Prólogo

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¿Sabéis eso que dicen de que antes de morir toda tu vida pasa ante tus ojos?
Pues es cierto.
Sé que estoy aquí abajo y que no me da tiempo a subir. Vienen ya, los mutos están cada vez más cerca.
El Sinsajo ya está a salvo de los mutos, supongo que la misión ha sido un éxito. "No me voy a rendir", pienso. Entonces cojo el último rayo de esperanza que me queda y me levanto. Corro hacia la escalera. Casi llego a tocarla. Katniss me mira expectante. Solo necesito llegar a esa escalera y ya no quiero salvarme solo por mí.
En ese momento toco la varilla metálica y me agarro a ella. Subo un pie e intento subir el resto del cuerpo. Demasiado tarde. Oigo a los mutos debajo de mí. Noto una punzada de dolor agudo e insoportable y, al instante, una fuerza me tira hacia abajo.
Más dolor. Creo que estoy gritando, aunque no estoy seguro. Hay un momento en el que ya no siento el dolor pero sigo viendo a los mutos, a la escalera y a Katniss horrorizada. Ella saca el holo que le dio Boggs.
En ese momento, me vienen a la mente muchos recuerdos, quizá demasiados. Todos a la vez y me parece imposible entenderlos. Mi mente se deja llevar, abrumada por el exceso de información, y viaja hasta una época, hace 15 años.
Sé que sigo en la alcantarilla, pero prefiero recordar en estos últimos momentos. Y eso hago. En medio de este caos, simplemente pienso.

Soy Finnick OdairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora