Me levanté de la cama y miré con curiosidad el bulto a mi lado. Corrí lentamente la manta para admirarlo: era un buen semental, todo músculo y una polla que antojaba volver a chupetear. Suspiré, no era el momento para pensar en sexo porque el maldito despertador marcaba las siete y tenía una cita urgente en la oficina.
―Hola, hermoso ―dijo mi acompañante despertando. Regalándome su mejor sonrisa y confirmando mi ley de la roña mañanera viril: Todo hombre hermoso bajo las luces de un bar tiende a verse comestible cuando acaba de despertar después de un buen follón. En el caso de las mujeres no aplica, ellas lucen feas; con el maquillaje corrido y el pelo despeinado; las mujeres son dechado de delicadeza y despertar con resaca, oliendo a sudor y sexo no les queda. Es lo que me han dicho, no soy experto en faldas. Lo mío son los hombres, como este precioso semental que esperaba mi respuesta.
―Vístete, se hace tarde ―espeté despectivamente saliendo de la cama, buscando a mi alrededor su ropa para arrojársela a... No recuerdo su nombre, pero a quién diablos le importa―. No pretenderás quedarte aquí encerrado mientras voy a trabajar.
―Un buenos días hubiera bastado. ―Al parecer se ha enojado, pero me importa una mierda. Ha sido una noche increíble, pero no es como si fuera a volver a verle. Se acerca y besa mi mejilla antes de preguntar si puede usar el baño.
Quedé en llamarlo y nos despedimos con un beso nada apasionado. Miré el reloj, tengo el tiempo justo para acicalarme y llegar a la oficina antes que Xavier Fraser se presente acompañado con ese delicioso cliente que tendré el placer de asesorar. Aunque lo que quiero es ofrecerle otro tipo de servicios. Miré el calendario con satisfacción, por fin Gabriel estaba de regreso, era una pena, disfruté las vacaciones llamándolo para preguntarle estupideces y poner a prueba su paciencia. No podía hacer otra cosa, lo echaba de menos. Mucho, quizá demasiado. En tres años no me había abandonado, pero él me obligó a otorgarle vacaciones.
Cuando llegué a la oficina me sorprendí porque todos estaban reunidos alrededor de Gabriel. No pude hacer otra cosa que mirarlos con dureza. Él es mi asistente y no lo voy a compartir con nadie más. Con sequedad dije: "Buenos días" y me metí en mi despacho. Conté hasta tres y ahí estaba él. ¡Cómo lo había echado de menos!
―¡Buen día señor Rossi! Aquí tiene su café y la correspondencia. He vuelto a programar sus citas según el cronograma de la Corte. Llamé a la señora Spencer para darle instrucciones según lo que me comunicó en el e-mail: Su casa de verano estará lista para el fin de semana. El señor Patterson lo llamó en tres ocasiones y...
Miré a Gabriel detenidamente, lucía algo cansado y quise hacer algún tipo de mordaz comentario, pero me lo reservé para más tarde. Mientras me entregaba todos los recados me detuve en la forma de sus labios, carnosos y sensuales, en las espesas pestañas largas, la nariz recta, el mentón cuadrado, los ojos oscuros... Suspiré interiormente. Ese era el efecto sedante de Gabriel así que sacudí la cabeza.
―¡Qué! ―No presté mucha atención, pero me pareció escuchar el nombre de mi ex.
―Alex Porter vendrá a verlo esta tarde.
―¡Dile que no estoy! ¡Que fui a la corte! ¡Que me comió un cocodrilo! ¡Cualquier cosa que impida que se presente aquí!
―¡No sea cobarde! ―espetó mirándome fijamente. ¡Cómo detesto que haga eso! Él me miró de manera regañona antes de comenzar con el sermón―. Deje de huir de su ex, ha pasado un año. Debería plantar cara al problema y resolverlo de una vez. Cuanto más dilate la situación más veces tendrá que verlo. Sabe una cosa, he llegado a pensar que la razón por la que no quiere ponerle fin a ese tema es porque ha decidido aferrarse a eso como una tabla de salvación: espera que, con el tiempo, Alex considere la situación y decidirán regresar juntos otra vez.
ESTÁS LEYENDO
CAMBIO DE PAÑALES
Short StoryAl final, familia es familia, pero el amor siempre estará ahí Historias cortas sobre padres gay y familias homoparentales. Portada: Agradecimientos a @jorbeilyssequera ******************** ADVERTENCIA: Contenido LGBTI, lenguaje ofensivo, no apto pa...