TENTACIONES

¿Apagón?

Narra Erin.

Un fuerte sonido me hizo incorporarme de un salto. Un flash iluminó por un segundo toda la habitación cegándome y al siguiente momento se escuchó otro gran estruendo. La lluvia golpeaba con gran fuerza en las ventanas y el cielo estaba a punto de ser negro en su totalidad dejando el cuarto iluminado de un color azul fuerte. Otro rayo y un trueno inmediato, una tormenta.

Kyle estaba dormido boca arriba, con las manos en la nuca y sin playera , ¿en qué momento nos habíamos quedado dormidos?

– ¿Erin? – alzó ligeramente un párpado

– ¿en qué momento nos quedamos dormidos? – me puse en pies con un ligero mareo.

– te quedaste dormida casi de inmediato después de nuestra charla. – dijo al mismo momento en el que se incorporaba de la cama, frotándose los brazos. – ¿no ves mi playera?, no recuerdo donde la dejé.

– deja que prenda la luz. – manipulé una y otra vez el interruptor solo para comprobar que no había luz. – al parecer tenemos un apagón. –Eché la cabeza para atrás. – tengo hambre.

– son las 7 de la tarde Erin. – noté como se pasaba las manos por el cabello. – hemos dormido casi todo el día.

– mi madre no debe tardar en llegar Kyle.
– ¿quieres que me vaya?

– no realmente, me da miedo estar sin luz. – dije un poco apenada. –comamos algo.

Escuché la risa de Kyle mientras se acercaba para envolverme con sus brazos descubiertos. Escondí la cara en su pecho inhalando el aroma de su piel.
Y deposité un beso. Un gran estruendo rompió con todo silencio haciendome dar un pequeño salto del susto, Kyle me apretó protectoramente con sus brazos. – yo te voy a cuidar, pero tendrás que aprender a amar esto.

–¿esto? – separé mi cara para intentar mirar hacia arriba la suya.

– sí. – susurró y bajando un poco la cara, sus labios acariciaron los míos. – la oscuridad, las tormentas. Esta clase de desastre.

– Kyle. – cerré los ojos. — somos mejores amigos.

–lo sé. – sus labios se presionaron contra los míos de repente y en poco tiempo bajaban hasta mi clavícula y de vuelta a mis labios, con pasos lentos me hizo andar hasta que mi cuerpo quedó recargado en la pared.

– Kyle... – susurré, sin esperar a que mi voz se escuchase entre todo el escándalo de la tormenta. Mis manos paseaban libremente por su pecho, espalda y brazos mientras él besaba cada vez más abajo de mi cuello.

Sentí sus manos en mi cintura, por dentro de la blusa, me ponía los bellitos en punta sentir el frío en mi estomago descubierto.

– no... – dije un poco más fuerte.

su boca se acercó a mi oreja, mordiendo el lóbulo. – Venga Erin. – murmuró mientras su cuerpo aplastaba al mío. Podía sentir la hebilla de su cinturón enterrándose en mi estómago, un largo suspiro emanó de mis labios cuando sus manos bajaron a mis muslos y me impulsó hacia arriba obligándome a abrazarle con mis piernas el torso. Casi por reflejo mis brazos se ataron a su cuello mientras nuestras bocas jugaban entre sí cada vez más rudo.

– basta... – logré decir entre besos. Negando con la cabeza, Kyle seguía con su tarea de morder el lóbulo de mi oreja para después recorrer con su lengua el camino hasta mis labios.

– Kyle... – gemí en respuesta cuando sus dientes prensaron mi labio inferior.

– por favor. – escuchaba susurrar a Kyle cada que podía. Mi cabeza no lograba darme una sola orden.

Podía  sentir como empezaba a excitarse su cuerpo y aquello me hacía desear más todo lo que me estaba haciendo. Podía sentir la dura pared en mi espalda y su fuere pecho aplastando mis senos. Todo aquello me tenía mal.
Podía ceder, quería hacerlo.

Un fuerte trueno me hizo salir del trance.
Mi madre.
– mi madre... – traté de separarme de un beso en aquel momento.

–¿ella qué? – gruñó Kyle.

Ella... – sus labios besaron mi cuello nuevamente. – ella... – hice hacia atrás lo más que pude mi cabeza para darle mejor acceso. –ella. – jadee. – ella... Ella, ella puede llegar. – abrí por completo los ojos ante aquel recordatorio. – basta Kyle. – retorcí mis piernas  hasta que logré que me bajara. Con un gemido escondió su cara en mi cuello.

–lo siento. – le escuché decir.

acaricié su nuca que estaba un poco húmeda. Un rayo alumbró perfectamente la habitación nuevamente. Haciéndome estremecer.

– deberíamos comer algo. – sugerí aún abrazados contra la pared.

– deja que esto dure un segundo más.

Soy una mala persona T-T perdón. Bien. Siento que la narración está algo pobre, pero estoy algo oxidada jajaja haré lo mejor que pueda en el siguiente capítulo y espero les guste tanto como a mí me está gustando de solo pensarlo.