Tortura (Jane The Killer)

Prólogo

Muchas veces nuestras propias mentes nos engañan con lo que es bueno y malo, con lo que nos gusta y con lo que odiamos, con nuestras metas y a lo que no queremos llegar, sinceramente, no todas nuestras metas se basan en lo que nos gustan, y no todo lo que nos gusta es lo correcto, tampoco lo correcto es justo, y lo justo no lo es a la vista de todos, y de todos ¿Quién tiene la razón? ¿Acaso la razón sirve como excusa para algún acto o dicho? La respuesta a todo eso es "No lo sé", ya que la mente nos puede jugar cruelmente en nuestra contra así como darnos razones favorables para algo que nos guste o que desde siempre pensamos en que es lo correcto.

Muchas frases y recomendaciones en nuestra vida son basura, como lo de "Si pienso que no tengo frío, no lo tendré", ese pensamiento no es para cualquiera, la mente reacciona a lo que está fuera y sería necesario años de práctica y paciencia para cambiar con lo que nacimos, que aún así nos quedaría un porcentaje mínimo que demuestra que no hemos cambiado en absoluto. Lo que dicen que la mente y los sentimientos no están conectados es pura mentira, la mente nos dice que nos gusta y es quien reacciona a los hechos, no puede existir un debate entre la mente y el corazón si uno controla al otro de manera fija eternamente, esta es solo una mentira para justificar y no terminar aceptando nuestra bipolaridad, la cual debería ser considerada normal en unos que otros aspectos, como las decisiones, los sentimientos, los pensamientos, y todo en busca de lo mejor para nosotros.

Esta historia comenzará con los pensamientos de la protagonista, como si estuviéramos en su lugar, de manera que nuestra mente jugará tanto con nosotros como la mente de ella hizo o hará lo mismo, el porque de esto es sencillo, uno no puede explicar lo que es la verdadera tortura mental y física, aprisionada de las peores maneras, con un pasado inimaginable, la idea es entender a las otras personas mediante sus zapatos, lo preocupante de esto es que el máximo que podemos conocer a una persona es el 99 por ciento, ya que está siempre tendrá 2 o 3 secretos que se llevará a la tumba, ya sea porque son suyos y siempre los protegerá, o se les olvida.

Uno no conoce las verdaderas razones, solo conoce sus deseos, nunca, y me refiero a que nunca sabremos la realidad que se oculta en nuestras propias mentes, no sabemos porque somos así, solo sabemos que lo somos, y muchas veces no lo elegimos nosotros, sino la mente de manera aparte, no decidí ser esto, no decidí actuar como tal, no existe explicación alguna para los sentimientos, en esta vida el "porque sí" nos mata y nos hace nacer, después de separarte de alguien te preguntarás el porque o no lo aceptaste tal como era, y es que cuando las cosas que hacemos nosotros mismos no le vemos la lógica, entendemos de una manera u otra que fue una acción a ciegas, y todo en la vida es una cadena, si haces algo tienes que explicarlo, y esa explicación también la tienes que explicar, para al final llegar a un "porque sí"