Provócame

Prólogo

Oh Dios otra vez ¡NO! corrí subiendo las escaleras, escuche sus pasos seguirme, me alcanzo y me tomo por la cintura y me hecho sobre su hombro.

Entonces entro en mi habitación y me tiro sobre la cama, rápidamente subió encima de mí y empece a gritar: 

-¡¡NO!! Suéltame, por favor...¡¡BASTA!!

-Calla maldita zorra...Te gustara lo sé...

-Para...no déjame por favor...

¡¡OH DIOS!! No otra vez no, siempre es lo mismo... Me va a doler lo sé igual qué siempre.

-Cállate dije, Te va a encantar zorrita...

¡OH! me falto el aire cuando me embistió con fuerza, dolió mucho. Mis lágrimas empezaron a descender por mí cara, me dolía, el tenia una sonrisa en la cara...

-Te encantara...

-¡¡Oh Dios no!! ¡¡PARA!! ¡¡NO!! Me duele por favor, No...

-¿Te gusta pequeña?

-NO... Pará me duele...- susurró entré lágrimas.

Sentí que alguien me zarandeaba y me hablaba ¡¡RACHELL!! ¡¡DESPIERTA!! NENA. Me incorpore de golpe, asustada y desorientada Sam estaba de rodillas en mi cama con cara de asustado.

-Dios nena, ¿Una pesadilla?

Asentí con la cabeza, el se sentó a mi lado y me abrazo, acariciando mi pelo.

-Ven... ¿Estás bien?

-Si...

Se recostó y me llevo consigo todavía abrazándome. Me tapo con la sabana, sabía que dormiría conmigo como siempre cuando tenia pesadillas.

-Duerme nena, no pasa nada, yo estoy aquí...Descansa.

Beso mi cabeza y me abrazo contra su pecho, mis ojos empezaron a cerrarse lentamente, hasta que me quede dormida.