Estacionó frente a mi domicilio y junté mis pertenencias. No me impresionó que mi teléfono móvil no estuviese.
- Mierda.
- ¿Qué sucede? - Preguntó riendo.
- Siempre pierdo mi móvil - Dije.
Abrí la puerta del coche, salí y me agaché a su lado para buscar lo perdido.
Me volví a parar.
- ¿Podrías llamarme?
Su cara, extrañamente, se transformó.
Fruncí mi ceño.
- ¿Algún problema?
- No... No...Dame un momento - Dijo y asentí confundida.
Tomó su celular y volví a ponerme en cuclillas para mirar debajo del asiento.
No se oyó ningún ruido pero sí se encendió una luz. Lo tomé y acto seguido miré la pantalla.
"James llamando"
Cuando elevé mi mirada a Densel, la llamada ya se había cortado.
Lo miré por unos segundos con mi vista fija, mi ceño levemente fruncido y mi celular en mano.
- ¿Qué sucede? - Preguntó confundido.
- ¿Me has llamado?
Negó rápidamente con la cabeza.
- Todavía no.
- Pero...
- ¿Algún problema? - Me interrumpió.
- Es que... Olvídalo - Dije sacudiendo mi cabeza para eliminar mis pensamientos.
Al abrir la puerta de mi casa, choqué con tres policías que salían de ella.
- Oh, lo siento - Dije haciéndome a un lado.
Al verme sonrieron y saludaron amablemente.
Los seguí con la vista hasta que desaparecieron por el final de la calle.
Entré a mi hogar y encontré a mi padre cerrando la puerta de su estudio.
- ¿Qué fue eso? - Pregunté haciendo referencia a los profesionales.
Negó con la cabeza y siguió su camino. Lo seguí.
- ¿Sólo unos policías de visita, eh? - Alcé mis cejas para destacar la ironía de mi pregunta.
- Brooklyn... - Advirtió sin darse la vuelta ni detener su caminata.
- Debería saber si tenemos algún problema ¿No crees? - Seguí persiguiéndolo - Por lo que sé, soy tu hija.
Se sentó en el sofá del living y tocó el timbre correspondiente a la empleada.
Me senté en el de enfrente y lo miré en espera de una respuesta.
A los segundos, Greca se acercó.
- Un té helado - Dijo manteniendo sus ojos en el periódico que había cogido.
Asintió y luego me miró.
- Estoy bien Greca, gracias.
- Enseguida - Dijo y desapareció.
- Padre están listos...
- ¡Vinieron por el caso de tu hermano, Brooklyn! - Gritó cerrando bruscamente los papeles en mano.
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Crossed.
Random"Hay momentos en la vida en el que dos caminos se cruzan... por casualidad. Por una fracción de segundo, dos universos convergen en un mismo plano y logran vencer las arenas del tiempo."