Infiltradas 2: Pagando el precio

Brindis

Quinn se mantiene concentrada en los nuevos contratos de la empresa cuando alguien golpea a la puerta.

-¡Adelante!- anuncia en voz alta y mira por encima de sus modernas gafas color celeste a Nash, el joven de dieciocho años que se ha vuelto su gran compañía y que trata casi como a un hermano menor

-Señorita Carson- saluda y ella sube las cejas, recordándole algo- Lo siento, Quinn...alguien está esperando por ti

-Hazlo pasar no tengo tiempo para salir ahora mismo- señala y entonces la puerta se abre un poco más para darle paso a Matt que ingresa vestido con sus jeans gastados y su típica chaqueta negra

-Quinn- suelta con su usual tono antipático y antes de tomar asiento le dirige una mirada a mi guardaespaldas que dice "Lárgate", sin ningún disimulo

-Estaré bien- aseguro en dirección al chico y él asiente antes de retirarse, entonces me fijo directamente en mi inesperado invitado- ¿Qué pasa?

-Shawn iba a venir en mi lugar, pero decidí impedir que cometiese alguna otra estupidez y tomé la decisión de hacerlo por mi cuenta

-Qué heroico- ironizo pero él le resta importancia

-Están invitadas a la fiesta de compromiso de James, esta noche- espeta cruzando los dedos sobre mi escritorio y aguarda por mi reacción

-¿Y creen que iremos?

-Pues parece que todas nos superaron hace tiempo así que, ¿por qué no?

-Mira no tengo idea de los sentimientos de Meaghan hacia ti, pero no todo el mundo se toma las cosas de la misma manera- sentencia y el otro abre los ojos, sorprendido

-¿No has superado a mi pequeño hermano?

-Y a ti qué te importa Matt, no tienes sentimientos- insiste y él golpea el escritorio con el puño

-¡Tú no sabes eso! ¡No me conoces!- exclama demasiado alterado por el comentario- Meaghan ella...-suspira y descorre la silla antes de continuar- Solo vayan si se les antoja y si no me vale mierda lo que hagan, son sus vidas

Se incorpora y sale, cerrando de un portazo y sin mirar atrás un segundo. Instantes más tarde Nash ingresa de nuevo a la sala y se acerca a su jefa claramente preocupado.

-¿Estás bien?- inquiere en un tono calmo

-Claro, llama a las chicas por favor, tengo un comunicado para ellas

Poco después Leslie y April ingresan al despacho de su amiga, vestidas con ropa casual y acompañadas de la dulce presencia de pequeño Will que se lanza a los brazos de su tía en cuanto pone un pie en la habitación.

-¡Hola peque!- saluda ella y lo abraza un minuto- ¿Quieres algo de helado? Estoy segura de que Nash te servirá un poco, compré de tu sabor favorito la semana pasada

-¿De verdad? ¡Eso es genial!- se lanza de los brazos de su tía y corre fuera de la habitación- Jason y el tío Enzo también compraron un poco ayer

-Entonces ve a disfrutar por partida doble- señala la otra y el pequeño desaparece

-¿Qué pasa Quinn? Vinimos enseguida- explica April

-Matt vino esta mañana para invitarnos a la fiesta de compromiso de James- replica- No dio más detalles, solo eso

-Que los jodan, no pienso ir- remarca Leslie- Y mucho menos llevar a Will

-¿Y cuándo le dirás la verdad?- inquiere Quinn- Tal vez cuando la bomba te explote en la cara

-Va a casarse con la estúpida de Savannah- reprocha en un tono de acusación- ¿Cómo esperas que vaya a allí a festejarle?