Capítulo ocho: No te olvidaré

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Había pasado una semana desde mí captura. Estaba mal y no dejaba de pensar en Austin y en la razón por la que no me rescataba. Perdí la esperanza de verlo de nuevo, Marvin me traía la comida, no tenia ganas pero él me rogaba que comiera, si no sería peor. No abusaron de mi y sólo me golpearon una vez. Fue hace dos días cuando me rehuse a comer y Angelo me dio una cachetada, él estaba a punto de seguir golpeando más pero justo entro Marvin y Angelo se fue dejándonos sólos , Marv asustado se acerco a mi, me ayudó a comer.

-Emily, necesitaras fuerzas te juro por mis hijos que te ayudare a escapar de aqui-Dijo en susurro fue cuando levanté mí rostro y lo vi, enserio se preocupó por mí.

Con pocas fuerzas le dije: GRA...CIAS. Me vio por última vez y se fue. Creo que tenia que pensar y yo igual. Marv era mucho más grande y alto que Angelo pero este último daba miedo.

Esta misma noche escuché que una puerta se abría y me desperté por el ruido de pisadas firmes y pesadas, recuerdo que una chica gritaba y comencé a llorar por ella.

-Callate maldita perra! No ves que nadie te salvará? Y si sigues gritando te juro que te haré algo para que tenga sentido lo que haces...-reconocí la voz de Angelo y tuve miedo de ser la siguiente.

-No! Porfavor, para DUELE!! Aaaaah!!! -Decía la chica. La puerta se cerró y pude oír pasos que se detuvieron en mí puerta, esta se abrió y me puse rígida en la cama. No sabía donde estaba el culpable de mí desvelo. Comenzó a rozar mí pierna y a subir hasta mí muslo, tocó mí trasero y me di vuelta. Era Angelo, un hombre de 40 años aproximadamente tratando de violarme, sentí un escalofrío y estaba segura de que no sobrevivirá esta noche. Cuando me tomó del brazo muy bruscamente y no me quedó otra opción que levantarme, pasó su lengua por mí cuello y mi mejilla. No lograba dejar de llorar.

-Nena tu también harás que tenga que obligarte a que te calles?-Esta vez su agarre se puso más y más fuerte.

-Porfavor basta... no hice nada, tengo familia. Por... favor-Él me soltó y empujó en el colchón que dejaron un día después de mí llegada. me quito la blusa y cuando estaba tirando de mí pantalón entró Marv, con un bate de béisbol.

-Alejate de ella. -Dijo mí salvador con tono molesto.

-Marvin, amigo que haces con eso?-Preguntó Angelo pero sabía la respuesta.

-No me hagas repetirlo...

Angelo se alejó de mí y levantó sus manos para que Marvin dejará esa "arma"

- Podemos resolverlo. Sólo baja el bate.

-Emily ponte tu camisa y sal, te sacaré de aquí.-Obedecí las órdenes y al salir el ruido de dos cuerpos estrellándose contra el piso hizo que me volteara. Ahí estaba Angelo sobre Marvin impidiendo que respirara. Marvin logró zafarse para quedar él arriba.

-Emily... el bate.- Corrí hacía el bate y lo tomé con manos temblorosas. Me di vuelta y golpee a Angelo en la espalda con todas mis fuerzas pero fue tarde. Vi cerca de mí cama un cuchillo y cuando me acerqué Angelo me tomó del pie haciendo que caiga.

-Me las pagarás hija de perra. Algo que quieras agregar antes de que te mande al maldito infierno donde perteneces?

-Si... Si alguien muere, eres tú.- y hundi el cuchillo en su garganta. Él calló hacía atrás.

Me arrastre para ver como estaba Marv, pero era tarde... estaba muerto por mí culpa. Las lágrimas no dejaban de bañar mí rostro.De pronto recordé que no era la única en ese horrible lugar, busqué las llaves en la chaqueta de Angelo y libere a las demás chicas.

-Están todas bien?-Dije una vez reunidas pero nadie contestó pero asistieron al mismo tiempo.

-Vamos salgamos de aquí...

-Estaba con él... pero no era igual... Salvó a muchas de ser violadas.- Dijo una chica pelirroja de unos 24 años.

Salimos todas y nuestros ojos ardieron un poco frente a la luz del sol, sentimos la suave brisa del viento, no sabíamos donde estábamos corrí hasta el cuarto donde yacían los cuerpos, tomé el celular de Marv y llamé a Mí hermano. Estaba muy feliz de escucharme y le dije que le avisé al 911 para que rastreen la llamada. Esperábamos que funcionará y mientras esperábamos dijimos las grandes hazañas de Marv, una por una habló.

-Emily-Dijo la pelirroja.-Eres la más nueva, luego de ti no trajeron a nadie... Quieres hablar?

-Si. Bueno Marvin me salvo de ser violada un par de veces, dijo que le recordaba a su hermana pequeña -Para ese momento mis lágrimas salieron de forma automática.- Le debo la vida... Puedo volver con mí familia y con mis amigas, perdió una familia por nosotras. Esperaba que no haya más desapariciones y actuó. Siempre lo recordaré como un héroe no como un criminal. Con las vidas que salvo pagó sus crímenes.

Mi primer amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora