El autobús paró en las afueras en la que algunos chicos bajaron.
—Vamos —dijo Dani.
—Espera que? —dije —No sé ni dónde estamos.
—No te preocupes, mis abuelos tenían aquí cerca una cabaña. Y le he robado las llaves a mis padres.
Bajamos del autobús y caminamos en dirección al bosque.
—Siento haberte metido en esto —dijo.
Suspiré —Creo que ya da igual.
Cogió mi mano. —Ya casi llegamos.
Estuvimos como un cuarto de hora caminando hasta que llegamos a una cabaña, estaba un poco vieja y había un lago al lado.
—Creo que aquí estaremos a salvo —dijo.
—Crees? —pregunté.
—Lo sé —besó mi mejilla.
Abrió la puerta y esta chirrió. Entramos y el polvo parece que se había apoderado de aquella casa.
—Tendremos que limpiar —dijo Dani.
—Pues que bien —ironicé.
[...]
—Te apetece ver una peli? —pregunta.
—Me apetece irme a mi casa —contesté de mala manera —Con mis padres, con... Con Chloe, Calum... Hasta con Sam. No quiero vivir esto.
—Cuántas veces te tengo que pedir perdón? —pregunta frustrado.
—No quiero que me pidas perdón! Quiero que me lleves a casa!
—Pero no puedo! Es que no te das cuenta?! Estás en peligro!
—Me dijiste que estaría a salvo!
—Ya no se ni lo que digo vale? Esos hombres van muy enserio. Solo quería protegerte lo suficiente, pero no podré parar esto toda la vida.
—Vendrán a por nosotros? —pregunté.
—Yo no quería meterte en esto, Mía —Oh Dios mío está hablando enserio. —Yo... No quiero que pase.
—Pasar que? —estaba a punto de llorar —Yo para ti no era nadie, solo una chica cualquiera a la que utilizaste para... Aprobar una puta asignatura. Aparte de que te liabas con todas y... Yo como una tonta enamorada mirándote y preguntándome que como podías ser así. Y luego llegó Luke. Qué también me engañó y por vuestra culpa fui al hospital. Y... Y luego perdí a Sam, él era mi mejor amigo, el único chico en el que podía confiar. Y ahora esto. —las lágrimas ya recorrían mis mejillas. Él me observaba callado. —Di algo! —grité.
Pero en vez de eso cogió mi rostro con ambas manos y me besó. Me besó tan fuerte que pensé que me dejaría sin respiración. Era un beso lleno de pasión gracias al conflicto que acabábamos de tener.
Mi mano se dirigió a su nuca y lo atraje a mí profundizando más el beso. Sus manos atraparon mis caderas y me pegaron más a él.
Empezamos a caminar hasta que chocamos con el sofá y caímos, él encima mía.
Una mano subió por mi espalda hasta llegar al broche de mi sujetador.
—Dani —puse una mano en su pecho frenándolo.
—Lo siento... —dijo. Juntó nuestras frentes —me dejé llevar... Eres perfecta, entiéndeme.
Reí —Que galán.
Me volvió a besar pero esta vez el motor de un coche hizo que nos separásemos.
—DANIEL! —oímos gritar fuera y el sonido de las balas golpeando la puerta fue suficiente para que entrara en modo de Shock.
Dani me cogió la mano y rápidamente subimos arriba.
—Dani —dije agitada.
—Shh —acarició mi mejilla —Tranquila —me susurró.
Echaron la puerta abajo y empezaron a destrozar toda la casa. Los disparos no cesaban.
Cerré los ojos tan fuerte como pude rezando para que esto solo fuera una pesadilla. Sentí los labios de Dani sobre los míos mientras alguien estaba subiendo por las escaleras.
Noté como Dani me ponía algo en la mano. Abrí los ojos.
—Spray de pimienta? —susurré.
—Cuando te diga ya, lo disparas en la cara de ese tío vale? —me susurró.
Suspiré y afirmé.
Los pasos se oían cada vez mas cerca hasta que estaban a milímetros.
—Ya! —gritó y disparé el spray a aquel hombre para que luego Dani lo empujase y este cayera al piso de abajo.
—Está muerto? —pregunté.
—Posiblemente —dijo Dani observando como aquel hombre sangraba por la cabeza.
Mi respiración se agitó más.
—Eh eh —cogió mi rostro —tranquila pequeña.
—Hemos matado a un hombre. Nos van a meter en la cárcel.
Me miró —Tenemos que hablar con Luke.