No sé si fueron días, no sé si fueron semanas, el punto es que cada segundo que estuve en esa oscura soledad con mucha hambre, la comida que se veía más prometedora era la única bala del revólver de Walter; Luego recordé que fue el mismo que me dijo que viviera, no sonó como una sugerencia cuando algo o alguien se lo llevaba. Solo pensaba en seguir caminando y no perder la esperanza de algún día encontrar una salida de este laberinto. Llegó un punto en el que empecé a hablar conmigo, prometedoras charlas aquellas. Cerré los ojos y caí. Solo pude decir
–Lo siento... Walter...
Desperté y solo veía una cara con una hermosa sonrisa; Era el rostro de una mujer que me susurraba –Leonard. Leonard -Con dulzura.
Luego vi de nuevo ese árbol y a mi debajo de él.
Desperté y vi una cara angelical
– ¡Al fin despertaste! ¡Mucho gusto! ¡Me llamo Ashley! -Mientras me sonreía con mucha sinceridad.
– ¿Cómo llegaste a esos ductos? Es un milagro que estés vivo -Continuó
Mientras otra persona apareció; un hombre.
–Ya déjalo en paz. Recién despierta y ya lo invades de preguntas.
–Lo siento... -Respondió con pena la hermosa chica.
Era rubia, con un cabello largo y liso, tenia unos ojos azules que te hipnotizaban, su nariz era pequeña al igual que sus labios, era de baja estatura, delgada y de piel blanca un tanto bronceada, tenia unas botas de color marrón, un short corto de color negro y también tenia puesto un top corto de color negro.
–Me llamo Carlos. Mucho gusto -Me aclaró aquel sujeto
-Me llamo Leonard -Respondí con duda.
Carlos era un tipo bastante alto, delgado, moreno de piel, cabello negro, ni muy largo, ni muy corto; Parecido al mío, tenia la cara un poco alargada, ojos claros como grises, su barba era de pocos días de crecer, tenia una franela manga larga de color azul, un pantalón de color verde militar y tenia un gorra de color marrón. Se mostró bastante amigable.
– ¿Ya despertó el bello durmiente? -Dijo alguien al costado; Era alto, musculoso, cabello castaño corto, tenía tatuajes, sus ojos eran marrón oscuro, su tono de piel era blanco, tenia un sueter de color negro, que le quedaba algo ajustado y un pantalón igual al de Carlos, con unas botas negras.
–El amargado se llama Rex -Contestó Carlos.
- Ella se llama Sofía -Dijo mientras señalaba a una chica sentada en un rincón.
Cabello negro corto, tenía un mechón de color rojo, su contextura era delgada, a pesar de su cara de poco amigos era bastante bonita, sus ojos eran negros y un poco grandes, de piel blanca un tanto mas pálida que la de Ashley, tenia un suéter de color gris oscuro y usaba una pequeña falda de color negro, con franjas rojas. No quise mirarla mucho.
–Y finalmente él es Chop.
Frente a mi cara apareció un rostro sonriente que me extendía su mano, la que no dude en estrechar. Tenía poco cabello de color rubio, muchas cicatrices en su cuerpo (Puesto que estaba sin camisa) y en su cara le faltaban un par de dientes.
– Hola Chop.
Y sin recibir ninguna respuesta.
– Chop no habla -Me aclaró Carlos.
- Cuando lo encontramos era el único sobreviviente de su grupo.
– ¿Sobreviviente? -Pregunté.
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Las Tres Guerras: Luz
Science FictionLas Tres Guerras: Luz, Narra la historia de Leonard, un chico que despierta en un laboratorio donde hacían experimentos con el. Al poder escapar descubre que no es como las personas normales, sino que esta encogido a un tamaño muy pequeño, todas las...