Capítulo 22 - Vuelo

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El bendito juego ha acabado.

El ganador de la cuarta K no es más Donghae. Menuda suerte que se carga. Dudo que después de ese trago siga consiente.

Bebemos regularmente, ya no hay juegos ni nada.

En poco voy hacia el tocador. La fila del baño de mujeres está algo larga. Me fastidia esperar. Intento regresarme a la mesa pero Hyuna me atrapa.

-Par de idiotas.- Hyuna ya está más que borracha, me sorprende que esté en pie y aún más yo, después de beber igual que ella y encima que Sully.- Desaparezcan par de babosos.

-Hyuna vamos a casa, no estas nada bien.- Ella se resiste.

-Me malgasto con ustedes. Es más que venga un rayo y los parta... Hasta aquí mi ayuda, ¡Oíste! ¡Hasta aquí!.- Está haciendo una escena, cualquier persona pensaría que la engañé o algo así.

-Cálmate y vamos.- Eunhyuk viene con el amigo sobrio de Hyuna.

-Lo mejor será llevarla a casa.- Dice Eunhyuk.

-Mira Lyn. ¡La última vez!, pude celebrar de otra forma y estoy aquí amargándome con su lentitud.

-Si Hyuna, ahora vamos.- Ella gira y estrella su frente contra la mía. Seguro ya no tiene sentido de profundidad.

-Lo perderás. Si te queda algo de cerebro ve y dile algo.- Definitivamente tenía que lanzarle loas a Hyuna, su insistencia era demasiada. Intento fingir que sus palabras no me han afectado o tan siquiera las había escuchado.

-Llévatela.

-Lyn en la mesa dejo tu cartera. Creo que no podré llevarte a casa. Por favor toma un taxi con Donghae y Sully. Hyuna vive sola y temo que se bote por la ventana. De paso aprovecho y dejo a esos borrachos.- Señalo al par de bultos ebrios amigos de Hyuna.

-No te preocupes. Eso haré.

-Con tanto ajetreo el baño ya estaba desocupado.

Ingreso al baño. Algo no esta bien.

Miro a un tipo levantarse el zipper de la bragueta. Doy la vuelta de un brinco, intento encontrar la puerta, pero choco contra la pared.

-Te has perdido hermosa.- Gira de mí hasta quedar frente a él. Me duele la frente.

-L-Lo lamento. Me equivoqué... Prometo no haber visto nada.- Intento huir del lugar pero su mano me lo impide.

-No me molesta que no hayas visto nada. Si no viste nada eso se soluciona.- Me lleva del brazo hasta el baño de la esquina.

-¡Suéltame!

-No hermosa.... No huyas, esto seguro te gustara.

-No quiero suéltame.- No me escucha, intento golpearlo pero no se inmuta. Grito tratando de buscar auxilio.- ¡Donghae!

Donghae aparece frente a mis ojos. Lloró de la emoción y me lanzo a sus brazos, hundiendo mi rostro en su pecho.

Salimos del lugar. No sabía que Donghae tenía esas dotes en artes marciales. Él hombre ha quedado en el piso fuera de combate. Agradezco que nadie nos haya visto, seguro se armaría un despelote.

Cuando imaginé que Donghae no podía enojarse. Ahí esta desmintiéndome, veía su rostro enrojecido del coraje, sus manos hechos puños aún. Lo admito tenía miedo. Hasta las ganas de ir al baño y la borrachera sentía que se me había pasado del susto.

-No estoy molesto contigo.- Me miro.- Estoy molesto por no haberlo matado.

-No me hizo nada. Estoy bien.- Lo abracé lo más fuerte que pude. Su cuerpo estaba tenso.- Te prometo que estoy bien.- Sentía que eso funcionaba, pues sus manos ya estaban abrazándome con fuerza, mientras su rostro se apoyaba en mi hombro.

Te estuve esperandoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora