Capítulo 10

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Jessie

Mirarla dormir aquí y ahora es el más grande placer con el que jamás soñé, sentir su respiración se forma tranquila, mirar los pequeños gestos que hace cuando sueña... me alegran el corazón.

-Jessie es hora de tu.- dice Santana entrando <<sin tocar>> mirándonos a Julls y a mí -¿Qué carajo es esto Jessie?.-Pregunta mientras cierra la puerta detrás suya- Diablos eres, maldición esto se está saliendo de tus manos. Mírate.- Me señala con su dedo perfectamente cuidado, entra a mi baño azotando la puerta, miro a Jull sigue completamente dormida.

-¿Podrías bajar la voz?, Santana sólo esta durmiendo. No es como si la estuviera follando.- Me levanto y voy hacia ella- ¿Qué es lo que quieres? ¿Qué escuche todo esto?- Paso mis manos por mi cabello, no sé como hacer que Santana se calme, no sé como diablos salir de esto.-Escuchó el ruido de cristales rompiéndose, entró y estoy estupefacto. -¿Qué hiciste Sant?- murmuró mirando el resto de mi dosis diaria que alivia el dolor hecho pedazos.

-¿Qué mierda quieres tú Jessie?, hace unos días tuviste UNA maldita crisis, intento hacer que sigas con vida- grita

Miro en dirección a Jull, sigue dormida- Baja la maldita voz- Siseo a punto de estallar -Nunca te pedí nada Sant, nunca lo hice y actuas como si fueras mi madre y demonios no lo eres Santana, porque no sigues con tu agridulce vida y dejas la mía en paz. O mejor aún preocupate por tu hermano, porque él si quien sabe donde esté.

-Eres... cruel.- Susurra llorando.

Puedo manejar la ira<<su ira>> pero no el dolor que veo en sus ojos. Sale corriendo de aquí

-Sant espera.-Corro detrás de ella -Cristo mujer espera- Digo sujetandola del brazo- Sólo calmate, no quise actuar como lo hice hace un momento, ni decir lp que dije - Suspiro- Esto.. esto es mucho y siento que se me sale de las manos.

-¿Es tan difícil lograr que por una vez sigas el maldito protocolo Jessie? - Levanta su cara - ¿Es tan jódido que no lo puedes hacer?- Pregunta limpiando cualquier rostro de debilidad y recreando la armadura de hierro sobre su alma.

La abrazo y por un segundo creí que me alejaría, pero sorpresivamente no lo hace.- Estoy asustada Jessie. Murmura contra mi cuerpo- Tengo tanto miedo de perderte- Y llora, mi chica ruda se permite ser humana por ahora.

Instintivamente muevo mi mano sobre su espalda brindando un poco de consuelo, no admitire que estoy jodidamente asustado. Se que el cáncer avanzó, lo siente mi cuerpo el dolor desde hace varias semanas es más insoportable. Cada noche es un suplicio conciliar el sueño, cada mañana el aliento me falta un poco más, agregando que hematomas adornan parte de mi abdomen y espalda.

-Vamos- tomó su mano -Sé que tienes más Tylenol en tu habitación, no creo que sólo porque si has tirado lo que tenía en el baño. Además, sé que disfrutas el picarme, nena... _Me burlo, mientras camino a su lado.

-¿Qué te hace pensar que lo tengo?- Dice levantando una ceja. -Revisaste mis cosas!- Grita empujandome con su mano

-Digamos que era una inspección con un buen fin, sE que no permitirias dejarme con el dolor.- Caminamos juntos aún tomados de la mano, no pienso decirle que todo esta bien porque tal vez ya no pueda compartir momentos como este <<sin gritos ni peleas>> con ella.

-Quizá sea justo que merezcas un poco de dolor.-Dice cerrando la puerta en mi cara.

Dulce Jesús

Tal vez si, pero no lo admitiré, eso jamás.

***

Jull

Despierto de la que fue a mejor siesta que he tenido en un largo tiempo, busco a Jessie pero el parecer se fue. Suspiro contra la almohada <<debería conseguir una cama así>> me levanto de golpe al parecer Jessie en algún momento quito mis botas, claro debí suponer que lo haría.

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