No otra vez

Ayúdenme... - 7

En ese camión no venía nada mas ni nada menos que el führer y su doctor el ángel de la muerte, no había escapatoria todos aquellos que nos estaban persiguiendo llegaron a la puerta, los soldados de las torres nos apuntaban voltee para ver a lisy se miraba en sus ojos el miedo seguí viendo los guardias intentando encontrar una manera de salir pero todas mis opciones terminaban mal.

Lisy soltó mi mano y vi como lentamente se arrodillaba y ponía las manos detrás de su cabeza.

No lo podía creer lo que estaba haciendo, y sin darme cuenta un guardia me tomó por atras y quede inmovilizada nos llevaron a una prisión lisy y yo quedamos en el mismo bloque, mientras caminabamos vi a muchas personas encerradas después dr mucho caminar llegamos al fin a unos bloques vacíos a lisy y a mi nos encerraron en el mismo, me quedé mirando a la pared pensando en una manera de escapar pero estaba cansada de caminar me recosté, pero al hacerlo me clave algo en mi espalda era un alambre jale de el y vino una idea a mi.

Me levanté y fui directo a la puerta para abrirla trate y trate pero después de mucho intentarlo al fin lo logré el sonido de la puerta al abrirse fue lo más hermoso que había oído en mucho tiempo.

En cuanto abrí la puerta el rostro de lisy se levantó dejando ver sus lágrimas cayendo por sus mejillas y por último caer en la cama le extendí mi mano para que nos fuéramos juntas esas lágrimas cambiaron por una sonrisa.

Caminamos unos cuantos pasos y vi unos guardias necesitaba pensar en como salir, había un hidrante miré a lisy y le dije: que comience lo divertido.