CAPÍTULO 1

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-¡ Aby, despierta de una vez pequeña dormilona!-

La "adorable" vocesita de Megan, me arrastró desde mi plácido sueño, hasta la realidad... Oigan, un minuto.

-¡Megan,¿Qué haces a esta hora de la mañana en mi habitación!?

-Pues.. Yo, siento tu mejor amiga debería de tener el derecho al acceso ilimitado a tu habitación las 24hs del día.. O no?-,

No contesto nada, sino que mi cara se encuentra inexpresiva. Como para darle a entender que aunque aún este semi-dormida, no soy estúpida. De modo que quiero saber que pasa.

-Está bien, está bien. Vine aquí porque necesitaba tu ayuda..-

Su voz sonó tan angustiada que me siento en la cama y levanto la cabeza para así poder mirarla a los ojos.

-Sabes, hoy harán 40 grados de temperatura, y el traje de baño que tengo... ¡Hace que me vea gorda!-

Me quedó mirando a la muy idiota por algunos segundos, todavía procesando lo que está diciéndome.

-Haber, haber si entendí. Gracias a la ayuda de Dios todopoderoso, te levantas temprano , y se te ocurre ponerte tu traje de baño, y de repente por esas casualidades de la vida, tu opinión es que te ves gordas. Vienés hasta aquí, a las.. - me giro a ver el reloj que está sobre la mesita de noche- 10:30 de la mañana, decides venir a despertar a tu supuesta mejor amiga de sus sueños más profundos. ¿¡Y TODO PARA CONTARME ESA ESTÚPIDA HISTORIA!?-

Megan se me queda mirando..

- ¿Estas loca? Vine hasta aquí para que me acompañaras hasta el Centro Comercial, y tal vez nos compremos unos de esos lindos y sensuales bikinis.. Y quizá, luego podríamos ir a la playa y..-

-Wowowo- La interrumpí antes de que ya no pudiera controlar mis manos, y le diera un golpe en el labio- me perdiste cuando dijiste "compremos unos lindos y sensuales bikinis", es decir, la expresión 'compremos" me suena a manada-

  Megan soltó una risita estrepitosa - ¿Y entonces que planeas? ¿Llevar esa condenada blusa turquesa que usas para nadar?-

-Ehh.. Pues sí. NUNCA, JAMÁS DE LOS JAMASES, NEVER, NUNCA, NUNCA verás a Aby O'donell comprando un "lindo y sensual bikini"-

(...)

-Tenemos estampados animal print de tigre, de cebra, o de leopardo en ese conjunto  por si le interesa señorita - Dijo la exasperante voz de la vendedora de la tienda de lencería.

- Vamos Aby, deja que te vea ¿si?- Exclamó Megan desde el otro lado de la cortina.

-Nunca vas a verme con estos trapos. ¡Eres una zorra por quitarme mi ropa Megan!-

-En algún momento tendrás que salir, no puedes estar ahí toda tu vida..-

Aunque no quisiera aceptarlo, la estúpida tenía razón. Y Megan, era casi tan terca como yo, por lo cual no cedería está vez. Murmuré algunas groserías que ella no alcanzó a oír, y me heché un largo, e intenso suspiro.

-Aaw! ¡Pero si estás hermosisisima! - El chillido de Megan casi me deja sorda. - Tienes que comprarlo-

-No, no me convence, me siento muy... Destapada, muy expuesta, me siento casi desnuda.. -Hice una pausa y bajé la mirada al suelo - Prefiero mi sudadera turquesa. -

Megan cerró los ojos con fuerza, y yo creó que se estaba conteniendo para no golpearme.

-Lo dejaré bien claro, no nos iremos de esta tienda hasta que hallas elegido un maldito traje de baño. - Noté que sus rasgos se suavizaron, ella estaba a punto de darme uno de sus sermones.. -Nena, Tienes 16 años, ya no puedes usar la misma sudadera que usas desde los 13. Debes conocer chicos, besarlos y que tengan una hermosa historia de amor de verano. Que pasen los días juntos y...-

-Sep, acabó de confirmar que ando de amiga con una maniática -

-¡Abigail, estoy hablando en serio!- Ella posicionó los puños en su cintura - Dime, ¿Qué chico va a mirarte si andas en esas fachas? Acaso no quieres conocer a algún chico lindo que sea tierno, amable, gentil..-

La verdad es que dejé de poner atención al sermón que estaba dándome Megan, y comencé a deambular con la vista por toda la tienda. Nada llamativo, sólo corpiños, tangas y ropa de cama..

Pero de pronto, la pequeña campanilla ubicada en la puerta suena, indicando que alguien está entrando. Esto hace que mis ojos vayan directo a la puerta. Es un chico. Okay, no puedo negarlo, es muy lindo. Es decir, es atractivo, tiene el pelo castaño obscuro, y desordenado. Unos brazos fuertes, que quedan al descubierto ya que lleva una remera sin mangas color verde, lo que hace que resalte su tono de piel bronceado.

Está acompañado por una mujer de unos treinta y tantos, que luego de examinar un poco más, me doy cuenta que es su madre.

La mujer se acerca a la caja y le pregunta algo a la vendedora. El chico tiene un semblante serio en su rostro, y al igual que yo, parece aburrido, y comienza a deambular con la mirada por toda la tienda. De pronto, me mira, y sus ojos se fijan en mí, y..  ¡Oh, por Dios! ¡deja de mirarlo maldita estúpida!
-Así que no nos iremos hasta que elijas uno de estos bikinis - Oh cierto, Megan estaba hablándome
Bajo la cabeza y me doy cuenta de que sólo tengo puesto ese estúpido traje de baño, y al subir de nuevo la vista, ese chico está mirándome con cara pervertida, y no puedo evitar que la sangre comience a acumularse en mis mejillas.

-Okay, devuelveme mi ropa y juro por lo que quieras que compraré algo de aquí..-

Veo que Megan me mira con cara de confusión y duda.

-Confía en mi- Le digo con cara de perrito mojado.
Ella me lanza una mirada asesina, y me extiende la ropa. La tomó sin basilar, y me meto de una al probador.

No puedo parar de pensar en que estará pasando afuera, y si ese chico  seguirá ahí. Sólo pensar en como me vió hace que mis mejillas vuelvan a ruborizarse.

De repente, ante todo el ruido que hay afuera, oigo a Megan decir un "hola" bastante coqueto... Esperen un segundo.. Si ahí afuera hay un chico lindo, y también está Megan, la "caza-hombres", lo más probable es que...

¡¿Megan está hablando con él!?

Y Entonces Me Enamoré De Ese ImbecilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora