Tortura (Jane The Killer)

Capítulo 13: Locura

- Jejeje... Jaaaaaane... ¿dónde estás querida? - solo les responderé a ustedes, estaba huyendo por mi vida, estoy molida a golpes... déjenme explicar lo que paso

Hace unas horas

Mientras Jeff estaba supuestamente durmiendo fui a la cocina de lo más normal, tomé un poco de agua, pero me preocupaba el estado que Jeff tomaba ahora... tal vez esté loco pero esto llegó a otro nivel... a un nivel de bipolaridad... ya no puedo evitar pensar que yo le gusto, es demasiado obvio, y lo que más me molesta aún, es que le estoy correspondiendo en el sentimiento, recosté mi cabeza en la mesa, y sentí como mis labios me picaban... traduzco... me quedé con las ganas de ese beso... era tan... el chico que conocí hace años... lo extrañaba y sentía que lo tenía de vuelta, obviamente no de apariencia que, para los que no lo sepan, era la imagen de un ángel, pero su actitud linda y pícara había vuelto por 48 horas... de la nada escucho un vidrio rompiéndose y me paro de golpe, empiezo a escuchar unas risas muy macabras, me acerco al marco de la puerta abierta de la cocina y Jeff aparece de golpe asustándome.

- Pero mira que belleza me acabo de encontrar - su aliento era alcohol

- Estás borracho -

- Y con muuuuuuuucha suerte mi vida - rápidamente me agarra del brazo y me jala hacia él... r... roban... robándome ¡¿un beso?! esto se salió de control, lo empujé como pude, al parecer borracho es más débil, tambaleó un poco hacia atrás - Te voy a hacer mía - joder. Salí corriendo hacia la habitación, él me tiró la botella rota pero la esquivé, una vez ahí me encerré - Jaaaaane, abre la puerta corazón - estaba buscando la manera de bloquear la puerta, busco con la vista y nada... ¡la mesa! Jeff había dejado la mesa con las herramientas aquí, y la tenía cerca, la agarré y la puse en la puerta que Jeff estaba intentando abrir, después de que yo soltara la puerta tendría aproximadamente 7 segundos para esconderme, así que hice lo más básico... me escondí bajo la cama. Mi corazón palpitaba a mil, no sabía que hacer, sabía que tarde o temprano me encontraría, a menos de que su memoria este en su contra, pero siento que sufro un infarto, cuando Jeff usa sus fuerzas para derribar la puerta, rompiéndola por completo y dejando caer la mesa, gracias a eso, uno de los cuchillos llegó a mis manos, podría intentar cualquier estupidez en defensa propia, a fin de cuentas, me haría daño sí o sí, caminó por unos momentos diciendo mi nombre con un tono burlón, parecía la copia del Guasón, solo que más tenebroso y siniestro - Jane... puedo oler tu perfume - cada comentario que hacía me ponía la piel de gallina y me hacía sudar frío, escucho los pasos recorrer el pequeño lugar - ¡Aja! - dice abriendo el clóset - Mierda - dice al darse cuenta que yo no estaba ahí, escuché como movía las sabanas mientras maldecía - ¿Dónde te metiste maldita puta? - escuchaba como sus pasos tambaleaban, se notaba de sobremanera que se encontraba bajo influencia, eso no quita el hecho de que sea peligroso, al contrario, lo hacía peor.

Siento que por fin tengo un respiro cuando escucho como si sus pasos se estuvieran alejando, no volteé a ver la sombra ni nada, hasta que... - AAAAAHHH!!! - siento un jalón fuerte desde mis piel.

Jeff me voltea y me agarra de los brazos - ¡¿Crees que soy idiota?! -

- ¡No, Jeff, yo nunca pensé eso! - mentira, pero tenía que tratar de todas las maneras de salvarme, me da una cachetada

- ¡Eres una mentirosa! - me da 2 golpes - ¡¿Por qué huiste?! - sinceramente no sabía qué responder

- ¡Me asusté! -

- ¡¿Ah sí?! - me dio 2 palizas más - ¡¿Esto te da miedo?! - me empezó a moler a golpes hasta que en un movimiento rápido lo apuñalo con el cuchillo, que era el mariposa, y lo abro, haciéndolo sufrir de la herida, aprovecho y salgo corriendo

Actualmente

Yo sabía que Jeff cierra la puerta con llave, y si tenía la suerte, estaría pegada a la puerta de la entrada, si tenía demasiada suerte para ser específica - ¡¿Un código?! - en efecto, la puerta era estilo candado, constaba de un código, intenté con 0000, 1234, en la desesperación no podía pensar en una buena clave, intenté calmarme para ver cuáles serían los números, hasta que siento que me vuelve a jalar por detrás tumbándome al suelo, me paro con todas mis fuerzas - Por favor no me hagas daño -

- ¿Desde cuando tú me dices qué hacer? - dice con un tono más apagado, sabía que se iba a dormir pronto por los efectos del alcohol, pero igual tuvo las fuerzas suficientes para agarrarme, llevarme a su cuarto y lanzarme a la cama, se puso sobre mi, con sus piernas aplastó las mías, me agarró mis manos con una sola de él, me empezó a quitar el vestido con brusquedad, logró quitármelo sin hacerle una ruptura o algo similar, pero me arrancó las bragas, no llevaba sostén, y me empezó a agarrar fuertemente los senos, gritaba del dolor, luego los glúteos, y en un movimiento rápido... ay... auch... dolía... dolía bastante, introdujo uno de sus senos en mi ano, rápidamente agarró mis piernas levantándolas y empujándolas junto con todo mi cuerpo, sobrepasando el borde de la cama, por lo que me golpeé la cabeza con la pared, se abrió el pantalón, sacó su miembro que ni me dio chance de verlo... no es que quería... estoy especificando, y empezó a abusar sexualmente de mi, dolía que jode, se sentía como una cosa caliente y gigante, rasgando, como si me estuviera lijando, debido a que obviamente estaba seca, tuvo que usar mucha fuerza para entrar, eso me rasgaba por dentro, como si se llevará mi piel a arrastres, era muy doloroso, para los hombres que leen mi historia ¿alguna vez han pasado sus dedos encima de una lija? Tal vez ¿Alguna vez lo han hecho tan duro que sentían que la piel de sus dedos se iba a arrancar? Lo dudo, bueno, imagínense ese sentimiento dentro de su abdomen, en un área de como 10 centímetros de largo y 7 centímetros cuadrados de ancho, así duele, y hasta peor, cuando a una la violan, se empieza a sentir sucia, como una basura, o peor, una futura cuna, que después botarán, que la toquen, es preocupante, que la penetren, es destrozante, de la nada sentía, que lo poco humano que tenía mi cuerpo, que era la virginidad, se me iba, gracias a Dios, que sé que existe, y no es tan cruel, él se duerme en pleno acto ¿cómo? Sinceramente no lo sé, obviamente no me alegré del todo.

Con todos mis esfuerzos logré quitármelo de encima, sentí que estaba sangrando por mis partes, y la sangre recorría mis piernas, intenté ir al baño para limpiarme... pero me desmayé en el camino

¿Saben que es lo más loco de la historia? Los 5 segundos después de despertar de mi desmayo

- Por Dios Jane... ¿Estás bien? -

- Volviste -