi arruinas mi bello y masculino rostro! -exclamó indignado.La pelirroja le iba a responder como se debe pero recordó los acontecimientos que llevan enojarse. Casi le partía la quijada al chico; y sí, por muy molesto y pendejo que era, no quería lastimarlo.Tras reflexionar un poco respiró hondo y llamó a la serenidad.-Me disculpo... ... Perdóname... por favor...-¿Eh? -Brick se sorprendió por éste comportamiento, esperaba un "eres una basura" o "eres de lo más asqueroso que hay" o "estúpido inmaduro" o "yo qué sé" pero ¿Eso?El joven pelirrojo se quedó pensativo unos segundos, necesitaba una respuesta conforme que lo librara de la pequeña escena que inició la poderosa.......Mientras él pensaba, en una parte alejada de ese sitio se encontraba Mojo Jojo; quien había pasado semanas metido en su laboratorio subterráneo.-¡Por fin! ¡He terminado mi Robot Jojo! -exclamó con un gran salto y encendiendo la luz del pequeño lugar. -En otras palabras, ¡El robot que hará que Nueva Saltadilla se arrodille ante mí! ¡Jajaja! Aplausos por favor. -Mojo tomó una cámara fotográfica y comenzó a sacarle fotos a su nueva maravilla: un potente robot del triple de su tamaño con misiles en los hombros y garras como brazos. Era bípedo y con una forma que recordaba a los dinosaurios. En su lomo se encontraba la sala de control donde Mojo; al parecer, lo manejaría.-¡Sonríe! ¡Eso, eso! ¡Más sonrisas! -murmuraba alegremente sin darse cuenta que detrás de él una sombra comenzó a moverse bruscamente.-¡Jijijiji! --¿¡Uh!? -la aguda risilla espantó ferozmente a Mojo. -¿¡Quién anda allí!?Mojo era un gran miedoso a pesar de ser un supervillano, por lo cual no pudo evitar comenzar a sentir terror al no poder ver al intruso.El lugar que de por sí era poco luminoso, en un instante se obscureció en su totalidad.-¡Eehh! ¿¡Qué demonios pasa!? ¿¡Qué es esto!? ¡Mamaaa! -empezó a gritar el no tan valiente Mojo.-¡Jijijiji!... -la risilla aguda comenzó a desaparecer en un ligero silencio, para exaltar a Mojo Jojo con un espeluznante grito fuerte y grave. -¡BASTA DE ESTUPIDECES!-¡Ahhh! -Mojo cayó al suelo muy espantado por lo que estaba pasando.Fue tanto el miedo, que no pudo evitar cubrirse la cabeza con sus manos.-Qu...quien... ¿Quién eres?... -preguntó el mono muy aterrado.-¿Ya no me recuerdas?... Qué imbécil... Pero es de reconocer... Después de todo... Estoy cegado... Cegado de una inmensa... Inmensa... ¡IRA!......En la casa de la líder de las superpoderosas, Brick se encontraba en un dilema. ¿Qué podría hacer respecto a la escenita que le planteó la pelirroja?-Por un carajo... ¿Ahora qué digo? No le puedo decir "Vete a la burrada y metete esas cursilerías por el"... ¿O sí?... ¡No! ¡Rayos! ¿¡Qué mierda me pasa!? ¿Yo el gran Brick estando en estas circunstancias gracias a una mocosa y piojosa niña? ¡No!... ¿Qué haría Butch en éste momento?...Amm... Lo más seguro es que le dijera "Soy gay"...Veamos... ¿Qué haría Boomer en ésta situación?... Lo más seguro es que le dijera "Soy más gay que Butch y estoy embarazado"...¿Qué haría el simio apestoso?... "Yo no soy gay como mis hijos, yo no tengo género" ... "Mojo"...¡Baah! ¡Vamos Brick! ¡Piensa en algo! ¿Pero en qué?-Tierra llamando a Brick... ¡Hey! -Momoko le hizo un par de chasquidos con los dedos para que éste reaccionara. -¿Estás bien?-¿Ah?... Sí... Es solo que... -el pelirrojo agachó un poco la mirada y sorpresivamente le respondió en voz baja. -No deberías disculparte...Momoko se sorprendió un poco, Brick parecía algo sincero... ¡Esperen! ¿Sincero? ¿Él? ¡Imposible!-Bueno... ¿Tienes hambre? ¿Quieres algo? -preguntó ella cambiando el tema.-¡Por supuesto que tengo hambre! Después de madre golpiza que me diste a muerte, ¿Crees que no tengo hambre? Simplemente estás loca mujer. -respondió él con su típico egocentrismo.La pelirroja suspiró y le pidió un poco de paciencia mientras iba a buscarle algo de comer; quizás un par de panes no le vendrían mal.La heroína salió de la habitación y lo dejó recostado en la cama, Brick no podía dejar de admirar el hermoso cuarto que poseía la chica.Aunque ya había estado allí, no le había puesto atención detallada al lugar.La comodidad de la cama era algo imposible de comparar con lo estrecha, retorcida y dura que era su litera.La vista era demasiado hermosa, la decoración era muy acertada; muy feminista y cursi, pero le daban