Lysandro
"¿Tú a quien crees que le pertenecerá? ¡Yo digo que a una persona que está muy sola!"
Esas palabras habían rondado en mi cabeza por horas. Sí, sé que soy olvidadizo, pero... Esas palabras que dijo el moreno se me han quedado grabadas.
Yo, ¿Una persona sola? Bueno, digamos que no soy muy de socializar.Pero tengo a Castiel, Rosalya y Sucrette... Por su puesto, a mi hermano. Pero además de ellos, y mis padres (Oh , y los conejos), no hay mucho más, siempre me han visto como "el raro" de la clase, cosa que no me molesta mucho.
De alguna forma, todos somos raros en este mundo.Pero, algo me dice que no siempre ha sido así.
Flashback
Hace unos ocho o nueve años, Lysandro no era parte del instituto Sweet Amoris, él vivía en el campo, con sus padres y su hermano, iba a una escuela cercana a su casa, no muy grande, pero era lo que se podía obtener. No tenían mucho dinero en ese tiempo, los cultivos del campo eran escasos y las vacas daban poca leche.
Su padre obtuvo un trabajo mal pagado en la ciudad, mientras su madre se dedicaba a cuidarlos a él y a Leigh.En la escuela, Lysandro era muy callado, claro, eso no sería raro en él ahora, pero antes hablaba incluso menos, por lo que en realidad, no tenía amigos, a diferencia de Leigh, quien parecía realmente popular.
Un día, estaba en clases, tenía una libreta como ahora, pero diferente, en ella no sólo escribía poemas y canciones, si no que, más que nada le servía de diario de vida. Estuvo gran parte de la clase escribiendo, se sentía algo mal ya que hace poco uno de los conejos de la granja había muerto.
El profesor le llamó la atención, y le quitó la libreta. A Lys no le quedó más remedio que prestar atención, tendría que esperar para recuperar la libreta, hasta que acabasen las clases.
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No te lleves el control (Lysandro X Armin)
FanfictionLa llegada de los gemelos Armin y Alexy marcó un antes y un después para los alumnos del Instituto Sweet Amoris. Pero sobretodo para Lysandro, el poeta que siempre pierde su libreta, resultó ser un evento que cambió algo en su vida. El cielo era má...