Dark Times - Harry Styles.

Capitulo 6. - Pear bar y rubias.

El dolor de cabeza del sábado es como la medalla del viernes a la noche bien condimentado.

Jake entro a mi habitación a las 12 del mediodía y no pudo esconder su sorpresa al encontrarme ya despierta, sentada en el medio de la cama y usando mi teléfono.

– No sabía que podías funcionar sin mí. –Dijo entrando con su típica cara de felicidad, no entiendo cómo puede parecer tan fresco después de haber tomado casi todas las bebidas de aquella fiesta.

– ¿Vas a hacer algo de comida? Estoy muriendo. –Lo miré con cara de sueño.

– Nope, vamos a almorzar con algunos
amigos en Pear Bar.

Rodé los ojos. – ¿Quiénes son esos amigos?

– Unos chicos, Alison, Casey y Harry. Bufé y volví a tirarme en la cama con mi teléfono en la frente, eso claramente fue un 'si' de parte de Jake porqué salió de mi habitación. No quiero volver a presenciar como Harry, Alison y Casey se comen entre ellos pero no tenía absolutamente nada que comer, soy un desastre cocinando y una hamburguesa no se rechaza, es un pecado. Mi abuela siempre lo dijo.

Me di un baño que hizo que mis músculos se relajaran hundida en la bañera, que por cierto compré hace poco y no puedo despegarme de ella.

Anoche en medio de mi borrachera me hice una promesa que no iba a lidiar más con Harry. Tuve suficiente, en conclusión es un mujeriego. Es extremadamente guapo y es mi vecino, quiero hacerle cosas inapropiadas a su escultural cuerpo, pero hay algo en mi interior que tiene ganas de verlo hoy.

– ¡Date prisa, tengo hambre y nos están esperando pequeña perra! –Jake dijo golpeando la puerta desesperadamente sacándome de mis pensamientos.

– ¡Lárgate! –Conteste con un grito. –Estoy soñando con un cuerpo escultural.

–Basta de Harry –Exclamó y escuché una risita en el pasillo mientras que se alejaba.

Claramente Jake en poco tiempo se volvió muy confiable, además ¡es gay! Mi sueño frustrado siempre fue tener un mejor amigo gay.

Fue en el balcón del edificio donde vivo -yo no tenía idea de que existía-; me contó los problemas que causó su confesión a su familia; a su abuelo lo tuvieron que internar tres días por qué no podía creer, su mamá el mismo día dijo que se estaba viendo con otro hombre, y su abuela de 83 años se emborrachó. Así fue como decidió estar lejos un tiempo de su familia, hasta que su papá vino a vivir con él. Es Chris, el portero de mi departamento.

Cuándo le conté que tengo una hermana gemela literalmente casi se hace pis en sus pantalones después de chillar, saltar, pegarme con unos de los cojines y dijo que tenía que presentarles a sus amigos y eso iba a pasar exactamente, nunca.

(...)

Llegamos al bar, había tanta gente que al entrar una señora me chocó y me tuve que sostener de Jake que buscaba desesperado la mesa donde estaban sus amigos.

Encontramos la mesa y Jake me presentó a Liam y Nate, también estaban Alison, Casey. Agradecí que Harry no estuviese –me hubiese gustado verlo– no, mejor no. Me senté al lado de Nate, que es muy agradable y simpático, se parece mucho a Jake.

– ¿Estudias, trabajas, casada, divorciada? –Dijo burlón.

– Estudio, trabajo y soltera. –Dije guiñándole de forma simpática ya que lo menos que se hacer es guiñar un ojo porqué se cierran los ojos. No se como Harr.. ¡basta!

– Hamburguesa y una cerveza, ¿verdad Oli? –Me preguntó Jake. Asentí y me dediqué a mirar a las personas, este bar es todo menos tranquilo, literalmente matan por una hamburguesa, es por eso que Jake siempre pide la mía porque él atropella a todos para llegar a la barra.

– ¿Estás de vacaciones o algo? -Me preguntó Nate.

– Si, dentro de dos semanas empiezo.-
Cuándo Nate iba a decir algo más la presencia de otra persona lo hizo callar.

– Cerveza y hamburguesas. -Dijo Harry, bajando dos bandejas. Una rubia alta y con un vestido sumamente ajustado estaba parada tras él.

– Al fin, pensé que fuiste a preparar las hamburguesas o algo. –Le dijo Nate en tono de burla, mientras que el ruloso se dedicó a abrir su cerveza y la rubia se sentó pegada a él. Ugh.

Sus ojos se encontraron con los míos y no parecía sorprendido de verme; dudó que me haya visto antes.

– Hey. –Me dijo, levantando levemente la cabeza. Estoy haciendo lo mejor posible para no mostrarle que estoy nerviosa.

– Hola. –Dije y me aplaudí mentalmente por lo tranquila que sonó mi voz. La rubia le estaba hablando y el sonría como un estupido, claro está.
Nate me empezó hablar de cualquier cosa y le agradecí ya que estaba por reventar. ¡Como puede ser tan mujeriego!

– Hamburguesa corazón. -Dijo Jake con una voz cantarina y pasándome la hamburguesa con una cerveza. Pasé rápidamente mi mirada hacia Harry y la rubia se estaban besando como si no existiera mañana.

No me di cuenta que los estaba mirando hasta que sentí como Jake me tiraba una papa desde enfrente y vocalizaba un "para" después un "perra". Lo miré mal y me dispuse a comer de mi hamburguesa y escuchando los malísimos chistes que Nate estaba contando.

Jake me hizo un movimiento de cabeza para que lo acompañé hacia la barra, mientras me paraba con dificultad, Harry paró de besar a la rubia y me estaba mirando, su mirada es penetrante; no le di importancia y me alejé de la mesa.

– Te estoy controlando y no paras de mirar a Harry. –Dijo un Jake serio, agarrándome el brazo para ir hacía un pequeño patio. –Cada vez qué salimos trae a una nueva chica y siempre rubias. -Respiro mirando alrededor. –No te tiene que importar solamente porque bailaron juntos.

Un vacío en mi estómago apareció.
En algún momento el pensamiento de que estaría con él hoy se hizo presente.

Volví a mirar hacia la mesa, Harry y la rubia se estaban riendo.

¡Hola otra vez bunnies!
Dos capítulos en un día, yeeeei, yei, yei, yeeeei. ❤️
No se olviden comentar que les pareció el capítulo y también que piensan de Harry.

*Olivia y Jake en multimedia*

stay smiling.