ese carisma a la habitación de ella. Habían retratos suyos con su familia, con sus amigas, con sus mascotas, etcétera.Si bien todo en el cuarto de ella era rosa, algo dentro de él comenzó a emparejarlo con su amor profundo al rojo.El televisor era algo descomunal para él, en su casa solamente poseían un simple televisor pequeño y robado... Pero que le había venido bien a su extraña familia. El aire acondicionado era lo mejor que Brick veía en el lugar. La habitación de él no tenía uno y ya estaba irritado de tener que dormir con la ventana abierta y que le picaran los mosquitos.Encima de todo ello, el lugar tenía un aroma que no podía describir, era un aroma realmente delicado y agradable. Olía a fresas, fresas cálidas y sabrosas... ¿De dónde provenía tal olor?De repente el chico comenzó a acostarse y acomodarse en la cama, se abrigó con la cobija rosada de la pelirroja y recostó su mejilla en la almohada de igual color. Se colocó de medio lado y no pudo evitar oler la fragancia que poseía el cojín.Estaba oliendo un aroma fantástico, nunca antes había olido una fragancia tan placentera, era difícil de describir, le daba calidez, placer, seguridad, felicidad... y la vez, mucha tristeza. ¿Pero por qué?Brick estaba de espaldas a la puerta, por lo que no le prestó atención a la presencia de Momoko.Ella estaba atónica, no podía creer lo que estaba viendo. El chico estaba sobando su mejilla y rostro con la almohada; la verdad no sabía si espantarse, asustarse o sentirse extraña.-Eh... ¿Brick?La voz de la pelirroja le hizo espantar bruscamente.-¡Ahh! ... ¿¡Qué!? -dijo reincorporándose y sentándose de golpe en la cama. -¡Ah! ¡Al fin trajiste mi comida!-S...sí... -dijo un poco nerviosa. -Aquí tienes.Momoko le colocó la bandeja de comida sobre sus piernas, mientras que tomaba asiento y sacaba un par de golosinas.Brick comenzó a devorar su "desayuno" pero no pudo evitar observar con mala gana a su contraparte.-¿Es que tú no comes más nada que no sea dulce? -preguntó algo repulsivo, a Brick le encantaba y fascinaba los dulces, pero tampoco era para exagerar.-Es que es mi vida. ¡Mi adicción! ¿Qué tiene de malo?-¿Qué tiene de malo? ¡Todo! ¿¡Quién carajo come tanto dulce y está saludable!? -preguntó aún más repulsivo y asqueado el Rowdy.Brick no era la voz de la razón y mucho menos ¡Jamás! Sería la voz de la razón, pero estaba tan asqueado de que estuviera comiendo algo ligero como desayuno, y ella estuviera devorando dulces.-¡Pues yo! ¡Soy la figura de lo saludable! -dijo con egocentrismo y prosiguió a comerse sus dulces.-¡Pues estás equivocada tonta rosa! ¡Si sigues tragando tanta basura te pondrás más gorda de lo que ya estás!El comentario de Brick hizo enfadarla de inmediato. ¡Nunca le digas a una chica gorda, y menos a Momoko!-¡¿Qué crees que dices estúpido?! ¡Yo no estoy gorda!-¡Sí lo estás! ¡Y si sigues comiendo tanta mierda te pondrás más gorda que el planeta tierra! ¡Serás un nuevo planeta!-¡Cállate imbécil!-¡No me callo! ¿¡Cómo crees que voy a estar comiendo tranquilamente mi desayuno mientras tengo en presencia a una marrana comiendo mierda delante de mío!?Esa fue la gota que derramó el vaso. ¡Ahora sí que se había pasado!-¡Eres una basura! ¡Un imbécil! ¡Un idiota! -Momoko estuvo tan indignada que le lanzó los dulces y la bandeja de comida en toda la cara, golpeándole la herida nuevamente.-¡Aahh! -gritó fuertemente el chico al sentir el penetrante dolor en su no tan cerrada herida.La chica vio lo que hizo y rápidamente trató de calmarse.-Lo... lo lamento. -dijo muy poco creíble, pero diciendo la verdad.El Rowdy se agarró fuertemente la herida, para así evitar que el dolor fuese más intenso. La verdad él se lo ganó, ya que se pasó de grosero.-Es la segunda vez que intentas matarme... Y yo solamente te estaba aconsejando...-¿A...¿¡Aconsejando!? -nuevamente el comentario de Brick fue fuera de lugar.-Sí.-¡Explícate! -le amenazó nuevamente la pelirroja entrando en la indignación.-No sé ni me interesa esas tonterías de cuidarse y ser saludable... Pero he visto muchos programas y... las personas tienen a perder sus bellezas físicas por tanto descuidos... Y el comer es uno de esos descuidos... -el chico pausó para voltear la mirada de ella y agarrarse más fuerte la herida.-Es solo que... Si comes muchos dulces te pondrás gorda... Y perderás esa bonita figura que tienes...