Entre a clase como de costumbre. Todos conversando, gritando y haciéndome caso omiso. Me fui al penúltimo asiento, deje mis cosas y fui a mirar por la ventana. Veía hacia abajo, se podían ver muchos jóvenes socializando, unos en el césped, otro alrededor de la pileta. Empecé a querer mucho mi puesto, pues estaba cerca a la ventana, la cual me acercaba al mundo exterior, apenas terminaba una clase o en recesos corría a ella, me hacía sentir mejor.
Ya había pasado, 5 minutos y el maestro no llegaba. Miraba por la ventana como dos chicas correteaban a un chico; en otro lugar una pareja de novios; chicos conversando, etc. ¿Podía ser normal yo también? – Me preguntaba y sonría, mirándolos muy animadamente desde mi mundo, desde la burbuja que había creado en estos últimos años.- De pronto una voz interrumpió mis pensamientos.
-¿Que es tan divertido? ¿Puedo verlo yo también? .- Era una voz tan suave. Voltee y era un chico, quizá el más lindo que había visto en mi vida. Podía sentir como destellaba luz de su interior. – ¿Disculpa, hay alguien ahí? Toc toc- Interrumpió de nuevo mi mundo. Esta vez sonriendo.
-Ehhh. Nnnada. Mmmirabba la vventannna.- Dije muy nerviosa. Me hice un lado, para que pudiera ver. Seguramente debo verme con una tonta pues no podía ni hablar y menos al verlo.
-Déjame veeeer. ¡Ooooh! Puedo ver a Hyuk. Jajajajajajaja. Y allá esta Hani, junto con Taeyon, años que no las veía. ¡Wow! Muy buena vista, desde ahora será mi ventanal. Sabes escoger buenos lugares.- Decía muy animado y sonriente.
Yo me preguntaba una y otra vez si me hablaba a mí. ¡No esperen! Hay alguien atrás de mi, regrese a ver hacia atrás varias veces y nada. Creo que si me hablaba a mí. ¿A mí?. Tranquilízate, me dije a mi misma. Debes decir algo interesante me dije a mi misma. De pronto el maestro ingreso, saludo a todos. Fui rápidamente a mi asiento y observé como él se situaba cerca de mi asiento justo al lado derecho. Me soltó una sonrisa y miró a la pizarra.
¿Quién era él? ¿Acaso lo había visto antes? No creo, seguramente me acordaría de su cara. Él es nuevo. ¿Pero, que hace un alumno nuevo, ya casi a un mes de clases?
!Basta!- interrumpí a mí misma. Seguía haciéndome una novela. De seguro, iba a irse al grupo de los populares y no me dirigiría la palabra nunca más, o mejor aún, estaría persiguiendo a la bonita del curso. Después de todo, los hombres son así y él siendo tan perfecto, encajará muy bien con ellos- Pensé.
Pasó el tiempo y para entonces ya estaba calmada. Las clases de Física terminaron, continuaba Química, de nuevo el receso de casi 10 minutos, corrí a la ventana de nuevo, olvidándome del "desde ahora será mi ventanal". Volvía a entrar en mi mundo. De nuevo fui interrumpida.
Tienes un lapicero que me prestes Mmmm... Pensé que lo había guardado en la mañana, pero no está. – Dijo el hermoso joven
Ccclaro- Dije, desviando la mirada. Me dirigí a buscarlo. No sé qué pensaba, pues le había dado unas tijeras.
¿Eh? Me halaga que quieras prestarme tus tijeras, pero no creo poder escribir con ellas – Sonreía tiernamente.
Lo sssienttto- Empecé a buscar en mi maleta de nuevo, ahora más nerviosa que antes. No lo encontraba.
Tal vez no estará en esta cartera- Dijo, refiriéndose a la cartuchera de mi escritorio.
Lo ssientto. Aquí lo tienes- Mientras hice una reverencia en señal de disculpa.
Gracias, te lo devuelvo a la salida. ¿vale?- Brindando una cálida sonrisa.
Volví a inclinar mi cabeza. Para ese tiempo el maestro ingreso. Todos regresaron a sus puestos y la clase comenzó. Pensaba: soy una tonta, pude seguir conversando, ser amable, pero lo único que hacía era mover la cabeza.
Las clases se terminaron, y como era mi costumbre me preparé 5 minutos antes de que el maestro finalizara, de este modo solo guardaría mis cosas y saldría corriendo, con la esperanza de encontrar a Krystal. Así lo hice.
No pude ver a Krystal, para variar.
El joven que ví en la mañana seguramente sería algo esporádico.- Eso pensé.
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Empezamos con el hermoso Leetuk ;) Mi tercer oppa <3
Elizabeth <3
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Te estuve esperando
FanfictionLyn, una chica normal, es arruinada tras la ruptura de su noviazgo casi tres años. Luego de dos años, es una persona totalmente opuesta a quien fue en el pasado, llena de inseguridades, complejos, baja autoestima y digamos "un peso extra". ¿Podrá a...