Capítulo 12.

92 18 6
                                    

*NARRA BEN*

No puedo creer, estuve años esperando besar a Clara y ahora que tengo la oportunidad pasa esto.
Salimos corriendo hacia el lugar del cual provienen los gritos, la cocina. Thomas se encuentra tirado en el piso y Rosa gritándole "¿Estás loco o qué?" con una cuchilla en su mano.

-¿Me pueden explicar qué diablos pasa aquí?

-Pregúntale a tu amigo - responde la mujer enfandada. Este llora cada vez más fuerte, y al ver que no responde prosigue - Yo estaba aquí haciéndoles la cena - Clara asiente con la cabeza, ¿desde cuándo Rosa hace la cena? - cuando Thomas vino corriendo, me arrebató la cuchilla e intentó clavársela.

-¿Qué? - decimos al unísono - ¡No Thomas! - ambos nos tiramos al suelo a contenerlo, las lágrimas recorren las mejillas de Clara.

-¡No puedo más, quiero morir, yo merecía morir, no ella!

-No no Thomas, nadie merece morir, es esta maldita casa - Clara golpea su puño en el piso.

-Y TODO ES MI CULPA, YO LOS TRAJE AQUÍ, DIOS MIO - el rubio jala sus cabellos desesperado.

-¡Basta Thomas! No es así, y lo sabes. Siempre tuviste las mejores intensiones.

-¡Ustedes porque no la querían a July tanto como yo!

-No digas eso, nosotros la amábamos, era nuestra amiga y este era nuestro grupo de mejores amigos, debemos estar unidos Thomas, te necesitamos, yo sé que todos juntos vamos a poder. Solo promete que no intentarás hacer esto nunca más.

-Ben, quiero ir al cielo, quiero estar con ella, ¿Por qué demonios no me dejan? - tras escuchar esa respuesta comienzo a llorar.

-Thomas, disculpa el atrevimiento, no te conozco casi nada, pero veo en tus ojos el dolor. Te arrepentirás luego de todo esto, el dolor pasará porque nada es para siempre - inquiere Rosa aún en el mismo lugar, parece como con miedo a acercarse - Las heridas se curarán, sólo es cuestión de tiempo. July desearía lo mejor para tí, y quiere que seas feliz.

-Eso, recuerda que, como pudimos corroborar aquí, hay vida después de la muerte y ella murió de forma trágica, así que probablemente esté aquí con nosotros, cuidándonos y ayudándonos a salir de aquí - le recuerda la pelirroja.

-Ella no merece estar aquí, atrapada con esos espíritus, ella merece descansar en paz - sus lágrimas empiezan a aumentar y su respiración es ahora muy agitada.

-Thomas, cuando salgamos de aquí prometo que llamaremos a alguien para limpiar la casa... Me refiero a alguien que la limpie espiritualmente - agrego al ver la confusión en su rostro, él sólo asiente.

-Ahora, ¿prometes no volver a hacer esto?

-Sí Clara - pone los ojos en blanco.

-Te hablo en serio.

-Sí.

-Júralo por July - exijo.

-Lo juro por ella - nuevamente comirnza a llorar. Lo abrazamos más fuerte y le hacemos señas a Rosa para que se una. Esta vez, Thomas nos devuelve el abrazo.

-Bueno, necesitas descansar, pero primero vamos a cenar - rompe el momento la mujer.

-Déjame te ayudo - le digo.

-No no, es especial, la voy a hacer yo - se niega.

-¿Especial? ¿Debemos ponernos ropa especial? - Rosa y Clara se miran en una mirada que no logro entender - ¿Qué? ¿Qué pasa?

-Nada - ríe Clara - Es que yo le he dicho lo mismo - dice con indiferencia, pero con esas miradas veo que le importa bastante.

-Okey... Nosotros nos vamos a ver la tele un rato y tú nos llamas ¿sí?

-De acuerdo, vayan. Pero no miren la mesa.

Nos sentamos los tres en el sofá a mirar una película. Los ojos de Thomas seguían rojos.

-¡Ayyy, Bajo la misma estrella! - chilla de la emoción Clara, es raro que pasen esta película.

-No, tenemos que ver algo para reírnos - le arrebato el control remoto - en especial él, lo necesita.

-Ok...- cede.

Tras fijarme en la lista de programación encuentro "Canta si puedes" y decido ponerlo.

-Sí, amo ese programa - al fin, hay que complacerlo.

-A mi me da un tanto de asco.

-A mi también Clara, pero me gusta ver sus caras cuando les ponen cucarachas encima - ríe.

Después de unos veinte minutos Rosa nos llama a comer. La mesa está decorada con un florero con rosas como centro de mesa.

***

Mientras Rosa lava los platos se detiene mirando un cuchillo.

-Chicos, yo entiendo que prometió no volverlo a hacer pero las personas que intentan suicidarse, tienden a volver a hacerlo, ¿No creen que deberíamos mantenerlo lejos de cualquier elemento que lo lastime?

-¿Y cómo sería eso? - pregunto.

-No sé, poniéndole un candado al cajón de los cuchillos o sacando los espejos y cosas así.

-Yo creo que tiene razón - dice Clara.

Thomas ya estaba durmiendo en su habitación y comenzamos a retirar los espejos, guardamos los cuchillos bajo llave, y escondemos el hacha.
Antes de irnos a la habitación nos despedimos de Rosa. Le dice algo al oído a Clara y esta rió, pero no logro escuchar qué.

Una vez en la habitación me acuesto y me ahogo en un largo suspiro. Clara se acerca y me dice:
- ¿Vamos a terminar lo qué empezamos?.

Me incorporo en la cama y ella se sienta junto a mí, tal como hace unas horas. Mi respiración comienza a acelerarse, no puedo creer estar en esa situación, que tanto esperé, a punto de besarla. Nuestros labios se juntan lentamente en un beso tímido, que luego se convierte en el beso más apasionado que me han dado, tanto así que me cuesta separarme, pero tengo que respirar.

-Ben - dice con una dulce voz mirando mis labios.

-¿Qué? - pregunto mirándola a los ojos.

-Te amo - susurra.

No puedo creer lo que estoy escuchando, y mi expresión lo demuestra.

-Yo mucho más.

Nos besamos nuevamente, mientras nos quitamos la ropa.

Definitivamente esta es la mejor noche de toda la estadía.





Dark Summer Donde viven las historias. Descúbrelo ahora