No me interesaba mucho perdonar a Daniel la verdad. No puedo creer como es su forma de ser. Atractivo, gracioso, amable, y a la vez, frío, falso, mentiroso...
Iba tan metida en mis pensamientos que me choqué con alguien.
—Oh... Lo siento, culpa mía —dijo ese chico de cabello rubio y ojos azules mirándome. —Creo que soy un imán para chocarme con chicas guapas —bromea— Me llamo Luke.
—Mía —me presenté —Encantada.
—Soy nuevo aquí, espero verte mas veces.
Reí —Cuando quieras —Digo para luego remontar mi camino y volver con mis amigos.
—Donde te habías metido? —pregunta Sam.
—Problemas de mujeres, amigo —digo revolviéndole el pelo y el hizo una mueca de asco a lo que yo reí.
—Oh... Yo se mucho de mujeres —suelta Calum —Hay dos tipos, las que están buenas y las qu-
—Por dios Calum cállate ya. —interrumpí.
Chloe me miró y con sus labios pronuncio el nombre de Dani, yo afirmé.
(...)
—Y que te dijo? —Pregunto Chlowy al llegar a casa.
—Quería pedirme perdón por haberme utilizando —conté.
—Uh- Vaya, Daniel Oviedo pidiendo perdón, eso significa algo Mí.
—Si, que soy una mierda como todas las demás.
Ríe.
—Eres adorable —suelta con sarcasmo —Y te quiero, te quiero mucho.
—El sentimiento es mutuo.
—Buenas noches —dijo ella tirándose en la cama.
—Que duermas bien —dije antes de apagar la luz.
(...)
Llegamos al instituto a eso de las 8:30, fuimos como siempre a la planta de arriba y nos sentamos. Estuvimos repasando los ejercicios que venían para hoy hasta que el timbre sonó anunciando que las clases iban a comenzar.
Cada uno se sentó en su respectivo sitio, y yo, como no, al lado de Daniel.
—Buenos días —me dijo al sentarse.
Yo solo hice una mueca en forma de saludo y cogí los libros de Física.
—Tenemos un nuevo alumno —dice el profesor al entrar en clase —Pasa por favor.
Y ese chico rubio de ojos azules con el que me había chocado en el parque de atracciones entró en la clase haciendo que todas las bocas de las chicas presentes se cayeran al piso.
Luke me vio y sonrió a lo que yo devolví la sonrisa.
Dani me miró —Quien es ese? —pregunta con el ceño fruncido.
—Oh... Es un chico que me encontré ayer, a que es guapo?
—Uh si, guapísimo —dice para luego abrir su libro.
Daniel? Celoso por mí? No puede ser, de ninguna de las maneras, no.
—Puedes sentarte detrás de Mía y Daniel —dijo el profesor.
El se sentó.
—Hola Mía —Me dijo sonriendo.
Yo le sonreí.
[...]
—Sabes? Me sacas de un apuro, pensé que no conocería a nadie! —ríe. —Siempre traes alegrías? —pregunta pasándome un brazo por los hombros.
Río.
—Algo así —vuelve a reír.
–Mía! Has visto que bueno est- —se paró al ver a Luke. —Uh, hola soy Chloe.
—Encantado de conocerte —dice Luke.
—Que bueno está quien? —pregunto riendo.
—El profesor de plástica...
—Es un viejo de cincuenta y tantos años.
—Se ve que... Se echa una buena crema —sonríe tímidamente.
—Hola chicas —dice Sam —Y tío que no conozco... —se para a mirar su brazo alrededor de mis hombros.
—Soy Luke. —dice el rubio jugando con su piercing del labio.
Joder que Sexy.
Miré a un lado y vi a Dani mirándonos con el ceño fruncido.
Apartó la mirada cuando se dio cuenta de que lo estaba mirando.
—Te apetece ir esta noche a cenar? —me pregunta Luke.
—Como... Una cita? —digo.
—Si, como una cita —dice.
—Oh Claro.
—Te recojo a las ocho, hasta luego.