hermano (ls)

Capítulo 14 (I)

Varias semanas después, principios de Diciembre, 2014.

QUINTA GOTA.

Porque este es mi juego, será mejor que hayas venido a jugar. Solía contener mi monstruo interno, ahora lo estoy dejando salir. Hago mi propia elección.

El chico se acomodó la capucha de su chaqueta y entro en el callejón, frotándose las manos a causa del frío.

- ¿Quién eres? -preguntó un muchacho de cabello negro y una sudadera del mismo color-. ¿Cómo conseguiste mi número?

Se quitó la capucha y dejo el paraguas a un lado, sacudiendose las gotas de agua que escurrían de su cabello hasta su mejilla. La sonrisa torcida que formo en su rostro podría considerarse coqueta, si sus ojos no brillaran con tanta maldad.

- ¿No te han dicho que los curiosos pierden la lengua, bebé? -respondió, apoyándose en la pared húmeda del callejón-. Si viniste aquí, es porque la propuesta que te hice te interesó.

El muchacho de cabello negro negó, con las facciones de su rostro cargadas de desconfianza.

-Vine aquí porque me amenazaste -metió las manos en sus bolsillos, como si estuviera tranquilo y dispuesto a aceptar cualquier cosa-. ¿Qué es lo que quieres?

El cielo estaba oscurecido esa mañana, y la lluvia no cedía ni un poco. Alzo su rostro y la luz escasa que iluminaba el cielo permitió que el otro chico en el callejón pudiera percibir mejor su rostro. Él era hermoso, como un ángel; el de cabello negro nunca sospechó que tras el mensaje amenazante, se escondiera un muchacho de su edad, menos que fuera tan bello. Pero en el mundo en el que vive, cualquier cosa puede pasar. Así que si el chico trabajaba para alguien, u obtuvo información de suya por cualquier otro medio, era mejor enterarse de una vez y saber que es lo que quiere.

-Calum Hood -murmuro el chico de rostro hermoso, con voz ronca y fuerte-. Necesito que representes un papel para mi.

Calum frunció los labios y froto su nariz, con repentinas ganas de estornudar. Era alérgico al tipo de perfume que usaba el chico, como a flores.

-El mensaje dice que sabes que es lo único importante que tengo. Puedo saber, ¿A qué te referías con eso?

El chico de rostro hermoso regreso su mirada hacia el frente, ladeando la cabeza con una mueca divertida.

- ¿Estás probándome, Calum? -paso la lengua por sus labios, para luego encogerse de hombros-. Louis Tomlinson, estás enamorado de Louis.

Calum sintió una corriente eléctrica revolverle el interior del estómago.

- ¿Cómo es que...? Eso no es cierto. Yo no siento nada por él.

-No intententes engañarme a mí, bebé -modulo su voz, sonando un poco más suave-. A Louis no le pasara nada... pero quizá a ti si.

Entonces, Calum se sintió fuerte, creyendo que lo estaba intentando amenazar con la vida de Louis.

-No puedes amenazarme con Louis. Él es un asesino, "Piezas sangrientas Tomlinson". No hay forma de que alguien como tu pueda hacerle algo a él, y yo no tengo nada que perder -acomodo su cabello hacia un lado y sonrió-. ¿Es todo? ¿O me hablarás de algún jefe super malo para el que trabajas? ¿De poder o de lo que serías capaz de hacerme si no hago lo que quieres?

El chico hermoso volvió a acomodar su capucha y a recoger su paraguas.

-Esos estúpidos sentimientos que tienes por Louis me hacen enojar, y eso no es algo bueno para ti cariño. ¿Crees que él se fijaría en un puto? ¿No sabes el asco que les tiene a todos los que son como tu?