Querido Ryan {COMPLETA}

Capítulo 3: Alex

-Buenos días peque. - Me despertó Alex con un dulce beso.

-¡Alex! - Abrí los ojos de un sopetón y me levanté para recibirlo con un abrazo.

Llevaba más de medio año sin aparecer por aquí y todo por culpa de la universidad de Londres.

He de admitir que cuando está Alex no estoy tan triste como habitualmente, él me hace olvidar del mundo en el que estoy rodeada.

Alex ya tiene 21 años, nos llevamos 5 años, aunque la edad no nos importa a los dos, siempre nos comportamos como críos de 10, y como toda ley de hermanos, siempre cae alguna peleita.

Pero eso me demuestra que en esta vida no estoy sola, siempre estará él para ayudarme.

Aunque nunca en la vida le contaré lo ocurrido durante estos 4 años.

- ¿Como esta mi hermanita favorita? - Dijo alegremente.

- Ahora mismo perfectamente porque estás tú. Dime que no te quedarás solamente 2 días por fa, por fa, por fa. - Le supliqué.

Siempre que viene a casa o es para hacer una visita de un día o simplemente para quedarse unas semanitas.

- Lo siento hermanis pero... - Yo ya me descompuse y la soledad se invadió en mi. - Me quedaré durante dos semanas. - Exclamó como un loco.

Yo me levanté de un salto a abrazarlo, enrollé mis pies en su cadera haciendo que me aguantase en ella.

Era el día más feliz de estos últimos años.

-Aaaaaaaaaaaaaa. - Grité como una loca desquiciada.

Me desenrollé de su cintura y empecé a correr por toda mi habitación celebrándolo, dando saltitos de la emoción.

- Ey, Ey, pequeña que tampoco es para tanto. - Dijo este divertido.

¿Que no es para tanto?

Me acaba de hacer la persona más feliz del mundo.

- Pero si llevas mas de medio año sin venir a visitarnos, y eso me ha dolido, muchos días te he necesitado y no estabas allí como lo estabas antes. - Dije ahora triste.

Quería decirle que siempre le necesito pero sabría que el sospecharía así que intenté mentir.

-¿Pequeña pero que te ha pasado durante esos días? - Preguntó preocupado.

¿Mierda ahora que le digo?

Vamos Kate inventa algo rápido.

- Pues... No estoy acostumbrada a estar tanto tiempo sin mi tontito. - Intenté mentir.

- Tranquila peque, a partir de ahora vendré más a menudo o eso intentaré. Los días en la universidad son muy duros pero por hacerte tan feliz como ahora me saltaré algunos días.

Y yo no podría estar más feliz que eso pasara.

- Y ahora al colegio. - Dijo feliz.

Y toda esa felicidad que llevaba se esfumó al segundo.

Y todos los recuerdos de ese sitio me invadieron la mente.

No, no, no, no por favor allí otra vez no.

- Por favor Alex no me lleves allí. - Supliqué.

¿Que haces Kate? Ahora el sospechará algo.

-¿Porque no kate? ¿Tienes problemas con alguien? - Preguntó.

Mierda.

- No no solo es que ya que estás aquí me gustaría pasar el día contigo.

Alex no se creyó mi respuesta ya que este estaba con el ceño fruncido.

Intenté hacer mi mejor cara de pena del mundo hasta que por fin asintió.

- Eres el mejor hermanito del mundo, te amo, te quiero, eres el mejor del mundo. - Le dije mientras le daba cientos de besitos.

- Yo también te quiero pero ¿No crees que me debes una explicación? - Preguntó Alex interesado.

Mierda Kate te ha pillado.