No Todo Es Color De Rosa

Capítulo 9 parte 1

Pasó la semana que necesita de reposo, pero ¿quién iría el jueves y viernes? Ya era viernes.

Decidí quedarme en casa con Will a mí lado.

-Tendremos mucha tarea- dije tumbandome en la cama.

-Ni que lo digas- dijo Will mientras se tiraba encima de mi.

Nosotros sólo reíamos cuando tocaron la puerta.

-Will te busca tu mamá- dijo mamá.

-Sí ya bajo, gracias- Dijo Will bajandose de encima mío.

Ambos bajamos hasta la sala donde se encontraba su madre... Y ella... Estaba llorando.

-¿Mamá qué pasa?- dijo Will acercándose a ella.

Está sólo se puso a llorar, mamá traía cafe junto con papá.

-Tu papá esta muerto- dijo la señora soltandose en llanto.

Will no tenía ninguna expresión en su cara, ni siquiera tristeza.

Su madre lo abrazó y Will salió corriendo.

-Papá, ya regreso- dije a papá lo más rápido que pude, además sólo él me prestó atención.

-Con cuidado hijo, traelo contigo- dijo papá preocupado.

Salí corriendo en dirección donde había salido antes Will, corrí casi media hora persiguiéndolo, y de repente ya no lo vi, decidí caminar y seguir buscandolo, por suerte  aun habia sol pero muy poco.

-Will ¿donde estas?- pregunté muy preocupado. -Por favor sal de donde estés, no es momento de jugar a las encondidas- suplique.

No había señales de él, seguí caminando mientras lo buscaba.

No lo dejaría así y mucho menos ahora.

Caminé como 10 minutos más cuando por fin lo encontre.

-Will...- corrí hasta el. -Por favor regresemos a casa- le suplique.

-No Jacob, todo esta bien- dijo muy seco.

-No Will no lo esta, ven por favor- le suplique de nuevo.

-¡Carajo Jacob entiende que no quiero!- me gritó

-Mira William, no éstas bien, nada ésta bien ¿okey?, tu me ayudaste cuando estaba mal así que es mi turno de ayudarte y vendras a casa conmigo sin protesta alguna- dije poniéndome de pie y jalandolo camino a casa.

Will sólo se quejó, quería llorar yo lo se, pero se hacía el fuerte delante de mí.

Estábamos cerca de la casa, exactamente en la escuela, cuando la misma moto que me detuvo la vez pasada estaba frente a nosotros.

-¿Qué mierdas quieres Fabián?-  pregunté mirándolo serio.

Si mí mirada matara, Fabián ya estuviese muerto.

-Nada solo vengo a ver a mis dos raritos favoritos- dijo riéndose.

-Lárgate ya, ¿no te bastó con los paliza que te di la última vez?- preguntó William, quien soltó mí mano y se puso delante de mí.

-¿Esos fueron golpes?- preguntó gracioso.

Will apretaba la mandíbula y los puños del coraje, sus nudillos estaban  blancos.

-Will tranquilo- lo jale del brazo. -Vamonos ya, no vale la pena- dije esquivando a Fabián.

-¿A donde rarito?- dijo Fabian agarrandome de la mano.