23. Nenes rebeldes 1/2

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Blake. 

 "Tierra a Blake." El pétalo de una rosa callo sobre mi cara. Celine me observaba con diversión, me había sido imposible el concentrarme toda la tarde después del sueño que tuve la noche anterior. "Te necesito aquí cariño... Centros de mesa..." Señalo los diversos arreglos florales cubriendo la mesa. "Blake, Blake, centros de mesa." Sonreí un tanto avergonzada. "¿Cual te gusta?"

"¿Tiene alguno con girasoles?" La mujer de cabellos platinados frunció y negó mientras ajustaba el puente de sus gafas. "¿Podría hacer alguno?"

"Claro que puedo, es solo que... Los girasoles no son flores muy elegantes, no creo que combinen con este lugar."

Asentí sintiéndome decepcionada, amaba los girasoles, eran flores alegres y coloridas, recuerdo que un hombre me regalo un ramo cuando era muy pequeña, fue la primera vez que las vi y quede fascinada, ni siquiera podía recordar el rostro del sujeto, era bastante pequeña.

No esperaba lo que venia.

"Entonces haz que los girasoles combinen con el lugar Amelia, se supone que eres la mejor." Me sorprendí del tono que uso Celine. "Crea algo con girasoles para mañana, y veamos cual le gusta a Blake."

La mujer frunció el ceño en todo momento pero Celine no se sentía ni un poco intimidada de la mirada fulminante de la tal Amelia.

"Sera mas caro, estoy trabajando fuera de mi propio tiempo." Celine chasqueo.

"No es problema, si conseguí el Plaza en dos días tus florecitas es lo menos que me preocupa, andando." La mujer no dijo nada mas solo apretó los labios y se fue por donde quiso. "¿Es una terrible bruja no es así?" Celine rió entre dientes. "Venga nos falta mucho por hacer."

...

A la mañana siguiente la rutina era la misma, un baño rápido, cambiarme y salir a desayunar, ese dia no empezaría como los otros.

"Buenos días Blake." Esta vez todos permanecían en la sala. Ray con su periodico cruzado de piernas, Ethan con una revista Time y Celine con su agenda cruzada de piernas una vez mas vestida impecable y guapa. "Desayunaremos fuera." Me informo Ray con una sonrisa.

"Esta bi-en." Dije incomoda en mi sitio. ¿me debía de haber sentado y leer algo también? ¿o esperar hasta que estuvieran listos para irse? "¿Podría Raul llevarme hoy al correo? Me gustaría enviarle una de las invitaciones a Eve sobre el evento del sábado."

"Por supuesto, podemos ir, después de ir al hospital." Me respondió Celine.

"¿Hospital?" Pregunte extrañada, Celine asintió. "¿Para que iremos al hospital? ¿Piensan visitar a alguien?"

"No, no, princesa, nada de eso." Ella rió. "Dile Ray." Mire al hombre quien apretaba los puños sobre su regazo.

"Donativos de sangre, una de mis empleados, Billy, lo van a operar. Se necesita donar cierto cantidad de sangre, pensé que estarían interesados en participar, los llevaremos a comer algo mucho mas sano y de ahí iremos al hospital."

Yo odiaba los hospitales, la sola idea me erizo la piel, mas sin embargo no estaba en el papel de decir que no cuando este hombre nos había abierto las puertas de su casa.

"No serán los únicos, los nenes rebeldes de Ray también irán."

"¿Nenes rebeldes?" Esta vez fue Ethan el que hablo. "Pensé que no tenias hijos."

"No son mis hijos." Aseguro Ray. "Son mi nuevo proyecto musical, son el futuro de la industria, serán estrellas." Le mire intrigada, el parecía muy seguro de sus propias palabras. "Me gustaría que les dieras un vistazo." Murmuro hacia mi. "Dime si estoy o no equivocado con ellos."

Problemas de una rubia (CALM#3)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora