A Hard Day's Night

Paulie, my dear

Acabó toda la reunión, no me habia podido concentrar ni un poco por pensar en Paul W. Aunque la verdad, era una idea atrayente tener un doble de Macca y sobre todo que eran tán identicos— aunque el no lo aceptara- me preguntaba si acaso tocaba en una banda llamada algo así como "the beetles" que tuviera un John, un George y un Richard..... Eso seria genial! No?

Al poco rato Diane se aparecio con Paul y, ahora que lo observaba bien notaba una pequeñisima diferencia: 1,73 m.

Diane me dice:— ya conocias a mi amiguito?–
–oh, hablas de Paul Morrison, el papanatas que se cree don perfecto—

– cómo que papanatas? Es un amor... Paulie, cariño, ya habias hablado con esta chiquilla?–

Él sonrio dulcemente – claro! Es encantadora y aún más cuando escucho que me trata de papanatas, no es hermoso?– y me guiñó el ojo– Diane, a ella le gustan The Beatles, podriamos hacer una pijamada? Oh y podriamos vestirnos de princesitas! Que te parece, te gusta?

Reia imaginandome a Paul con una coronita en un bosque con flores saltando y bailando.

A Annie le ha encantado tu idea– dijo Diane

Oh, se llama Annie! Creí que se llamaba Silly(tontita)– y echó a reir y a correr.....

—patetico! Así es siempre? Apenas nos conocemos y ya me llama tonta.... Que clase de amigos tienes?–

—disculpa, él es así, espero que lo puedas un poco mas para que te des cuenta de lo grandioso que es.... Ya te has dado cuenta de que se parece  a tu amors( refiriendose a Paul) y además toca en una banda.... No es genial?—

— y cómo se llama su estúpida banda?—

—con el tiempo los conocerás, mientras tanto no te enojes con el chico—

—me llamó tonta por si no lo sabes!
Ademas ya me dio mala espina su banda y sobre todo si todos sus integrantes son como él—

Diane hizo cara de desaprobación y al rato me señaló que mis padres me estaban esperando en la puerta. Me despedí de mi amiga y ella me dio un beso en la mejilla.

— espero volverte a ver Paul Winston Morris.... Ummm aún si eres parecido a mi Paulie y te gusten los Beatles, no te salvarás de mi venganza! Ya verás pendejo, por llamarme tonta.... Ya verás!— pensé para mis adentros y salí de allí.