Capitulo 22:

10.1K 663 41
                                    

El cielo se estaba tornando oscuro, el frío se hizo presente y el miedo apoderándose de mi. Llevaba unas horas sentada en aquella roca y Patrick no me había encontrado aún. Me levanté y decidí salir del bosque que me causaba mala espina. Caminé sin rumbo fijo y llegué a un bar solitario. Tenía que llamar a alguien, ya que mi móvil se le acabó la bateria. Abrí la puerta de aquel bar, y me encontré con varios hombres adentro. Me dirigí a la barra para pedir ayuda, a una mujer de unos cincuenta que atendía. Me senté en un taburete, a lo que la mujer dirigió la vista hacia mi.

-¿Cuántos años tienes?. - preguntó. - Si eres menor de edad, ya puedes irte.

-No, no vengo a beber un trago. - espeté un poco molesta. - Quiero saber si tiene usted un móvil.

-Querida, acá la cobertura es una mierda. - me sorprendí por su palabrota.

-Gracias por la ayuda. - solté con sarcasmo.

Me levanté del taburete, y camine hacia la puerta para salir de aquel bar. Cuando iba a abrir la puerta, me detuvieron con un agarre en mi brazo. Fastidiada, por que pensé que era un borracho, giré mi cabeza con una mirada asesina. Al alzar mi vista, di con un hombre bastante joven, ojos marrones y barba de unos 2 días.

-¿Necesitas ayuda?. - preguntó.

Un poco aturdida, contesté:

-Si, la verdad necesito irme a la residencia de la universidad. - dije un poco nerviosa por su intimidante mirada.

-¿Quieres te lleve?.


-Sería un gesto muy amable. - miré al suelo. - aunque no te conozco.



-Puedes conocerme mientras te llevo a tu casa. - esbozó una sonrisa.


-Está bien, pareces amigable. - sonreí.


-¡Alex, tiene novia!. - gritó un rubio que se veía borracho.


-¡No es mi novia, Charlie! . - gritó el hombre con barba de mi lado. - Será mejor que nos largemos. - se dirigió a mi.


-¿Quién es él?. - señalé al rubio que gritó hace unos minutos.



-Es un amigo. - me ofreció su mano. - Es tarde, vamos.


-¿Te llamas Alex?. - le di mi mano por educación.



-Si, ¿y el tuyo cuál es?. - abrió la puerta para salir.



-Hannah. - salimos del bar y Alex me guío hasta un auto de color rojo, muy lindo.



-Sube. - dijo con ¿dulzura?.

Abrí la puerta del auto y me senté al lado del asiento del conductor. Mis nervios aumentaron, ya que me subí al auto con un completo desconocido. Alex rodeo el auto y se sentó en el asiento del conductor. Mis manos empezaron a sudar, y mi estómago se hizo un manojo de miedo. Alex me sonrió, y prendió el motor. El coche salió del aparcamiento del bar, y se adentró en la carretera. Le indiqué el camino a Alex y él condujo con tranquilidad. Al estacionar el coche en el aparcamiento de la universidad, parte de la tensión en mi cuerpo se esfumó.


-¿Me das tu número?. - preguntó Alex un poco nervioso.


-Claro. - le di mi número. - Muchas gracias por traerme.


-¿Algún día podríamos salir?. - sonrió Alex.



-Mmm. - dudé un poco. - Si, algún día.



-Hasta pronto, Hannah. - dijo Alex.



-Hasta pronto. - le regalé una sonrisa y salí del coche.


Vi el coche de Alex alejarse, y caminé hacia mi cuarto. En el pasillo, me encontré con Ashley, quien me saludó por lo cual la saludé un poco confundida. Abrí la puerta de mi cuarto, que estaba abierta. Prendí la luz y pegué un susto de muerte al ver a Patrick en mi cama.

Quiero Oírte Gemir.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora