Te estuve esperando

Capítulo 32

Donghae se levanta de la cama, lleva puesto un calentador gris y una camiseta blanca. Me quita de las manos ese empaque. Suspira sonoramente, lo veo alejarse hacia la ventana y lanzarlo lejos. Ahora viene hacia la esquina donde me he refugiado.

-Gritar no servirá de nada, sabes cómo es Hyuna y dudo que te haga caso alguno... Mejor descansemos. Tú en la mitad de allí y yo en la de acá.- Señala la cama.

-Yo-yo-yo.. no-no quiero.

-Entonces dormiré en el piso.- Se mueve con una almohada hacia el piso.

-No hagas eso. Puedes enfermar por el frío.- Me acerco temblorosa hacia ventana.

-¿Estas segura?.- Asiento con la cabeza.- Lyn yo jamás haría algo que no quisieras tú. A lo que me refiero que no hay lugar más seguro en esta casa que junto a mí.

-Gracias. No me malentiendas, confió en ti. P-Pero jamás he dormido con nadie.- Lo veo sonrojarse.- A lo que me refiero es que no acostumbro a meter hombres a mi cama.... Ay no!.. Es decir, no duermo con nadie, ni mi hermano Ryeowook.

-Jajajajaja, no te pregunto nada. Ya tranquila.- Se acerca a mí y abro la ventana, me pregunto ¿Qué tan seguro será lanzarme desde aquí?

-La estoy fregando. Mejor me cierro la boca.- Miro a lo lejos pero no hay nada, es el quinto piso, ¿Qué estaba buscando?....- ¡Donghae por favor no hagas nada!, no me responsabilizo si de los nervios te-te- te boto por la v-ventana.

-Jajajajaja Vamos a dormir. Prometo ni moverme, no quiero volar por esa ventana.- No entiendo cómo puede tan sereno con esto, yo estoy que ya me orino de los nervios, por cierto, no hay baño aquí.

Hyuna sufrirás un horrible tormento.

Nos acomodamos como podemos, me voy al extremo de la cama. Estoy temblando y no es del frío. En la habitación no se escucha nada, más que la algarabía tradicional de la ciudad, acompañada tal vez unos perros ladrar.

Ha pasado ya el tiempo, las dos de la mañana, lo veo en mi celular. Donghae duerme plácidamente. Me levanto de la cama de puntitas, no quiero despertarlo. Me asomo a la ventana, es una hermosa madrugada, adornada por las estrellas.

-¿no puedes dormir?.- Es Donghae, al parecer tampoco ha dormido.

-No... Donghae enserio lo siento, yo no planee esto, la verdad es que si quise esta reunión pero jamás que terminase así. Ahora estamos incomodos por mi culpa.

-Shhhhh. Todo está bien. Te he dicho que no me molesta, al contrario estoy feliz.- Donghae se levanta de la cama y se acerca a mí.

-Al menos tú lo estas.

-¿tú no?

-¿Eh?... B-Bueno me alegra tenerte cerca.

-A-A mí también.... Lyn, ya que no podemos dormir, ¿podríamos terminar con algo que dejamos pendiente? .- Mi corazón salta de la impresión.

-Claro.- El momento que estuve esperando toda la semana. Ya se había tardado este.

-Aquella vez Henry olvidó su dinero, eso me provocó cierto malestar.

-Lo recuerdo saliste corriendo y luego.... Jejejeje nada. Creo que lo olvidé.- Se acerca un poco. Yo estoy apoyada en la ventana. Todo está oscuro y aun así veo el brillo de sus ojos.

-Creo que deberías abrir la ventana.

-¿Eh?

-Prometí no moverme pero ya no puedo soportarlo más.