Vida Pasada

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Era una mañana tranquila, el sol brillaba, las sirenas nadaban, las hadas volaban y... el cazador arruinaba toda esa tranquilidad con un solo disparo de su escopeta. Mientras jugaba con su escopeta caminaba por el bosque lleno de criaturas mágicas, eran criaturas con poderes impresionantes que podían matarlo rápidamente, Si ¿por qué no lo hacían? ¡Por qué ese maldito cazador siempre estaba un paso por delante de ellos! Y era simple: Bill Clayton era el único cazador que había podido meterse a los bosques encantados y vivir para contarlo...

- Ah... que hermosa mañana... el sol brilla, las sirenas nadan, las hadas vuelan – dijo mientras golpeaba una pequeña hada que pasaba frente a él – parecen moscas insoportables... ahora... veamos que tenemos aquí.

- B-Bill – llamo un chico un poco más joven que él, de cabellos negros algo azulados y ojos celestes, su medio hermano menor, William – ¿Estas seguro de estar aquí? He oído que... es peligroso este bosque...

- He estado aquí mil veces, Will – sonrío – y mira, sigo vivo...

- Y todos te temen...

- Eso solo demuestra lo poderoso que soy – rió mirando a su hermano con una sonrisa – oh mira... creo que tendremos dientes de ciervo para esta semana.

- Odio los dientes de ciervo – susurro.

- Pues yo los amo, son un buen ingrediente para las pociones...

Will era el medio hermano menor de Bill, era todo lo contrario a lo que su hermano mayor podía ser, aunque ambos hermanos vivían de la caza a Will no le gustaba matar seres indefensos, eran muy diferentes uno del otro, si uno decía blanco el otro decía negro, pero eso no evitaba que se llevaran bien... Will era el que cocinaba y preparaba los remedios mágicos que vendían en el mercado para mantenerse, a veces lo acompañaba al bosque para recoger algunos ingredientes para los remedios o ayudar a Bill a llevar lo que él llamaba la "cena".

La madre de Bill había muerto cuando él acababa de nacer, su padre se había vuelto a casar con la madre de Will quien los crío a ambos durante algunos años, ella había sido quien le enseño a Will a preparar la mayoría de los remedios, el padre de ambos era cazador. Fue una noche cuando los hombres del pueblo quisieron explorar el bosque encantado cuando su padre murió... su madre entro en depresión y falleció poco tiempo más tarde dejando a los hermanos solos.

- Mira esto, Will – llamo Bill a su hermano quien corrió hasta donde estaba – Parece que tenemos un pequeño ciervo para la cena.

- No como carne, Bill – se quejo mirando al pequeño ciervo atrapado en la trampa de su hermano, era castaño y tenia unos lunares que formaban una constelación – es un bebé... deberías liberarlo, a penas puede andar.

- ¿¡Qué!? ¡No!

- Y esta herido ¿No crees que su mamá puede estar preocupada? – Will revisaba la pata del pequeño ciervo que los miraba asustado – mira... parece que no es simplemente un ciervo... estas marcas significan que se trata de un chico mitad ciervo... cuenta la leyenda que si dejas vivir a un bebé como este podrás encontrar a tu verdadero...

- A-BU-RI-DO – Will miro molesto a su hermano – esta bien... lo liberare... pero no por esas tontas leyendas, sino porque si no lo hago te la pasaras llorando todo el tiempo, hermanito – rió mientras cortaba las cuerdas de la red, liberando al pequeño ciervo – bien... iré a ver que cazo, regresa a la cabaña, Will...

Giro los ojos mientras su hermano se alejaba jugando con su escopeta, no seria extraño que un día esa cosa terminara por dispararle a alguien en medio del bosque con todo lo que jugaba con la escopeta, soltó un suspiro mirando al pequeño ciervo que aun no se podía levantar, tomo unas vendas de su bolsillo para curar la pata de este, el pequeño ciervo castaño aun le miraba asustado.

Lo que no fue escrito (BillDip) #PremiosGravity2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora