Te estuve esperando

Capítulo 17

He intentado ayudar a Donghae de nuevo con su amiga Yoona, ahora ya la conozco y lejos de ser una linda chica parece ser una buena persona . No he tenido éxito alguno. Donghae ha insistido en detenerme con esto, dice que él podrá solucionarlo solo

He decidido no insistir, al menos eso le he dicho, lo digo porque tengo una buena amiga que puede ayudarme.

Le he tomado demasiado cariño a Donghae, se convirtió en un buen amigo, luego que Eunhyuk y Sully se alejen debido a su actual relación. No digo que haya buscado un reemplazo pero en realidad estar con él es agradable, aunque sus descuidos me enojan a veces, creo que jamás encontraré alguien como él.

Ya falta poco para terminar este semestre, lejos de estar molesta con las miles tareas estoy feliz, pues sé que falta menos de dos meses para verlo. 

Pronto veré a mi ángel de nuevo, todas mis energías y pensamientos se centran en él, en su regreso, tanto que temo descuidar mis materias.

Hoy nos toca programación "mi materia favorita". Ya es hora de salir, pero como siempre nos debemos quedar con Donghae apagando las computadoras y arreglando todo. Esta vez es algo más tarde de lo usual, así que luego de tranquilizar a mis padres nos dirigimos a casa.

En el camino hablamos de todo, música, política, familia, consejos, etc. Las conversaciones con Donghae suelen ser tan fluidas. Estoy segura que se ha convertido en mi mejor amigo. Jamás había entablado una amistad así con nadie, pues aunque quisiera negarlo, mi amistad con Leeteuk era algo distinta, era más una cuestión de superar miedos, ya saben lo que llaman mejorar tu autoestima.

Caminamos, la noche, la luna y las luces de la ciudad se ven impresionantes desde el mirador, recordar que alguna vez tuve deseos de aventarme desde allí generan un terrible cargo de conciencia en mi interior.

Nos detenemos a observar, nuestro tema de conversación actual es simple: anime.

-Enserio Naruto es él mejor anime de los tiempos.-Dice Donghae.

-Yo no digo que no sea bueno, lo es, pero prefiero ver One Piece, tiene mayor comedia y un formato diferente.-Refuto.

-No es tan bueno. Naruto tiene mejor trama.

-Claro que no. One Piece es menos dramático.

-¡Qué no!... Otra pregunta, ¿quién es mejor, Batman o Superman?

-Pues Batman. Es obvio.

-¡No!.... ¡Qué gustos tienes Lyn! Superman es mejor, puede dar varias vueltas al mundo en menos de una hora, súper fuerza, ¡es un hombre de acero!

-Claro. Pero ya nació con eso, poderes incluídos. Batman se esforzó.

-Sin su riqueza no sería nada.

-Si lo sería.- Esa costumbre suya de llevarme la contraria.

-No.

-Sí... ¡aish!... No se puede discutir contigo.- Empiezo a caminar intentando lucir molesta.

-Vamos Lyn. No te molestes por una tontería.- Donghae me perseguía. Reía en mi interior.

-Aish.- Lo volteo a ver y camino, fingiendo estar molesta. Me agrada esta situación. Después de un rato decido terminar con esto y conversamos. 

Hace más frío y Donghae lo nota, así que pasa su brazo atrás de mi cuello. No siento nada extraño, es normal ver eso entre dos amigos. Aunque preferiría que me cediera su chompa, eso creo que sí sería extraño.

Nuestro camino sigue. Dejamos atrás el mirador.

No recuerdo muy bien de que hablamos, pero entre los pequeños arbustos observo algo moverse, al poco tiempo sale. Se trata de una rata muy grande, tengo demasiado miedo, no, no es sólo eso es mi fobia.

Hace varios años, cuando era una niña que recién aprendía a leer, leía un artículo en el periódico, el encabezado: Ratas se comen a una anciana. Horrible lectura que escogí, pésima elección. Mi madre se molestó mucho, recuerdo que se enojo con mi padre por traer ese tipo de periódicos. Luego visité a mis primos, quienes veían una película, era Ratas, mi miedo continuaba subiendo, después de un tiempo uno de mis primos soltó un pequeño ratón blanco en mi cuarto, con el fin de molestarme. Yo luchaba por salir de allí, gritaba mucho. Fueron varias horas de desesperación. Cuando llego mi madre, me había desmayado, estaba tan fría y pálida. Mi fobia había empezado. Ahora, cada que los veo no puedo hacer más que llorar y quedarme helada, antes era peor, entraba a un grado de desesperación en el que buscaba lastimarme con mis manos, rasguñarme de preferencia, no faltaba la situación en la que me desmayaba. Mi madre trato de ayudarme con una psicóloga, pero no ayudo mucho.

Era tan grande. Mi respiración era anormal, comencé a llorar. Apenas podía tartamudear.

-¡Lyn!, ¡Lyn!... ¿qué pasa?.- puedo ver a Donghae levantarme. Mis piernas están débiles que no me dejan levantarme.

-Una rata.-Lo digo con extrema dificultad, casi sin aire.

-¡Mierda! ¡Qué susto!..- Me lleva a un lado de la vía. Si eso me pasaba sola no sé como me habría levantado. Era años que no veía alguna. Vuelvo a caer de rodillas. 

Donghae se saca su abrigo y me lo pone. Yo sigo llorando. Él acaricia mi cabeza y sopla con su cálido aliento mis manos,  mientras se inclina junto a mí.

-Shhhhh. Todo está bien. Me logro incorporar de pie, aún siento miedo. Donghae me abraza con una mano por la espalda.

El viento sopla y los arbustos se mueven. Salto de la impresión, quiero ir lejos, no lo hago porque Donghae me retiene con fuerza.

-Tranquila ya se fue muy lejos. Es el viento.- Sigo temblando. De nuevo el maldito arbusto. Salto y abrazo con todas mis fuerzas a Donghae, mi rostro está hundido en su cuello. A los pocos segundos sus brazos también me abrazan, mientras susurra palabras que no alcanzo a describir cerca de mi oído.

No estoy del tiempo que ha transcurrido, continuo abrazada de él. Ahora que estoy un poco más consiente, así que quiero separarme, pero él me lo impide.

-No te asustarás de nuevo. Empieza a caminar mientras estamos abrazados.

-Donghae voy a caer si seguimos caminando así.- Susurro. Siento su cuello húmedo, son mis lágrimas. Su espalda fría, debido a la chompa que me ha prestado.

-Entonces así....-Me gira, ahora veo al frente, con un brazo me abraza arriba de mi ombligo, mientras su mano libre cubre mis ojos. Su aliento cálido golpea mi cuello.

-Dongh...

-Shhhh... te estoy protegiendo. Nada te hará daño porque te tengo junto a mí y no serás capaz de ver nada porque ahora yo decido que verás.- Respiro, liberándome un poco del miedo que me llenaba.

Por extrañas que parecieran estas palabras me sentía tranquila. Ninguna de las horas de terapia con la psicóloga, ni los consuelos de mi madre, mucho menos los regaños de mi padre, me hicieron sentir tan bien como ahora, tan segura.

Deseo que siempre Donghae esté ahí para cuidarme. 

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Lamento mucho la demora en esta actualización, como les había contado andaba algo ocupada esta semana. Espero poder actualizar de forma más regular las siguientes semanas.

Les entrego 3 caps esta semana. Mil gracias por sus valiosas lecturas. 

Elizabeth Donghae (n.n)//