Teen Wolf: Nueva Generación

Capitulo 1: Teresa McCall

Esa noche, Teresa, tuvo el mismo sueño:

Se encontraba en una fiesta junto con todos sus amigos. Todo marchaba perfectamente y no había nadie sin una sonrisa en el rostro.

La muchacha se movía por el ritmo de la música. De repente un grito penetro la escena y un segundo después desapareció. Pero nadie pareció notarlo, solo Teresa dejo de bailar y sonreír.

— ¿Qué fue eso Malcolm? —pregunto.

— ¿Qué cosa?

—El grito imbécil —exclamo Teresa y, acto seguido se alejó de la fiesta.

Era una noche calurosa y el cielo estaba despejado.

La fiesta se desarrollaba con un completo desinterés por todo lo demás. La música a todo volumen, la gente saltando de un lado para otro y el alcohol que los jóvenes injerían a pesar de no tener la edad suficiente para hacerlo, daban una atmosfera de diversión y locura.

Teresa permanecía en silencio, en el patio, observando la luna llena sobre el cielo, como la lámpara más brillante y hermosa.

En eso estaba cuando un movimiento violento entre las sombras la sobresalto. Un instante después y sin que lo notara algo enorme se encontraba encima de ella.

Teresa comenzó a gritar y moverse frenéticamente para liberarse, pero la criatura era demasiado fuerte.

Se despertó de un sobresalto; estaba soñando con lo mismo desde hacía dos meses cuando, en esa misma fiesta, la encontraron inconsciente y sin recuerdos de lo sucedido.

Eso no sucedió Teresa—se repetía—son solo sueños.

Pero no importara cuanto intentara convencerse de eso, en sus sueños el monstruo la mordía, pero ella no tenía ninguna cicatriz.

Una vez despierta se dirigió hacia el baño; su cabello era castaño y los ojos eran pequeños y del mismo color. Tenía 15 años.

—Teresa baja a desayunar— grito su padre. Se llamaba Rafael McCall. —tengo algo que decirte.

— ¿Paso algo grave?—pregunto Teresa asustada. Su padre era morocho, alto, con rostro alargado y mirada seria, en eso momento sus ojos estaban húmedos.

—tu medio hermano Scott murió.

Ella apenas había escuchado algo sobre Scott McCall, solo que era mayor que ella, hijo de su padre con su primer esposa. Vivía en Beacon Hills, un pueblo en California en el condado de Beacon.

— ¿Y que con eso?—pregunto Teresa.

—Él era mi hijo, muestra respeto— dijo este—mañana partimos a su funeral en Beacon Hills.